México D.F. Sábado 17 de mayo de 2003
La política de Aznar, autoritaria
y despreciativa: PSOE
Citarán a comparecer a directiva de tv que dio
espacio a presuntos etarras
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 16 de mayo. La Fiscalía General
del Estado y la de la Audiencia Nacional citarán a comparecer a
los responsables de la televisión pública vasca ETB, por
la difusión, la víspera, de un video en el que tres personas
que hablaron en nombre de la organización separatista vasca ETA
desmintieron que tengan la intención de declarar un cese el fuego.
Fuentes judiciales indicaron que la fiscalía de
la Audiencia Nacional pedirá a los responsables que expliquen los
motivos por los cuales se emitió el video y las circunstancias en
que ETB accedió al mismo.
Luego de esta diligencia, la Fiscalía General del
Estado estudiará las posibles consecuencias penales por la emisión
de la cinta, que recogía una entrevista de los etarras con un grupo
de periodistas.
En
el video, tres encapuchados con una bandera del País Vasco y otra
de la vecina Navarra como telón de fondo, afirmaron que ETA no "mantiene
ninguna tregua tácita" y sólo dejará las armas "si
se garantiza el respeto a la voluntad de la ciudadanía vasca".
El vicepresidente primero del gobierno español,
Mariano Rajoy, señaló hoy que ese tipo de actuaciones son
"lamentables desde el punto de vista democrático, porque no se trata
de dar una noticia, sino que se hace propaganda en una televisión
pública pagada por los contribuyentes".
Empero, el presidente del País Vasco, Juan José
Ibarretxe, declaró a la prensa que el comunicado, en el cual se
rechaza la posibilidad de una tregua, es un "mazazo" para una parte considerable
de la denominada izquierda patriótica vasca, que rechaza la vía
violenta y se inclina por la política en el marco institucional.
El director general de ETB, Andoni Ortúzar, se
declaró sorprendido por las críticas vertidas al ente, al
considerar que el video "es noticia, y cualquier periodista habría
hecho lo mismo".
En tanto, el oficialista Partido Popular (PP) tuvo que
cambiar con premura la sede de un acto electoral al aire libre en la barriada
madrileña de Carabanchel, al que asistió el presidente del
gobierno español, José Mará Aznar, ante la presencia
de más de cien trabajadores de la empresa Sintel, que ya han protagonizado
sonadas protestas contra el gobierno.
En Tolosa, cerca de San Sebastián, la policía
regional del País Vasco, la Ertzaintza, dispersó un
mitin de unos 200 independentistas radicales vascos que respondieron a
la convocatoria de la plataforma de Autodeterminación del País
Vasco, presunta sucesora de la proscrita Batasuna.
Por otra parte, Manuel Marín, vocero en política
exterior del opositor Partido Socialista Obrero Español (PSOE),
denunció hoy que a raíz de la invasión angloestadunidense
a Irak y ante la proximidad de las elecciones municipales, el 25 de mayo,
el presidente del gobierno español, José María Aznar,
practica una "política autoritaria y despreciativa".
La campaña electoral, que la próxima semana
entrará en su fase decisiva, ha elevado el nivel de crispación
y desencuentro entre la oposición y el PP, que teme sufrir un severo
revés por primera vez desde su llegada al poder, en 1996.
Los próximos comicios decidirán el futuro
político de ayuntamientos de todo el país y de 13 comunidades
autónomas, pero también se han convertido en una suerte de
"plebiscito" de los tres recientes años de gestión de Aznar.
Ante las críticas que ha recibido, Aznar ha centrado
su discurso en "el ataque", al vaticinar "desempleo", "fractura de España"
y "crisis" en caso de que triunfe lo que llama "coalición de comunistas
y socialistas".
Por ello el vocero del PSOE propuso responder a esas actitudes
"intolerantes y soberbias" con un voto de castigo.
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