Propone negociar con migrantes, no con EU

Querida Carmen: Sucedió una vez más: 18 migrantes, 13 de ellos mexicanos, murieron encerrados en el vagón de un camión en Victoria, Texas. Por desgracia, tragedias similares volverán a ocurrir. De hecho, en la zona fronteriza muere en promedio un migrante cada día, en tanto que ahí mismo miles de ellas y ellos padecen cotidianamente abusos. De ser un oficio, emigrar sin documentos sería uno de los más perjudiciales del mundo.

Los migrantes son nuestra fortuna, y también nuestra vergüenza. Sin la contribución que hacen a sus familias, sus regiones de origen y al país en su conjunto, México estaría gravemente enfermo. A ellas y ellos, no al FMI, al TLCAN o a la economía de mercado debemos el mayor y más eficiente programa de solidaridad social, creación de industrias locales, protección de empleo, comercio regional y mejora de servicios básicos en miles de comunidades del territorio nacional. Son las y los migrantes el otro gobierno y la otra iniciativa privada que nos mantienen a flote. Por ellos y ellas gozamos de un país en relativa paz y salud económica.

Con todo, no hemos sido capaces de hacer efectivos sus derechos de voto y pertenencia a la comunidad democrática del país, de incorporarlos a los libros de texto de nuestra historia patria o poner fin por medios legales a las políticas estadunidenses de control fronterizo que causan su muerte. Pocos países se han beneficiado tanto de sus migrantes como México. Pocos también, los que siguen teniendo para con ellos una deuda tan grande de reconocimiento y aprecio.

No somos los únicos. Si por una parte Estados Unidos se enorgullece con toda razón de ser tierra de inmigrantes, por otra es el país donde el imponente desarrollo logrado se finca en gran medida en la sangre, sudor y lágrimas, la esclavitud misma, de millones de mujeres y hombres de todas las razas. Ningún país recibe un número tan alto de inmigrantes como Estados Unidos, pero ningún otro igualmente les hace pagar tan caro el arribo a "la tierra prometida".

Cuando en México decidamos por fin crear una política migratoria, nos daremos cuenta que "la enchilada completa" no está en la negociación con Estados Unidos, país que cuando negocia arrebata, sino entre nosotros y nuestro pueblo migrante.

Primitivo Rodríguez Oceguera

Señora directora: La espiral represiva que lleva adelante con escandalosa impunidad el gobierno de José Murat ha hecho de Oaxaca la entidad con mayor violencia institucional de toda la República. Allí se suceden los atropellos de caciques locales, funcionarios priístas, jefes policiacos, guardias blancas de corte paramilitar y empresarios amparados bajo la bendición de los tres poderes. Los zapotecos de la costa y la montaña, los pueblos mixes, las comunidades en la Mixteca, la Mazateca y el istmo de Tehuantepec padecen un estado policiaco y militarizado que sólo protege la ilegalidad de la ley gobernante.

En este contexto, el pasado miércoles 14 de mayo fue detenido y encarcelado Carlos Manzo, colaborador de nuestro suplemento, quien se ha destacado por su inquebrantable defensa de los derechos de Unión Hidalgo y los pueblos de la región zapoteca. También se encuentran encarcelados Luis Alberto Marín, Francisco de la Rosa Morales y Jesús Vicente. Son sus acusadores quienes deberían estar presos: delincuentes como el ex alcalde Armando Sánchez Ruiz y sus colaboradores Ricardo Ruiz de la Rosa, Felipe Martínez y Lisandro Martínez (este último, cabecilla de un grupo violento que se hace llamar Policía). Pero no, pues en la Oaxaca de Murat resistir es el mayor delito.

Exigimos la liberación inmediata de los detenidos, así como el cese de las agresiones contra Unión Hidalgo y todas las comunidades indígenas del estado.

Ojarasca: Hermann Bellinghausen, Eugenio Bermejillo, Yuriria Pantoja Millán,  Ramón Vera Herrera

Señora directora: En relación con la polémica suscitada en torno al mural Alegoría nacional, de Orozco, y en respuesta a una carta publicada el 7 de mayo en El Correo Ilustrado de ese prestigiado diario, suscrita por Vicente Miguel, Olga Mejía y Virginia Torres, le ruego publique lo siguiente:

En un escrito publicado en esta sección el 26 de abril, expuse las razones históricas, artísticas y culturales por las cuales la comunidad de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros considera que el mural de Orozco no debe ser trasladado, así como sendas solicitudes realizadas ante la Delegación Miguel Hidalgo y el Instituto Nacional de Bellas Artes, para el retiro de puestos ambulantes y la restauración y mantenimiento del mural, respectivamente.

Durante los dos años de gestión, el cuerpo directivo que represento, junto con muchos maestros, alumnos, trabajadores, ex alumnos y personas interesadas en apoyar a nuestra institución, ha desarrollado un programa de difusión cultural, entre cuyas acciones destacan la instalación de esculturas en los corredores y jardines, la instauración de una galería de arte y la realización de diversas exposiciones artísticas, conferencias magistrales, conciertos, obras de teatro y danza, así como dos eventos académicos internacionales de alto nivel: el Simposium La formación del docente de educación básica y el ciclo de conferencias sobre formación docente. Además, nuestro patrimonio artístico, incluido el mural, continuamente es objeto de visitas por grupos y personas nacionales y extranjeras.

Coincidimos con los profesores arriba citados en que la solución no es que se "saque" el mural "de donde lo creó el artista (sic)", pero llama la atención que utilicen esa defensa como pretexto para el denuesto y la descalificación infundada. El compromiso que tenemos los normalistas, incluidos ellos, como única vía para el prestigio de nuestra institución, es el de la entrega ética y profesional en todas las tareas y proyectos académicos, culturales y sociales que conduzcan al prestigio y fortalecimiento de nuestra escuela.

Contrariamente a lo que aducen en su escrito, estos profesores se han opuesto sistemáticamente a la creación del Consejo Académico, que sería el órgano idóneo para proponer a la SEP los mecanismos de designación y el periodo de duración del director.

Las instituciones educativas, entre ellas la nuestra, son construcciones sociales históricas que no dependen de las políticas partidistas; afirmar que porque hoy gobierne un partido convierte a toda autoridad escolar en "cría de la burocracia panista" es no sólo un execrable reduccionismo, sino muestra del desconocimiento de las dinámicas sociales que dan vida a las instituciones. Desde nuestra función directiva hoy, como desde nuestro papel como profesores siempre, seguimos comprometidos en la indeclinable defensa de nuestra soberanía nacional y de las irrenunciables conquistas sociales de nuestro pueblo, entre ellas la de la educación pública.

Profr. Juan Manuel Rendón Esparza, director de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros

Señora directora: El 14 de mayo de 2003, el periódico que usted dirige publicó (p.46) una nota de su corresponsal en Aguascalientes, Claudio Bañuelos, en la cual afirma que el gobernador de Aguascalientes, Felipe González, es "integrante del Opus Dei".

Me permito aclarar que esa afirmación es ajena a la verdad, ya que el señor Felipe González no pertenece ni ha pertenecido al Opus Dei.

Aprovecho esta oportunidad para recordar a sus lectores que el Opus Dei es una institución de la Iglesia católica con fines exclusivamente espirituales.

Al ponerme a sus órdenes y las de sus colaboradores y lectores para mayor información, le ruego publicar estas líneas para conocimiento de los mismos.

El Correo Ilustrado