CIUDAD PERDIDA
Miguel Angel Velázquez
Sobre nepotismo y peces gordos
REZA EL DICHO popular: "hasta al mejor cazador se le va la liebre". Y nosotros podríamos añadir: "hay pescadores a los que se les van las ballenas", y peor, "han llenado de pirañas su pecera".
CLARO QUE ESTO va dirigido al flamante candidato de Acción Nacional a una diputación federal y hasta hace algunos días titular de la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam), el brillantísimo señor licenciado Francisco Barrio, a cuya dedicación sabemos que en el mar de la corrupción mexicana nadan "peces gordos" y no existen redes que puedan arrancarlos de esas aguas.
ESA ES LA breve historia del hombre que irá directo a la Cámara de Diputados a tratar de salvar el honor perdido de un panismo seco de ideas transformadoras y rehén de un guión dictado desde Los Pinos que a su vez sigue, al pie de la letra, las órdenes del nuevo patrón del mundo.
PERO NO CREAN que Barrio se fue del todo. En varias empresas descentralizadas, como Diconsa, dejó bien instalados a quienes serán los seguidores fieles de la política de detección y pesca de los males de la burocracia.
LA COSA ES que el secretario particular de Francisco Barrio, Salvador Beltrán del Río, impulsó el nombramiento de César Antonio Vela Elizondo -quien está casado con la señora Concepción Socorro Beltrán del Río- como contralor de Diconsa y según los trabajadores de la empresa podría haber caído en un acto de nepotismo.
DICONSA, COMO SE sabe, mantiene en el DF 13 tiendas donde se venden productos de primera necesidad a precios bajos, para los sectores más desprotegidos de la ciudad. Por eso es de vital importancia que esta dependencia camine derechito.
PERO ESTO PARECE no hacer mella en el contador Vela, para quien el nombramiento antes descrito pareciera poca cosa. Así, el 15 de febrero pasado, el sobrino del señor secretario particular, Raúl Gerardo Maldonado Beltrán del Río, inició su gestión como titular de auditoría interna de la empresa.
EN EL CASO del señor Maldonado hay otra historia que contar, porque este funcionario trabajó como contralor interno de Pronósticos Deportivos, donde, según se dijo, habían caído en la red de la contraloría algunos peces gordos que se fueron por algún agujero, porque nadie supo más del asunto.
TODO INDICA QUE, debido a este acto fallido, Maldonado Beltrán del Río fue cambiado a Fonapo, donde se mantuvo por ocho meses, "sin pena ni gloria", dicen fuentes de la dependencia.
ES NECESARIO ACLARAR, por el bien de todos, que antes de que Maldonado fuera nombrado funcionario de Diconsa, el contador Vela Elizondo trató de negar cualquier parentesco con quien sería el nuevo auditor, y para ello reunió a buena parte del personal, que según las fuentes de Ciudad Perdida, fueron amenazados con ser destituidos en caso de que se hicieran más comentarios acerca de la "supuesta" relación familiar entre los personajes.
EL ASUNTO SE ha complicado porque resulta que ha habido algunos despidos injustificados en la dependencia, según los trabajadores que insisten en que la llegada de un nuevo secretario a la Secodam abre la posibilidad de que las irregularidades puedan ser investigadas y sancionadas, en su caso.
TOTAL, QUE VIENDO las cosas de cerca no vaya a ser que ahora el pescador quede atorado en su propia red y por metamorfosis burocrática termine convertido en pez gordo. Ya veremos.