México D.F. Miércoles 28 de mayo de 2003
El director de la agencia en El Paso rechaza que estén involucrados con el narco
Jefe local de la FBI sale en defensa de Sandoval Iñiguez y Guardia López
RUBEN VILLALPANDO CORRESPONSAL
Ciudad Juarez, Chih. 27 de mayo. El director de la estadunidense Agencia Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) en El Paso, Texas, Hardrick Crawford, leyó una declaración para defender la reputación de José María Guardia López, concesionario del hipódromo de esta ciudad, y la del cardenal de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, con quienes estaba reunido en esta frontera.
En nombre de la FBI, Hardrick Crawford dijo que las acusaciones que hace el ex procurador general de la República, Jorge Carpizo, de que están involucrados en el tráfico de drogas no son ciertas y que el prelado y el concesionario del galgódromo son sus amigos.
Aseguró que ninguno de ellos tienen nada que ver con el tráfico de drogas o el lavado de dinero, como asegura el ex procurador.
Durante una reunión con grupos de católicos efectuada en el restaurante del hipódromo local, y a la que asistió el arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Iñiguez, el representante de la FBI en El Paso respaldó la trayectoria del cardenal y de Guardia López, quienes lo acompañaron mientras daba a conocer su posición sobre los ataques que ambos han recibido de Carpizo.
Por su parte, Sandoval Iñiguez se negó a hacer comentarios. Al preguntarle si dirigiría algún mensaje a los católicos ahí presentes, su respuesta fue: "lo haré cuando ya no estén ustedes" (la prensa).
Al referirse a los señalamientos de Carpizo contra Sandoval Iñiguez, Hardrick Crawford, dijo: "estoy al tanto de las acusaciones que se han hecho en contra del señor Guardia López y del cardenal Sandoval Iñiguez. Estos señalamientos son muy serios, porque les imputan estar involucrados con la mafia de drogas mexicana. No conozco de ninguna participación por parte de ellos, ya sea en actividades criminales o vergonzosas.
"Su eminencia, el cardenal Juan Sandoval Iñiguez y el señor José María Guardia López son amistades mías. Además, considero que el cardenal es un sacerdote extraordinario y un verdadero hombre de Dios, altamente respetado en todas partes del mundo", dijo Crawford.
Asimismo, comentó que tanto él como su familia se sienten honrados de contar con la amistad de Sandoval Iñiguez.
Tras señalar que "la mafia de drogas mexicana es mi enemigo jurado", el agente de la FBI dijo que ha luchado por más de 20 años contra las mafias de las drogas, y a pesar de que en Cleveland y en Ohio lo amenazaron de muerte a él y su familia, nunca dejará de combatirlas.
"Jamás me asociaría con miembros de ninguna mafia de drogas por las razones que he dicho. Estas acusaciones tienen toda mi atención. He jurado defender la ley y procurar la justicia, por tanto, le pido a cualquiera que tenga información que pudiera comprobar estas serias acusaciones, que se la proporcione al procurador general de la República y a mí en El Paso, Texas", indicó.
Crawford dijo que en Estados Unidos las acusaciones que no son específicas se juzgan con incredulidad, "porque yacen allí como carne putrefacta bajo el calor del sol, desprestigiando a hombres honrados.
"Por tanto, si tal información existe, es muy importante que los pormenores, las pruebas de estas acusaciones se develen inmediatamente a las máximas autoridades para su averiguación."
Sandoval Iñiguez llegó a esta ciudad para acudir a un bautizó, informó el vocero oficial del arzobispo, Roberto O'Farrill. El cardenal se dejó ver en compañía de José María Guardia, concesionario de la casa de juego que opera en el hipódromo local y que a juicio de Carpizo es "socio" del cártel de los Arellano.
Al acto asistieron figuras del mundo empresarial y político local ligadas al PAN, quienes ocuparon todas las mesas del lugar. Al convivio, que culminó con un bufete de comida china bendecida por el arzobispo de Guadalajara, no asistió el obispo de Ciudad Juárez, Renato Ascencio de León.
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