Los mítines anticastristas, convocados desde sitios web

Denuncia la embajada de la isla en Francia una campaña de acoso

DE LA REDACCION

Paris, 26 de abril. Eumelio Caballero, embajador de Cuba en París, denunció en declaraciones a este diario la campaña de acoso de que ha sido objeto en días recientes la representación diplomática de su país en Francia y aseguró que, en total, ha habido nueve acciones contra la embajada y "oficinas legalmente establecidas" en la capital francesa, en los pasados 20 días.

El diplomático sostuvo que el personal de la embajada ha podido prever algunas de estas acciones, pues son convocadas desde páginas de Internet del exilio cubano. La última, ocurrida el pasado jueves 24, fue sorpresiva, y auspiciada por Reporteros sin Fronteras, al menos aparentemente.

"La mayoría eran cubanos de aquí. Había también reporteros, pero utilizaron el nombre de esa organización para llevar a cabo una acción contrarrevolucionaria", afirmó el embajador.

Caballero afirma que entre 35 y 40 personas, casi la mitad de ellas con cámaras de video y gafetes de periodistas, intentaron ingresar violentamente a la embajada en Cuba a través del consulado.

Para hacerlo, agredieron físicamente a una ciudadana cubana residente en Francia. "La empujaron y ella se defendió", aseguró Caballero, celebrando que la mujer no haya sufrido daños graves.

El diplomático aseveró que ésta es la novena agresión sufrida en 20 días, no sólo en las instalaciones de la embajada, sino también en oficinas cubanas en París, entre ellas la oficina de turismo Havanatur.

Señaló que además de las consabidas manifestaciones se han arrojado piedras contra las instalaciones, se han recibido numerosas amenazas contra el personal y falsas alertas de bomba.

Indicó que en varias ocasiones los funcionarios de la embajada han estado preparados para estas acciones, debido a que han sido convocadas desde sitios web del exilio cubano anticastrista de Miami. La acción del día 24, sin embargo, fue totalmente sorpresiva, aseguró el diplomático.

Caballero afirmó que el grupo que tomó parte en dicha protesta utilizó "como fachada" a la organización internacional Reporteros sin Fronteras, y que si bien había periodistas entre ellos, muchos de los que participaron en la acción eran "cubanos residentes aquí y conocidos por nosotros".

En su sitio de Internet, Reporteros sin Fronteras afirmó que el embajador "rehusó recibir una carta del grupo", y que "reporteros fueron golpeados por personal de la embajada de Cuba en París" incluidos el secretario general de la organización, Ro-bert Ménard, y el jefe de su división para América Latina, Régis Bourgeat.

El embajador, sin embargo, sostuvo que el grupo en ningún momento intentó darle misiva alguna, y que sus miembros se limitaron a bloquear los ingresos a la embajada y el consulado, encadenándose a las rejas y colocando en ellas carteles anticastristas.

Caballero desmintió también la versión transmitida en los medios de que un equipo de la televisión española hubiera estado ahí para hacerle una entrevista, y aseguró que ninguno de los que participaron en la protesta le solicitó una entrevista de prensa.

"Formaban parte también de la provocación y no habían solicitado ninguna entrevista el embajador", señala el comunicado.

Además, aseguró que fue la policía francesa la que controló a los manifestantes. "Tomaron medidas tempranas de protección a la embajada", afirmó el embajador, quien, sin embargo, agregó que la policía francesa no hizo lo mismo durante otra acción en la representación diplomática cubana que tuvo lugar un día antes y durante la cual "observaron a distancia".

El diplomático aseguró que en cada una de las agresiones que han sufrido las instalaciones oficiales cubanas en París se ha notificado no sólo a la policía, que ha respondido de manera desigual en cada caso, sino también a la cancillería francesa.

Este sábado, en Caracas, dispersaron a un grupo de adversarios y simpatizantes de Castro, quienes se enfrentaron cerca de la embajada de Cuba en la capital venezolana.

El choque comenzó cuando varias decenas de personas se concentraron cerca de la misión diplomática gritando consignas. Poco después llegaron simpatizantes de Castro que enarbolaban retratos del mandatario cubano; cuarenta guardias nacionales tuvieron que separar a ambos grupos, que se atacaron mutuamente con piedras y botellas.