Beisbol y literatura, tema de una charla en Oaxaca

El juego de pelota se extiende al lúdico bregar con la palabra

Muestra alusiva en el estadio Eduardo Vasconcelos

YANIRETH ISRADE

Versos y jonrones, la tinta en pos de un tiro, el bolígrafo al acecho, igual que un bat, y en el campo de juego nueve escritores y un cronista deportivo convocados a una jornada literaria de beisbol cuyos mejores batazos en prosa o de aliento poético han sido registrados en el libro Novena. Juego de miradas literarias sobre el beisbol, compilado por Miguel Angel Flores Ramírez, que se inscribe en la exposición pictórica de Demián Flores Cortés que con título homónimo se presenta en el estadio de beisbol Eduardo Vasconcelos, de la ciudad de Oaxaca.

Las ilustraciones del volumen publicado por Mantarraya Ediciones son autoría de este artista plástico, y con motivo de la exhibición de su obra prosiguen, para concluir el 11 de mayo, una serie de actividades paralelas entre las que destacan la presentación de ese volumen ocurrida ayer en el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca (IAGO) y la charla El beisbol y la literatura, en la que intervendrán Alberto Blanco y Julio Trujillo este sábado, a las 19 horas, en el Museo de la Filatelia.

Devoción por el 9, número cabalístico

Novena. Juego de miradas literarias sobre el beisbol reúne textos de Alberto Blanco, Antonio Calera-Grobet -curador también de la exposición-, Jomi García Ascot (1927-1986), Francisco Hernández, Eduardo Lizalde, Alejandro Ortiz González, Raúl Renán, Gerardo de la Torre, Julio Trujillo y Pedro El Mago Septién.

Se trata, explican los organizadores, de un libro animado por la pasión de los autores, quienes extendieron el sentido del juego de pelota al lúdico bregar con la palabra.

El compilador, Miguel Angel Flores, considera esta obra como ''un acto de devoción al nueve: nueve jugadores, nueve entradas, 27 outs (2+7=9), número cabalístico y talismán que cautiva pasiones, congrega la afición de nueve plumas, con sus serpentinas escriturales y bolas de humo, de símbolos y señales que nos transmiten el secreto de sus lances e íntimos resortes".

Las palabras de El Mago Septién preceden cada capítulo, o entrada, con premisas como ésta: ''El beisbol es un ballet sin música, un drama sin palabras y un carnaval sin colombinas" o ''Si supiéramos tratar a la victoria y a la derrota como dos impostores, todos seríamos campeones".

Una más, a modo de epílogo: ''Los amantes del beisbol jamás se suicidan, porque en el futuro habrá siempre una Serie Mundial", rubrica De la Torre.