Protesta de iglesias protestantes y organismos civiles
Condena unánime a EU por el uso de bombas de racimo
Son armas prohibidas por el derecho internacional, dicen
ALMA MUÑOZ, KARINA AVILES Y VICTOR BALLINAS
Iglesias protestantes y organizaciones civiles y de defensa de los derechos humanos condenaron ayer al gobierno estadunidense por utilizar las bombas de racimo o de fragmentación en contra de civiles iraquíes, ya que son "armas prohibidas" por el derecho internacional, e hicieron un llamado al secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Kofi Annan, a sus organismos y a los relatores de la ONU para que condenen esa violación a los convenios de Ginebra. Si no lo hacen, ''con su silencio son cómplices de la masacre''.
Por su parte, el coordinador de Investigación Científica de la UNAM, René Drucker, afirmó que la invasión a Irak está dirigida por una "pandilla de asesinos sin escrúpulos lidereados por el inquilino de Washington, George Bush".
Entrevistado en el marco de la firma de un convenio de colaboración con el Instituto Tecnológico de Tlalnepantla, el científico manifestó que la agresión estadunidense está basada en una serie de "mentiras", pues no se han encontrado las supuestas armas de destrucción masiva.
En tanto, las iglesias protestantes realizarán hoy en la ciudad de México una caminata de condena por la guerra en Irak. Evangélicos, protestantes y anglicanos marcharán del Hemiciclo a Juárez a la embajada de Estados Unidos, y portarán leyendas y textos bíblicos alusivos a la paz.
Mientras, Cáritas Internacional manifestó su preocupación porque el sistema de distribución de alimentos en Irak se vea colapsado por la destrucción de infraestructura, de comunicaciones y transportes. Reportó que Cáritas Irak tiene un fondo de 8 millones 390 mil dólares para atender a un total de 260 mil personas desplazadas.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro, la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, el Foro Migraciones, el Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria y el Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos), en entrevistas por separado, exigieron del gobierno mexicano una postura firme y enérgica en el Consejo de Seguridad de la ONU, y demandaron que presente una iniciativa para frenar la invasión de Estados Unidos a Irak.
El sacerdote Miguel Concha Malo, director del Centro de Derechos Humanos Fray Francisco de Vitoria, destacó que el uso de bombas de fragmentación o de racimo está prohibido por leyes internacionales y los convenios de Ginebra, y su uso viola el derecho humano internacional.