Terminan 40 años de espera; apoyarán con enseñanza de oficios

Ex púgiles estrenarán casa en septiembre

JORGE SEPULVEDA MARIN

Luego de 40 años de espera, en septiembre próximo ex púgiles en situación vulnerable, sin dinero, podrán estrenar una habitación en la Casa-hogar gimnasio del boxeador que se habilitará en la zona de Aragón.

Fueron cuatro décadas de espera, porque desde la creación de la Asociación Mutualista de Ex Boxeadores (AME) sus integrantes solicitaron a las diferentes autoridades de esta ciudad el apoyo para hacerse de una vivienda. Hasta ahora lo lograron, aseguró su dirigente Martín Bravo, púgil profesional en la década de los 70.

Epifanio Leyva, peleador profesional de 1954 a 58, agregó que todos los ofrecimientos están por escrito, "y ya no son sólo de palabra como antes".

Indicó que la inversión para adecuar la construcción, ya existente cerca del metro Bosque de Aragón, correrá a cargo del Gobierno del Distrito Federal, gracias al apoyo brindado por Adolfo Salinas, director de Promoción y Desarrollo del Deporte del instituto que dirige el marchista Bernardo Segura.

Los ex boxeadores señalaron que a cambio ellos pondrán la mano de obra de pintura, albañilería y de algunos otros oficios con los que puedan colaborar, para una vez ya instalados brindar sus conocimientos como servicio comunitario a la población circunvecina.

Además, continuaron, se programarán funciones de boxeo y algunas otras actividades para dar mantenimiento a las viviendas, y se cobrará una cuota de recuperación equivalente a dos pesos diarios para el mismo fin.

Presente en la plática, Diego Avila, quien recuerda haber ganado la última pelea amateur al a la postre monarca mundial Julio César Chávez, dijo que el primer beneficiado con una de las 80 habitaciones que se acondicionarán en el lugar será el ex sparring de Chávez, Mario Ochoa, quien sufrió un derrame cerebral y no cuenta con vivienda ni un medio para su manutención.

Igualmente, la asociación buscará traer a esta ciudad a Ricardo Pajarito Moreno, recientemente liberado del Cereso de Zacatecas, ya que por su situación también amerita habitar la Casa del boxeador.

En fin, resumen los ex púgiles, "la tarea que tenemos por delante es difícil aún, porque debemos darnos a la tarea de localizar, rescatar y traer a nuestra casa a todos los compañeros que anden por allí. Porque ya tienen un lugar seguro dónde vivir, dónde trabajar, pero sobre todo dónde ser útiles a su sociedad".