El volante, uno de los más veteranos de la actualidad, se despide hoy, en el Pumas-Morelia

Uno desea jugar toda la vida, pero no es posible: España

ABRIL DEL RIO

Decidido a colgar los botines de jugador profesional, Miguel España vivió su último entrenamiento ayer en el estadio Olímpico Universitario, "como si fuera el primero, con el entusiasmo de dejarlo todo, aportar, ayudar a mis compañeros y de vivir el presente".

Miguel España Garcés, uno de los futbolistas más longevos de la actualidad, hoy terminará su carrera y lo hará en activo si esta tarde Hugo Sánchez decide alinearlo en el partido frente a Morelia.

A 20 años de haber debutado en las filas de Pumas, en la campaña 1983-84, y de militar cinco años en Santos antes de retornar a casa, en el torneo Verano 2001, España tomó la decisión de retirarse a los 39 años de edad.

"Uno desearía jugar toda la vida, pero no es posible. Me voy contento, tranquilo, satisfecho y muy agradecido", expresó el veterano, que de lejos, con esa figura menuda, aún luce como un chamaco al que varios de sus compañeros le reconocen la excelente condición física que mantiene.

Ayer no fue la excepción de ese ejemplo, pues como en las más de las prácticas fue el último en abandonar el campo. Esta vez inclusive pareció darse más tiempo, consciente de que afuera aguardaban aficionados a los que repartió autógrafos, así como reporteros y fotógrafos, a quienes Hugo Sánchez cerró las puertas durante la semana.

-¿Qué te faltó en tu carrera?

-En general estoy muy contento con todo lo realizado. Me hubiera gustado a lo mejor tener alguna oportunidad de jugar en el extranjero, estar en algunas competencias para las que no tuve un poco de suerte, pero tuve casi de todo, así que me voy contento porque pude desarrollar una profesión con entusiasmo.

"Tuve triunfos, derrotas, el cariño de la gente, la alegría de venir a entrenar, de jugar, de tener justas internacionales, representar al país, ser novato, ser campeón un par de veces. No alcanzaría a nombrar la cantidad de cosas que me ha dejado en estos 20 años el futbol."

-¿Qué logro es el que más valoras?

--Son varias cosas. Yo diría que uno tiene que ser ciento por ciento profesional, sentir la playera para dar el extra. Hay que hacerlo de un modo honesto, más allá de los resultados, y siempre tratar de tener una superación personal.

-¿Cómo avizoras tu futuro?

-No lo sé, me tengo que preparar. Sí me veo en otra área del futbol que todavía no la tengo bien contemplada, pero quiero prepararme. Dejé inconcluso el curso de entrenador por tantos viajes, como sucedió aquí en la Facultad de Pedagogía, cuando iba iniciando, y también piqué en otras licenciaturas.

"Hay cosas pendientes, entonces tengo que reorganizar mi vida para encaminarme hacia una nueva vocación."

El jugador, mundialista juvenil, titular en el Mundial de México 86 y capitán de selección nacional en un par de ocasiones, se mostró impasible ante la pregunta de si alineará esta tarde.

"No sé. Siempre me he comportado como un soldado, eso lo decide Hugo, más allá de los resultados, siempre he sido respetuoso."

Indicó que al margen de jugar o no pretende hacer un partido de despedida, para el que "espero obtener todo el apoyo del equipo y de la gente que pueda realizarlo. Estoy planeándolo, podría ser un combinado contra Pumas, y si no buscar algún otro equipo", dijo, y mencionó que una opción sería durante la pretemporada.