MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

A cambio de acuerdo migratorio, sensibles declaraciones

Rigurosa dicotomía entre discurso y práctica

BIEN HA DICHO EL CENTRADO canciller Derbez que la prioridad para el gobierno mexicano es el combate al terrorismo y después, si hay tiempo, atenderá la delicada situación de miles de emigrantes mexicanos que, expulsados de su tierra, buscan la vida en otras latitudes.

COMO EL PRESIDENTE FOX ya tuvo la amabilidad de deslindar a su gobierno y a sus gobernados de la comisión de cualquier acto terrorista que pudiera ofender al sensible baby Bush (toda vez que se ha demostrado fehacientemente que ninguno de los modernos kamikaze utiliza pasaporte con el sello del águila y la serpiente), el inquilino de Los Pinos decidió, más rápido que una saeta, entrarle de lleno al tema migratorio.

UN DESPACHO DE LA agencia oficial Notimex da cuenta del enojo presidencial y retomando sus declaraciones a The Washington Post subraya que Fox dijo que "la muerte de 19 inmigrantes ilegales en Texas hace dos semanas, constituye el último testimonio sobre la urgente necesidad de un nuevo acuerdo migratorio con Estados Unidos'', al tiempo que ''hizo un exhorto al presidente de Estados Unidos, George W. Bush, para que lleve a cabo acciones en este sentido, ahora que la guerra con Irak ha quedado atrás".

EL "ULTIMO TESTIMONIO", como lo llama el inquilino de Los Pinos, en realidad es la más reciente muestra del salvajismo al que se tienen que enfrentar los mexicanos expulsados de su tierra, porque de 1995 a la fecha más de 2 mil paisanos han muerto en su desesperado intento por huir de la miseria, en iguales o peores circunstancias que la experimentada por los emigrantes referidos por Fox. Hay que sumar las redadas que organizan los racistas granjeros anglosajones que operan en la frontera, que a punta de escopeta se dedican a cazar indocumentados.

LO ANTERIOR, SIN considerar la permanente violación de los derechos humanos de los mexicanos indocumentados que son capturados y devueltos a territorio mexicano por la Patrulla Fronteriza. De acuerdo con cifras del Consejo Nacional de Población, cada año alrededor de 670 mil paisanos, la mayoría de entre 12 y 25 años de edad, padecen esa vejación.

A ESTAS ALTURAS DEL PARTIDO, los compromisos asumidos por Vicente Fox en su campaña no pueden ser considerados más que simples anécdotas. En este sentido, del inquilino de Los Pinos no debe esperarse una acción contundente que conlleve a la firma de un acuerdo migratorio con Estados Unidos.

A CAMBIO DE HECHOS, sensibles declaraciones: "Es muy triste ver morir a la gente por buscar sus sueños... algo se tiene que hacer", declaró Fox al rotativo estadunidense, para inmediatamente después dar a entender, como señala un despacho de la agencia española Efe, que "ha hecho todo lo que Bush quiere en materia de lucha terrorista, como declarar a ésta prioridad número uno de México en la relación bilateral, por lo que es justo que reciba algo a cambio... Es entendible que existe la preocupación (sobre el terrorismo), pero debemos ser pragmáticos y objetivos al evaluar la situación. Ningún terrorista ha entrado por México y ninguno ha sido mexicano". Además, sostuvo Fox, ''México tiene una sociedad muy sólida y clara con Estados Unidos para trabajar juntos contra los terroristas... (de hecho) muchos emigrantes -incluyendo muchos de origen mexicano- participan en el ejército de Estados Unidos, defendiendo la seguridad del país".

ƑY EL ACUERDO MIGRATORIO? De la enchilada completa propuesta, México, su gobierno, sólo ha recibido la hortaliza.

EL ANTERIOR NO ES EL UNICO caso que puede ejemplificar la rigurosa dicotomía existente entre el discurso y la práctica del autodenominado gobierno del cambio. ƑCuántas veces ha dicho el inquilino de Los Pinos que la industria eléctrica mexicana no se vende? ƑCuántas rechazó que se estuviera dando la "privatización silenciosa" del sector"? Todas.

RESULTA, SIN EMBARGO, que "12 grandes trasnacionales de Estados Unidos, Canadá, Europa y Japón mantienen ya en su poder 30 por ciento de la generación de energía eléctrica de México, entre las cuales se encuentran firmas como Enron, Iberdrola, Mitsubishi, Unión Fenosa y Alstom. Para estos inversionistas no ha sido necesaria la reforma eléctrica para que se les hayan abierto las puertas del sector" (La Jornada, Patricia Muñoz).

LA LIMPIDA Y TRANSPARENTE trasnacional Enron detenta 9 por ciento de la generación privada de energía eléctrica del país; Iberdrola, 15 por ciento; Mitsubishi, 13 por ciento; Unión Fenosa, de España, más de 10 por ciento, y en menor proporción los consorcios Alstom, de capital franco-alemán; ABB-Nisho Iwai, de inversión suizo-japonesa, y GE-Bechtel, de Estados Unidos. Además ya están en el país Intergen, de Estados Unidos; Abengoa, de España; Transalta, de Canadá; EDF, de Francia, y Nichimen-AES, de inversionistas japoneses y estadunidenses.

DE ACUERDO CON LO publicado por La Jornada, con base en información del Sindicato Mexicano de Electricistas, "prácticamente están todas las grandes empresas mundiales de energía eléctrica operando en nuestro país, sin que (oficialmente) se haya abierto este sector a la inversión privada. El gobierno mexicano, mediante el otorgamiento de convenios de licitación, les ha dado la entrada formal, sin problemas de regulaciones, sin el establecimiento de requisitos de inversión y hasta violando la Constitución... Además de las grandes trasnacionales del sector también se han colocado otras empresas más pequeñas, las cuales han sido en los años recientes 'compradas' o fusionadas con los corporativos. El gobierno no sólo las ha dejado entrar, sino hasta les ha dado negocios".

LO BUENO ES QUE NO TODAS son malas noticias. Aunque su veracidad es a todas luces cuestionable, ayer Notimex difundió una excelente: "La señora Marta Sahagún de Fox dijo que debido al contexto actual y a las implicaciones que han generado sus acciones, llegó el momento de ser prudente y quitarse los reflectores de encima, aunque no precisó al respecto..."

Las rebanadas del pastel:

LO MEJOR DE LA CONFERENCIA ofrecida por el ex marido de Martita, actual candidato a la alcaldía de Celaya, fue la siguiente definición: "A los panistas se les conoce como los meseros, porque se hacen pendejos con el cambio".

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