Empieza cónclave hemisférico frente a la militarización

Bush confunde poder castrense con tener razón: Montemayor

Cuestionan grupos argentinos afán "anexionista" de EU

ELIO HENRIQUEZ CORRESPONSAL

San Cristobal de las Casas, Chis., 6 de mayo. Con llamados a conjuntar fuerzas para crear un gran movimiento en América Latina contra el imperialismo y el neoliberalismo, "que cada día extienden su poder en todo el mundo", más de 600 personas de 26 países participaron aquí en el inicio del primer Encuentro Hemisférico Frente a la Militarización.

Al abrir con una conferencia magistral los trabajos, que concluirán el próximo viernes, el escritor mexicano Carlos Montemayor afirmó: "En nuestros días y en nuestro tiempo está nuestro compromiso. Cada generación tiene que conquistar su propia dignidad, su propia paz. La dignidad y la lucha de nuestros abuelos y ancestros, de los que hicieron revoluciones o las pacificaron, no la heredamos automáticamente".

Hacer conciencia, entre las metas

El argentino Juan Domingo Roque, del Movimiento por la Paz, la Soberanía y la Solidaridad entre los Pueblos y del Jubileo Sur -que preside Adolfo Pérez Esquivel, premio Nobel de la Paz que este miércoles se incorporará al encuentro-, expuso que la idea de las organizaciones sociales que propician esta reunión es trabajar para que los pueblos tomen conciencia de lo que significa la militarización en el continente.

"La idea que manifestamos expresamente es hacer una tarea a mediano plazo para ir trasladando y transmitiendo a la gente y a los medios de comunicación este fenómeno", agregó, e informó que se propondrá que esta reunión se realice una vez al año, como se hace con foros contra el Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y otros.

De acuerdo con Domingo Roque, "no se puede entender la militarización si no se le vincula con el intento de anexión de los pueblos y países al sistema de libre comercio de las Américas, y sin comprender el fenómeno de la Organización Mundial del Comercio (OMC)".

En tanto, María Luiza Mendoça, de la organización brasileña Grito de los Excluidos/as, dijo: "La lucha es contra el capital financiero y sus intereses insaciables, contra la violencia, el machismo, la manipulación política, el ALCA y las políticas de la OMC, del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial".

En su ponencia sobre la militarización y la hegemonía de Estados Unidos, Montemayor manifestó que la guerra "no es un aparato o el cañón que llega disparando o la fuerza aérea que llega bombardeando, sino que tiene un lenguaje, un tiempo, un estudio y una faceta antropológica, científica y económica".

Por tanto, abundó el escritor, entender la militarización ahora "implicaría conocer este tiempo histórico" de preparación técnica de la guerra. Además, el lenguaje de ésta no es "vengo a destruir", sino "vengo a dar democracia, a salvar, a quitar tiranos, a civilizar, a defender, vengo por la voluntad de Dios".

Destacó que actualmente el gobierno de Estados Unidos, encabezado por George W. Bush, "está confundiendo gravemente su poderío militar con tener la razón". En su opinión, "es evidente" que las invasiones territoriales, como en Panamá, Afganistán y ahora Irak, duran semanas, pero los tiempos de ocupación tardan meses o años, convirtiéndose en guerras civiles constantes u ocupaciones permanentes.

También se refirió a la movilización mundial de febrero pasado contra la guerra en Irak. "El 15 de febrero muestra algo inédito en el mundo: solamente podemos actuar cuando la vida nos cubre, nos llena, cuando estamos vivos, así que la historia de la guerra no podemos entenderla sólo como una acumulación".

En rueda de prensa posterior a las ponencias magistrales, la ecuatoriana Esperanza Martínez señaló que "no hay paz donde hay petróleo", pues cualquier justificación sirve para sacarlo. Advirtió que Chiapas está en riesgo, "si en realidad en estas tierras existe la cantidad de crudo que algunos dicen". A su vez, Ana Esther Ceceña expuso que donde esté, la militarización impide que haya paz al imponer la fuerza. "Si queremos paz hay que construir espacios políticos".

Los organizadores del acto indicaron que hasta esta noche se habían registrado 623 participantes originarios de Canadá, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Brasil, Bolivia, Perú, Colombia, Argentina, Cuba, Ecuador, República Dominicana, Haití, Italia, Inglaterra, España, Francia, Filipinas, Palestina, Nigeria, Suecia y México.

El encuentro de San Cristóbal de las Casas fue convocado por las organizaciones Grito de los Excluidos/as, No Violencia Internacional, Jubileo Sur Américas, Red Chiapaneca Frente al Neoliberalismo y Convergencia de Movimientos de los Pueblos de las Américas.