El ex senador participó en la presentación de un libro de Alejandra Lajous

El EZLN no vuelve al diálogo porque el gobierno no cumple su palabra: Payán

Los acuerdos de San Andrés Larráinzar fueron las negociaciones políticas más importantes de los pasados 30 o 40 años, porque todas las fuerzas estaban representadas en la discusión, manifestó ayer Carlos Payán Velver.

Al comentar el libro ƑDónde se perdió el cambio?, de Alejandra Lajous, en la Casa Lamm, el ex director de La Jornada relató su experiencia sobre la marcha zapatista y el rechazo del EZLN a sentarse a dialogar con los gobiernos de Ernesto Zedillo y Vicente Fox Quesada.

"ƑQué fue lo que pasó? Los zapatistas no quisieron volver a sentarse (a dialogar) con el gobierno porque se violó una regla no escrita que señala: el que no cumple su palabra pierde. El gobierno había aceptado y se negó después, y los zapatistas sintieron que no podían dialogar con un gobierno que no había cumplido su palabra."

Ocurrió igual con el nuevo gobierno, "Vicente Fox anuncia desde un principio que va a presentar la llamada ley Cocopa. Yo creí que la actitud del Presidente era arriesgada, pero eso era una tontería y era algo de mala fe".

El ex senador perredista recordó un encuentro que sostuvo con Vicente Fox, Gabriel García Márquez y Roger Bartra. "Yo le dije: 'mire Presidente, yo no sé si hizo esto de buena o de mala fe', y él me respondió: 'por qué me dice eso'. 'Porque su partido (el PAN) y el PRI la van a echar abajo, así están las circunstancias y esto va a ser una tomadura de pelo', le manifesté, y expresé lo que pensaba."

Carlos Payán señaló que el entusiasmo que existía entonces porque se firmaría la paz no era real, debido a que estaba desapegado de los hechos. Después, cuando se aprobó la reforma indígena, "el presidente Vicente Fox dice: 'ya se terminó', y yo aún siento que Marcos en esos momentos pensaba que se iba a avanzar y que el Congreso iba a aprobar la ley Cocopa, pero no fue así y otra vez traicionaron los acuerdos de San Andrés. Y los zapatistas no se sientan a dialogar con un gobierno que no ha cumplido su palabra".

También dijo que en La Realidad, a la salida de los zapatistas, le dijo a don Luis H. Alvarez: "dígame por qué aceptó este cargo (el de comisionado para la paz). Comenzó a sonreír y no me dio una respuesta certera hasta le dije: ya sé, le dijeron que la patria lo necesita, špues se lo jodieron! Y él soltó la carcajada".

La diputada Beatriz Paredes Rangel también participó en la presentación del libro. Manifestó que en la obsesión de tomar decisiones políticas mediante las encuestas, "encontramos una de las mayores debilidades de este régimen".

En relación con el incidente entre Fidel Castro y Vicente Fox en Monterrey, durante la cumbre para el desarrollo, la legisladora criticó a la administración federal: "Ahí hubo otra cuestión manejada con poca pericia. Lo único que no se vale es pecar de ingenuidad, hay una decisión estratégica. Y así como en otras etapas Cuba era emblemática para demostrar que el Estado era independiente en sus principios del respeto a la autodeterminación de los pueblos y la no intervención, aquí Cuba se vuelve emblemático como protagonista más activo en el tema de los derechos humanos. Todo lo demás fue anécdota, y detrás de ella está un replanteamiento estratégico de la política exterior mexicana a partir nuevas coordenadas".

Por su parte, Lorenzo Meyer consideró que no "se trata no de un periodo presidencial cualquiera, sino el del cambio, y su importancia reside en el porvenir, más que lo que está ocurriendo aquí, en lo que está por venir. Sus aciertos y errores adquieren una magnitud mayor justamente por la dimensión fundacional de la democracia política". (ROBERTO GARDUÑO)