Las autoridades locales y la PGR han minimizado la ola de asesinatos

Grave incremento de crímenes por homofobia y contra mujeres en Sonora

Organizaciones no gubernamentales demandan respeto al derecho a la diversidad

JENARO VILLAMIL ENVIADO

Hermosillo, Sonora, 12 de junio. En medio de un paulatino avance de las organizaciones locales defensoras de los derechos sexuales y de la diversidad, en los pasados dos años se han registrado crímenes por homofobia que han cimbrado a la opinión pública y que corren paralelos con, por lo menos, 22 homicidios contra mujeres en las ciudades de Nogales, Agua Prieta, Obregón, Guaymas y San Luis Río Colorado.

Asesinatos de mujeres y de gays se han convertido en parte del panorama cotidiano de la nota roja de esta entidad y las autoridades ministeriales minimizan cada uno de ellos, bien como "crímenes pasionales" o como homicidios contra mujeres y varones de "vida disipada".

Por ejemplo, en Nogales, donde hace una semana se registró el doble homicidio del candidato a regidor de Convergencia, Jorge Armenta, y su pareja, Ramón Armando Gutiérrez, también han ocurrido crímenes de odio contra mujeres, como fue el caso de una adolescente torturada y mutilada, cuyo cuerpo se encontró el 13 de agosto de 2002; y el de otra mujer hallada en un basurero, el 30 de septiembre del mismo año. Apenas el 18 de marzo pasado se halló en otro predio el cuerpo descuartizado de otra mujer.

La mayoría de las asesinadas son migrantes y se presume que pretendían llegar a Estados Unidos

Una lista de crímenes que no cesa de crecer

En Hermosillo, Sonora, a principios de este año, fue asesinado el joven gay Alfonso Fierro López, de 29 años de edad, a manos de César Espinoza Andrade, de 21 años, en la colonia El Sahuaro. El criminal fue capturado el 3 de enero de 2003. Los vecinos de Fierro López, de acuerdo con la información de la prensa local, intentaron linchar al homicida después de que éste reconstruyó el crimen.

Según la nota publicada por el periódico Cambio, el asesino "indicó que la víctima le estaba practicando sexo oral y repentinamente lo lastimó en sus órganos genitales, por lo que reaccionó y lo pateó ocasionando que se impactara contra un muro y ya de ahí (sic) le puso el pie en el cuello para golpearlo con una roca en la cabeza hasta matarlo".

Este homicidio ocasionó la primera protesta formal y organizada de los gays, travestis y vecinos de Alfonso Fierro contra los crímenes por homofobia. La segunda protesta más fuerte sucedió durante el funeral de Jorge Armenta, el pasado 3 de junio en Nogales.

Guillermo Núñez Noriega, organizador del recién realizado festival Diverciudad, documenta dos asesinatos más de homofobia registrados este año en Sonora. Calcula que la cifra de crímenes de este tipo puede duplicarse, ya que sólo se consignan los que la prensa local reporta.

"Nosotros hablamos de crímenes de odio o de ejecución, porque se trata de humillar y castigar a las personas por su orientación sexual o por su condición de género", subrayó Núñez Noriega, quien también encabeza en la entidad la Comisión Ciudadana contra los Crímenes de Odio por Homofobia.

Recuerda que el primer festival Diverciudad se realizó en homenaje a Darío Galaviz Quesada, un catedrático local, asesinado con 27 puñaladas en Guaymas, en 1993 y cuyo crimen cimbró a la opinión pública de Sonora, por la saña y por el reconocimiento de este maestro universitario en la comunidad local. Darío Galaviz escribía crítica de arte y literatura en periódicos como El Sonorense. "Era un personaje local, una especie de Salvador Novo sonorense. Su presencia abrió camino y acostumbró a la existencia de otros estilos, de otras sexualidades", recuerda Guillermo Núñez.

Subraya que el crimen contra Darío Galaviz no generó el nivel de protesta de los recientes asesinatos, aun cuando hubo un nivel de indignación muy grande entre los alumnos y conocidos de Galaviz.

Otro crimen con tintes de homofobia fue el cometido contra el actor de teatro local y locutor de un programa de noticias en la estación La fuerza de la palabra, Alfredo García Márquez, quien destacó por sus críticas ácidas e irreverentes contra la Iglesia y las autoridades locales. Se apresó a un soldado, quien confesó su crimen, argumentando que García Márquez trató de abusar de él.

Crímenes contra mujeres

En el caso de los asesinatos contra mujeres, el nivel de protestas no ha sido tan fuerte como en Ciudad Juárez, pero las organizaciones no gubernamentales han presionado a las autoridades para que resuelven esta nueva ola de homicidios que suman ya 22, de 2000 a la fecha.

La Comisión de Equidad y Género de la Cámara de Diputados destacó recientemente que "la impunidad y los nulos avances en la investigación de los crímenes de cerca de 300 mujeres en Ciudad Juárez parecen haber alentado a las bandas criminales a ampliar su radio de acción a ciudades fronterizas de Sonora", como son Nogales, Agua Prieta y San Luis Río Colorado.

En Nogales, el Instituto Sonorense de la Mujer ha repartido carteles de la campaña Mujeres en alerta, en los que difunde recomendaciones para "evitar ser víctima de un crimen violento". Prácticamente todas las medidas que recomienda responsabilizan a las posibles víctimas de su propia seguridad.

Por ejemplo, entre las "recomendaciones" se sugiere: "siempre camina con la cabeza en alto, segura y no te muestres distraída", "no hagas confianza con extraños", "nunca vayas sola a baños públicos", "nunca te acerques sola a automóviles de personas desconocidas", "grita o corre pidiendo auxilio si te sientes en peligro", y otras frases similares.

Hasta el momento, ni la Procuraduría de Justicia estatal ni la Procuraduría General de la República han tomado cartas en el asunto, mucho menos se han realizado campañas entre las empresas maquiladoras que, en buena medida, son las responsables de la seguridad de sus trabajadoras.