Brindan los kurdos entusiasta recepción
a Jay Garner, el gobernador interino
En peregrinación, la mayoría chiíta
exige que salga de Irak el ejército estadunidense
Se apilan desperdicios afuera de los hospitales de Bagdad;
"es el infierno": UNICEF
REUTERS, AFP Y DPA
Kerbala, 22 de abril. La mayoría musulmana
chiíta de Irak celebró este martes una gran peregrinación
en esta ciudad del sur del país, en una ola de fervor religioso,
en la que exigieron la salida de los soldados estadunidenses.
El tono antiestadunidense del peregrinaje musulmán
en la ciudad sagrada de Kerbala contrastó fuertemente con la cálida
recepción que los kurdos -en el norte del país- le dieron
a Jay Garner, gobernador interino estadunidense a cargo de la reconstrucción
de Irak.
Golpeándose el pecho y flagelándose, decenas
de miles de musulmanes chiítas se congregaron en Kerbala, 110 kilómetros
al sur de Bagdad, para realizar una peregrinación que durante mucho
tiempo estuvo prohibida por Saddam Hussein.
Los
dirigentes chiítas afirman que un millón de personas o más
podrían acudir en masa a Kerbala, para la culminación de
la peregrinación de Arbaiin, en honor al Imán Hussein, un
nieto del profeta Mahoma que fue martirizado en la ciudad en el año
680.
"Sí, al Islam, no a Estados Unidos, no a Israel,
no al colonialismo, no a la ocupación", cantaron algunos peregrinos,
al tiempo que abogaban por la unidad entre chiítas y sunitas, en
otro indicio de las dificultades que afronta la misión de Garner.
En Bagdad, una manifestación chiíta antiestadunidense
se convirtió en celebración cuando seguidores del clérigo
Muhammed al-Fartusi festejaron lo que llamaron su liberación tras
ser detenido por las fuerzas estadunidenses.
Los jubilosos partidarios de al-Fartusi desfilaron por
el centro de la capital. No hubo indicios sobre las razones de su arresto,
que las autoridades estadunidenses todavía no han confirmado. "Estamos
contra la colonización y la ocupación, hemos terminado con
un régimen opresivo y no queremos otro", declaró un seguidor
del clérigo.
Mientras, Garner tuvo este martes sus primeras entrevistas
con un dirigente kurdo en el norte de Irak, un día después
de su instalación en Bagdad. El general retirado estadunidense se
reunió en Suleimaniya con el jefe de la Unión Patriótica
del Kurdistán (UPK), Jalal Talabani. La UPK controla junto con el
Partido Democrático del Kurdistán (PDK), de Massud Barzani,
el Kurdistán iraquí desde el fin de la guerra del Golfo,
en 1991.
Garner, quien ayudó a los kurdos a establecer su
autonomía en el norte de Irak hace 12 años tras la guerra
del Golfo, fue abrazado calurosamente por Talabani. Ambos dijeron que respaldaban
la creación de un Estado federal iraquí, como prevé
el presidente George W. Bush.
Garner visitó la universidad de Sulaimaniya, donde
una multitud de jubilosos estudiantes le entregó flores y lo roció
de pétalos. "Le confiamos nuestro futuro", se leía en una
pancarta entre la multitud.
Acuerdo con Mujaidines del Pueblo
El comando central estadunidense (Centcom) con sede en
Qatar confirmó que sus soldados llegaron a un acuerdo de cese del
fuego con el grupo armado de oposición iraquí los Mujaidines
del Pueblo, que operaban desde Irán, indicó el vocero Vincent
Brooks. También el Centcom confirmó que ya tiene en su poder
a Jamal Mustafá Abdala, yerno de Hussein y que figura en la posición
número 40 de la lista de los iraquíes más buscados
por Estados Unidos. El Congreso Nacional Iraquí anunció el
domingo su captura y entrega a las fuerzas estadunidenses.
A su vez, Hatim George, jefe de la delegación del
Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) en Bagdad, indicó
hoy que los hospitales iraquíes funcionan en "condiciones desastrosas",
y destacó como especialmente afectados los centros clínicos
de la capital del país. "Es el infierno", se señala en el
comunicado. Los hospitales necesitan urgentemente agua potable, suministro
eléctrico, medicinas y equipos de cirugía, indicó.
Como la basura no ha sido recogida en Bagdad, montañas
de desperdicios se apilan afuera de hospitales, inclusive vendajes ensangrentados
y extremidades amputadas. En el Hospital Central Infantil, ubicado al oeste
del río Tigris, mueren tantas personas que están enterrando
los cuerpos en los terrenos del centro clínico. Un 10 por ciento
de los muertos son niños, se afirma en el comunicado del UNICEF.
En tanto, cuatro soldados de Estados Unidos fueron detenidos
por intentar robar un millón de dólares, de los aproximadamente
700 millones hallados en unas casas de Bagdad, informó hoy el diario
The New York Post.
Los cuatro soldados, cuya identidad no fue revelada, pertenecen
al cuarto batallón de la 64 división blindada y serán
juzgados por un consejo de guerra, según el rotativo, que citó
fuentes militares.
El dinero, descubierto el pasado viernes por militares
estadunidenses, fue "abandonado aparentemente" por miembros del partido
que gobernaba Irak y altos mandos de la Guardia Republicana que huyeron
de Bagdad, explicó el diario. El tesoro fue hallado por dos sargentos
que buscaban una motosierra para cortar algunas ramas en el lugar donde
se ha instalado su cuartel, en Bagdad, y a los que llamó la atención
una casa pequeña con bloques de hormigón tapiando puertas
y ventanas.