Huautla, Chapopote y Benito Juárez denuncian intimidación

Exigen 2 comunidades de Veracruz y una de Hidalgo retiro de militares

CARLO CAMACHO CORRESPONSAL

Huautla, Hgo., 13 de mayo. Representantes de las comunidades de Huautla, Hidalgo, y de Chapopote Chico y Benito Juárez, en Veracruz, acudieron hoy a los campamentos del 84 Batallón de Infantería para exigir la salida de los soldados y denunciar actos de intimidación en su contra.

En tres camionetas, alrededor de 50 campesinos llegaron al campamento instalado en río Calabozo, en los límites de ambas entidades, donde dialogaron con un reducido grupo de militares, quienes argumentaron que su presencia es "para dar seguridad al pueblo" y evitar el robo de ganado.

Los sargentos Francisco y Julio Hernández sostuvieron que su presencia obedece a una orden "de nuestros superiores" y de ningún modo es para buscar guerrilleros o grupos subversivos, como dicen los militantes de la Organización Independiente de Pueblos Unidos de la Huasteca (OIPUH) y del Frente Democrático Oriental de México Emiliano Zapata (FDOMEZ).

Ramiro Díaz Baltazar, Gabriel Martínez e Isabel Hernández, a nombre del FDOMEZ, reiteraron sus acusaciones de que los militares instalan retenes en localidades huastecas y a cualquier hora del día hacen recorridos por los ejidos, interceptan a los indígenas, los interrogan y les toman fotografías, además de que en algunos casos los encañonan y amenazan para que "demos los nombres de los líderes" de su organización, acusan.

Ramiro Díaz dijo que en la comunidad 21 de julio, "según el testimonio de unas compañeras", los militares pintaron una raya con cal y advirtieron a los lugareños que de esa línea no debían pasar.

En respuesta, el oficial Julio Hernández dijo que en ese entonces "todo era un relajo aquí en la región", pero ahora que "entramos a dar seguridad ya no hay asaltantes, ni gente que se roba las vacas".

"No hacemos daño a nadie, inclusive cuando los niños se acercan a nosotros hasta les preguntamos qué aprendieron en la escuela, cómo les fue"; además hay gente que "viene a darnos las gracias y nos regala café, maíz o frijol, por la seguridad que le damos a su ganado y a ellos mismos", comentó.

Sin embargo, Ramiro Díaz dijo que no es necesaria su presencia porque han dejado "testimonio triste", y demandaron su salida inmediata, pero los soldados sostuvieron que ellos obedecen órdenes y para que se vayan tendrían que pedirlo a la Secretaría de la Defensa Nacional.

Planteó Díaz que se está violando la Constitución, que señala que en tiempos de paz el Ejército debe estar acuartelado. También denunció que se ha encontrado gente encapuchada y se cree que son paramilitares adiestrados por el Ejército para reprimir a grupos indígenas no afines al gobierno.