Maestros disidentes desocupan instalaciones carreteras ante la amenaza de desalojo

Toma casetas de peaje la CNTE

Hoy realizarán segunda "megamarcha" de la Plaza de la Constitución a Los Pinos

CLAUDIA HERRERA Y RENE RAMON ALVARADO REPORTERA Y CORRESPONSAL

Maestros disidentes llevaron ayer sus actos de protesta a las casetas de peaje. Durante dos horas dieron paso libre a los vehículos que entraban y salían por las carreteras con destino a Cuernavaca y Puebla, y realizaron un bloqueo de 15 minutos en la México-Cuautla.

La movilización, en demanda del inicio de negociaciones con el gobierno federal, no se prolongó por más tiempo porque el secretario de Seguridad Pública federal, Alejandro Gertz Manero, se presentó a las carreteras adonde se hacían los bloqueos y dio la orden de desalojo.

Al final del día las protestas parecieron dar resultados. Hasta el cierre de esta edición, los profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantenían una reunión con el jefe de la Unidad de Gobierno de la Secretaría de Gobernación, Gonzalo Altamirano Dimas, quien les habría ofrecido la instalación de una mesa nacional de negociación. Para reforzar sus medidas de presión, los docentes hoy llevarán a cabo su segunda "megamarcha" de la Plaza de la Constitución a la residencia oficial de Los Pinos.

Una nueva movilización tras 28 días de encontrarse en plantón en la ciudad de México, primero en los alrededores de la Secretaría de Educación Pública, y desde el martes pasado en la plancha del Zócalo, en demanda de mayor presupuesto educativo y de mejores prestaciones.

La jornada de ayer comenzó a temprana hora. A las diez de la mañana unos mil 300 docentes de los estados de Guerrero y Michoacán repitieron la protesta de hace dos años y tomaron la primera caseta de la autopista México-Cuernavaca para manifestarse en contra del gobierno federal por su negativa a dialogar con ellos.

A unos metros, detrás del enrejado de la comisaría número 23 de la Policía Federal Preventiva en la delegación Tlalpan, se mantenían como testigos unos 50 elementos de ese destacamento que más tarde fueron reforzados por otro cien.

Al grito de "šAquí y ahora, con la Coordinadora!", los profesores se formaron en diez filas y luego informaron a los cobradores que a partir de ese momento el paso era "libre". Los empleados no tuvieron otra alternativa que dejar de cobrar.

Al principio los conductores se acercaban con temor, porque creían que la autopista estaba bloqueada, pero en cuanto se acercaban descubrían que el cruce era gratuito y que por primera vez no tenían que pagar la cuota de 75 pesos por automóvil y 130 por autobús.

Algunos maestros usaron botes para pedir cooperación a los automovilistas. "Ponga su monedita el que quiera", decía el maestro Arnulfo a los que se detenían en los retenes.

Había quienes daban cinco o diez pesos. Los choferes de tráileres y autobuses hacían sonar su claxon o hacían la "v" de la victoria en señal de apoyo a la protesta magisterial. Pero también hubo gritos de aquellos que estaban inconformes. "šVáyanse a sus estados, flojos!", exclamó el conductor de un Pontiac.

Casi al mediodía aumentó la tensión. Un empleado de la caseta se acercó a los manifestantes para pedirles que se hicieran a un lado para permitir el cobro del peaje. "No los estamos invitando a retirarse, procederemos a ser interlocutores ante las autoridades que ustedes deseen, pero les pedimos que permitan regularizar el servicio", les decía.

El maestro Manuel Hernández, de la sección 14 de Guerrero, les pidió 15 minutos de plazo para consultarlo con los otros docentes que estaban en plantón en la caseta México-Puebla. Finalmente, el empleado y los docentes llegaron a un acuerdo.

Apenas habían transcurrido cinco minutos cuando aterrizó un helicóptero en la comisaría de sector. Se trataba de Alejandro Gertz Manero, secretario de Seguridad Pública, que iba vestido de traje azul marino, corbata y con lentes oscuros.

De inmediato, elementos de la PFP alejaron a fotógrafos y reporteros, por lo que no hubo posibilidad de entrevistar al funcionario. El comandante Héctor Durán se acercó a los dirigentes de la CNTE y les exigió que pusieran fin a la protesta. "Hagan favor de despejar la carretera. Tienen dos minutos para hacerlo", insistía el uniformado.

El profesor Hernández planteó que se les había dado un plazo de 15 minutos y que no se estaba respetando el acuerdo. "Nosotros no somos los intransigentes, ustedes vienen de manera prepotente a desalojarnos".

Pero sus reclamos no sirvieron de nada. "Tienen dos minutos para limpiar el área", recalcaba el comandante mientras los elementos de la PFP se formaban para emprender la marcha contra los profesores. Al final los militantes de la CNTE tuvieron que replegarse.

Enseguida los periodistas cuestionaron las acciones de la PFP. ƑHubo contradicción entre lo que ofrecieron a los maestros y la orden de desalojo? "Qué le puedo decir, hay jerarquías", respondía el comandante.

Al poco tiempo también se presentó el director de Concertación Social de Gobernación, Luis Migliavaca. Molesto, les dijo a los profesores que regresaran a sus estados: "ya se los dije, no se va a instalar ninguna mesa de negociación, los exhorto a que se regresen a sus estados y allá se sienten a dialogar".

Una vez que los maestros empezaron a orillarse, Gertz Manero se retiró en helicóptero y se dirigió a las instalaciones de la caseta de cobro de San Marcos Huixtoco, de la autopista México-Puebla.

En ese lugar los actos de protesta también se habían iniciado a las diez de la mañana. Más de 400 mentores se concentraron y permitieron el paso libre a todos los automovilistas que circulaban en ese momento por la autopista.

Para el mediodía al menos 300 elementos de la PFP formaron una valla a medio kilómetro de la caseta permitiendo que el helicóptero del gobierno federal aterrizara en el lugar. De la aeronave descendió Gertz Manero, quien sostuvo un diálogo privado con las autoridades de la caseta y con el capitán que tenía bajo su mando al grupo antimotines de la PFP. El funcionario sólo permaneció diez minutos en la autopista, dio instrucciones de desalojar la garita en caso de que los profesores disidentes se negaran a desocupar el inmueble.

Claudio Flores, representante de la sección 22 del estado de Oaxaca, llamó a sus compañeros a retirarse del lugar. "No vamos a caer en la provocación del gobierno", y decidieron marchar sobre la autopista con dirección a México.

Después, los más de 400 profesores de los estados de Oaxaca, Puebla, Chiapas, Guerrero, Michoacán y Zacatecas bloquearon, de manera incidental, la garita de la carretera México- Cuautla y luego abordaron sus unidades para trasladarse al Zócalo capitalino.

Casi a las dos de la tarde, ocurrió lo mismo en la carretera a Cuernavaca. Los maestros dijeron haber alcanzado un triunfo político y se retiraron coreando el estribillo del himno de la CNTE, el tradicional "venceremos" .