Considera infundada queja priísta por el uso partidista de la imagen presidencial

Favorece fallo del IFE al PAN y a Fox

Sin definir sanción, sí resuelve que algunos espots panistas difaman e injurian al tricolor

ALONSO URRUTIA

El Instituto Federal Electoral (IFE) declaró infundada la acusación priísta contra el PAN, funcionarios del gobierno y el Presidente de la República por el uso partidista de la imagen de Vicente Fox, y consideró que la campaña publicitaria blanquiazul, que atribuía la responsabilidad de buena parte de los males nacionales al PRI, efectivamente viola el marco legal, porque difama e injuria, aunque no definió sanción alguna.

En un extenso dictamen, la Junta General Ejecutiva del IFE sólo consideró parcialmente fundada la queja por el uso de recursos públicos desde la Presidencia en favor del PAN, por lo que determinó turnar el expediente a la Comisión de Fiscalización para que realice la indagatoria.

Si bien el documento reconoce que no es competencia del instituto fiscalizar la conducta de servidores públicos como tales, sí lo es observar que el PAN y sus militantes ajusten sus conductas a la legalidad. Esta parte de la resolución se desprende de las acusaciones del PRI por el uso de Los Pinos como escenario para promover el voto blanquiazul -en especial en el estado de México- y en ella se hablaba no solamente del Presidente y de algunos colaboradores, sino también de la esposa de Fox, Marta Sahagún.

El dictamen corresponde a la denuncia presentada por el PRI contra diversos agravios de que se dijo víctima por parte del PAN y del Ejecutivo federal, en la que plantea que la utilización de la imagen presidencial en la campaña publicitaria panista constituye un factor de desequilibrio en la contienda, ya que uno de los poderes de la Unión es usado, con conocimiento y anuencia de Fox, lo cual es una forma de beneficiarse electoralmente de los recursos públicos.

El PRI alude en su queja a la vinculación del Ejecutivo a la campaña panista mediante descalificaciones al tricolor, al que le atribuyen ser freno del cambio. Asimismo, deplora que una parte del proselitismo panista se haya dirigido exclusivamente a crear perjuicio al priísmo, lo que es una conducta recurrente que debía ser sancionada por la autoridad electoral.

"Al no ajustar su conducta el titular del Poder Ejecutivo y consentirla el PAN, se atenta contra el estado democrático, dando en consecuencia que se afecta la libertad del sufragio al no conducirse las autoridades con neutralidad", señala.

Señalamientos a Sahagún y Elizondo

La queja priísta también recoge la participación electoral de Vicente Fox, Marta Sahagún, Rodolfo Elizondo, Francisco Ortiz y Hugo Nicolás Pérez en favor del PAN en la contienda del estado de México, y se cuestiona el uso de la residencia oficial de Los Pinos como escenario para promover el voto panista.

En sus conclusiones, la Junta Ejecutiva establece que el IFE no tiene facultades para conocer sobre presuntas violaciones de servidores públicos, pero sí puede hacerlo al evaluar la conducta de militantes y como tales revisará la queja, pues los partidos tienen obligación de que sus miembros ajusten sus conductas a la ley.

Más adelante, al referirse a la campaña de espots en los que se responsabiliza al PRI de devaluaciones, robo, mentiras, pobreza, autoritarismo y corrupción que vive el país -todo ello para concluir que se debe quitar el freno al cambio-, la junta considera que esos mensajes trasgreden las obligaciones partidistas contenidas en el artículo 38 del Cofipe.

Según el dictamen, si bien es un asunto de compleja resolución porque se contrapone a otras disposiciones, como la libertad de expresión, es claro que el PAN, "al desplegar esos mensajes, cometió violaciones a la legislación electoral", ya que se concretó a realizar manifestaciones contra el PRI.

"Esa propaganda contra el partido quejoso implica un animus injuriandi, ya que representa la voluntad interna de un sujeto de derecho, como lo es el PAN, que se manifiesta en forma perceptible y produce un resultado formalmente antijurídico, con plena conciencia del partido denunciado de quebrantar el deber contenido en la legislación electoral."

El PAN agravia y violenta al PRI al buscar desacreditarlo, pero la junta consideró infundados la reparación del daño que solicita el PRI, con el argumento de que se involucra en la demanda a los medios de comunicación. Sin embargo, deja a salvo los derechos priístas para proceder por otros cauces.

Por otra parte, el dictamen considera que la utilización de la figura presidencial en la campaña panista no constituye ninguna violación a la legislación electoral, ya que la imagen que figura en los espots no constituye en sí misma una ilegalidad.