Hewitt Associates tiene archivos confidenciales del servicio exterior; calificará al personal

Con ayuda extranjera, Derbez continúa purga iniciada por Castañeda en la SRE

Intentan mover estructuras completas de Economía a Relaciones Exteriores: ex funcionarios

ROSA ELVIRA VARGAS

La llegada de Luis Ernesto Derbez a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) representa la instauración ahí del segundo "proyecto personal" en el actual sexenio. Ello se evidencia además, por el desplazamiento y despido continuo de personal diplomático de carrera para imponer a funcionarios procedentes, sobre todo, de la Secretaría de Economía, como en su momento hizo Jorge Castañeda mediante su plan de agregados culturales y del Instituto México, denuncia Ismael Orozco, ex miembro del servicio exterior mexicano.

Además, Orozco acusa que, a semejanza de la venta del padrón electoral mexicano a la compañía estadunidense ChoicePoint, la cancillería entregó todo el historial de su personal a la empresa Hewitt Associates, con sede en Chicago, para realizar la novedosa "evaluación quinquenal'' que contempla la nueva Ley del Servicio Exterior, también conocida en Tlatelolco como ley Castañeda.

Desde el año 2000, Luis Rubén García, Antonio León Zárate y el propio Orozco, los tres miembros del Servicio Exterior Mexicano, entablaron una querella contra la cancillería por las anomalías detectadas en los exámenes obligatorios de promoción. Todavía en medio de ese litigio, el año pasado les fueron asignadas misiones en el extranjero, en lugares y condiciones que consideraron inaceptables, y recurrieron al Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa para promover un juicio de oposición.

Aunque en un principio la demanda fue desechada, acudieron a nuevas instancias y el caso se encontraba ad judice -esto es, en suspensión y sujeto a un fallo que emitiera el tribunal colegiado de distrito en materia administrativa- cuando la Secretaría de Relaciones Exteriores anunció, hace un mes, el cese definitivo de los tres diplomáticos.

La batalla legal continúa, pero en tanto llega a su resolución definitiva Ismael Orozco y Luis García denuncian la actitud de las nuevas autoridades de Relaciones Exteriores de imponer en cargos de relevancia a personas procedentes sobre todo de la Secretaría de Economía, como el subsecretario para América del Norte, Jerónimo Gutiérrez, quien como muchos del nuevo equipo del canciller Derbez carecen de cualquier experiencia en materia de política exterior.

"Medidas como esta no se atrevió a tomarlas ni el propio Jorge Castañeda. Aunque en su caso también hubo una doble medida, es decir, dar a sus amigos las mejores posiciones y privilegios y a los que no lo eran sencillamente darles en la torre; aun así había gente del Servicio Exterior Mexicano en Tlatelolco. Hoy sólo queda el subsecretario Enrique Berruga, quien no me va a extrañar que sea el siguiente que salga", comentan.

Pareciera, dicen, que se trata de una consigna, de desmantelar al servicio. Cierto, sigue habiendo algunos embajadores y cónsules generales que son parte del personal de carrera, pero en lo que toca a la toma de decisiones en la secretaría, "todo es personal que trajo Derbez de Economía, seguramente a la espera de que se modifique la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal, para entonces traer de aquélla la Subsecretaría de Negociaciones Económicas Internacionales''.

No hay que engañarse, dice Ismael Orozco, "es una realidad, y el hecho de que este señor Derbez nos haya dado de baja sin siquiera conocernos ni darnos la oportunidad de explicarle la situación lo dice todo. De un plumazo acabó, en mi caso, con 31 años de servicio, en el de Luis, con 30 años, y en el de Toño León con 25. Los derechos adquiridos, el acervo acumulado y la experiencia los corta de tajo y nos deja en una situación muy difícil, innoble, ingrata. Con eso nos paga el actual gobierno todos los años que destinamos a este servicio, al que entregamos todo un proyecto de vida".

Orozco, quien hoy palia sus necesidades de ingreso con la academia, se rebela y ofusca cuando alude a esta batalla en la que lleva ya casi cuatro años. Los "advenedizos" que llegaron, dice, sin conocimiento en la materia se instalan como "grandes maestros" a firmar actas y decretos sin siquiera detenerse a escuchar a quienes tienen algún conflicto con Relaciones Exteriores.

Vaticina la salida de muchos diplomáticos

Luego, Orozco condenó las evaluaciones al personal diplomático dispuestas por la nueva Ley del Servicio Exterior Mexicano, la cual incluye, asegura, "medidas de carácter persecutorio, depredatorio y de castigo contra el personal del servicio exterior de carrera, sobre todo contra el que tiene mayor experiencia", e introduce una evaluación quinquenal que seguramente tendrá como efecto la baja o despido de un buen número de diplomáticos.

Esto es así, explican ambos, porque se dio a dicha valoración carácter retroactivo -"lo que viola el artículo 14 constitucional- y se medirá el desempeño de todo el personal bajo parámetros que no están claros y, lo más grave, con un diseño elaborado por una empresa extranjera.

Hewitt Associates, dice Orozco, "se metió hasta la cocina de los miembros del Servicio Exterior Mexicano. Expedientes guardados con sigilo y confidencialidad poco le importó a la actual administración entregarlos a esa compañía, la cual tiene ahora en su poder todo el historial del personal diplomático. ¿Esa es la forma de llevar una buena relación con los vecinos del norte? Están equivocados, no pueden poner en riesgo algo que tiene mucho que ver con la seguridad nacional, con la soberanía del país".

Y no le cabe la menor duda; si el proceso de tales evaluaciones, que ya está en marcha, resulta insatisfactorio, "será causal de bajas. Algo anda mal cuando dejas en manos foráneas el examen del personal del servicio exterior de carrera. Quienes resulten afectados ya están advertidos desde antes, pues además se trata de plazas valiosas que necesita la nueva administración".