La zona se convierte en motivo de disputa entre Ankara, Washington y Bagdad
Nutrido grupo de fuerzas especiales de EU llega por avión al Kurdistán iraquí
Ataques a posiciones de presuntos aliados de Al Qaeda cobran 35 vidas
REUTERS, DPA Y AFP
Sulaimaniya, 23 de marzo. Fuerzas especiales estadunidenses aterrizaron en cuatro aviones en el Kurdistán iraquí la noche del sábado al domingo para abrir un frente en el norte de Irak, señaló hoy Mustafah Sayed Khader, importante responsable de la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK), aliada de Washington.
El despliegue estadunidense en el Kurdistán iraquí se conoció en momentos en que el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, advirtió al gobierno de Turquía no enviar tropas al norte de Irak, mientras el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, argumentó que los soldados de su país se convertirían sólo en una fuerza de paz y estabilidad si fueran enviados a esa zona.
"Hubo cuatro aviones que transportaban a numerosos militares estadunidenses en el Kurdistán, sobre todo de las fuerzas especiales y están desplegados en toda la región", afirmó Sayed Khader, quien precisó que los aparatos aterrizaron en un aeropuerto cercano a Sulaimaniya.
Esta es la primera vez que se anuncia la llegada por avión de un grupo relativamente importante de tropas estadunidenses al Kurdistán. De hecho, las fuerzas especiales se encuentran allí desde hace varias semanas, pero es la primera vez que se señala el uso de este aeropuerto, reparado por los kurdos.
Otra fuente kurda indicó que se trataría de 280 hombres, muchos de los cuales se posicionaron en torno a Halabja, cerca del enclave controlado por el grupo radical Ansar al Islam, al que Washington acusa de estar relacionado con la red Al Qaeda.
Precisamente, las fuerzas estadunidenses bombardearon nuevamente hoy posiciones presuntamente bajo control de Ansar al Islam, en el norte de Irak, que dejaron al menos 35 "extremistas" muertos, de acuerdo con Dpa, que citó a la televisora Al Jazeera.
Al menos cuatro bombas cayeron en esa zona y combatientes kurdos de la UPK, que controlan los alrededores del Kurdistán, tienen previsto lanzar próximamente una ofensiva terrestre, añadió Sayed Khader, quien precisó que Ansar al-Islam ya está debilitado.
Las posiciones de Ansar al Islam fueron blanco el sábado de un primer ataque con unos 50 misiles de crucero, que causaron un número indeterminado de víctimas.
"Hubo una nueva serie de bombardeos contra Ansar. Se vieron al menos cuatro grandes explosiones, pronto acabaremos con ellos", declaró, y agregó que ese grupo radical, configurado según el modelo de los talibanes afganos, cuenta con unos 800 combatientes. Ansar también es acusado de contar con el apoyo de Saddam Hussein y de producir armas químicas con ayuda de Al Qaeda.
La UPK dispone de unos 3 mil hombres para participar en el ataque y contará con el respaldo de militares de las fuerzas especiales estadunidenses que llegaron a la región para intervenir en la ofensiva contra Ansar al Islam, que controla un pequeño enclave entre la ciudad kurda de Halabja y la frontera iraní, a 80 kilómetros al este de Suleimaniya.
El ataque del sábado también causó 45 muertos entre los combatientes de otra organización islamita del área, Komala Islami Kurdistan (KIK) o Sociedad Islámica del Kurdistán, en la localidad de Jormal, y que estaría relacionada con Ansar al Islam.
En el norte de Irak fuerzas de combate estadunidenses también bombardearon por primera vez Tikrit, la ciudad natal del presidente Saddam Hussein, donde murieron cuatro personas, mientras que tropas anglo-estadunidenses efectuaron nuevos ataques con misiles aire-tierra sobre la ciudad de Mosul, ambas en el norte iraquí.
La televisisora qatarí Al Jazeera, que citó a un vocero militar estadunidense, dijo que uno de los objetivos fue destruir la residencia de Hussein en Tikrit, aunque la artillería antiaérea iraquí respondió al ataque.
De la ciudad petrolera de Tikrit proviene gran parte de la elite política iraquí, donde Hussein reclutó también a muchos de los miembros de su guardia personal y de las unidades especiales que lo protegen.
Las fuerzas británico-estadunidenses también atacaron nuevamente Mosul, cuya periferia fue bombardeada intensa y constantemente.
Los primeros ataques contra Mosul comenzaron hacia las 8:00 horas locales, y 12 horas después se reanudaron, pero al cierre de esta edición no se habían precisado los sitios alcanzados.
Mosul sufrió varias tandas de ataques aéreos durante todo el sábado, cuando los misiles, que mataron a cuatro estudiantes jordanos, hicieron blanco en varios puntos, informó Al Jazeera, que no precisó los lugares afectados.
Los estudiantes se preparaban para dejar territorio iraquí por el norte, luego de que Jordania llamó a sus ciudadanos en Irak a abandonar el país.
Salida hacia Iskenderun
Tropas de Estados Unidos comenzaron a abandonar las instalaciones que ocupaban en Nusayhin, en el sureste de Turquía, en clara señal de que Washington perdió las esperanzas de atacar Irak desde el territorio turco.
La decisión siguió al rechazo del parlamento de Turquía, hace un par de semanas, a otorgar derechos de tránsito para unos 62 mil soldados, con los cuales Estados Unidos pretendía abrir un frente en el norte de Irak, aunque el Legislativo turco votó en favor de la apertura de su espacio aéreo a la aviación estadunidense.
En un corredor de 600 kilómetros, del mar Mediterráneo hasta la frontera iraquí, los estadunidenses habían comenzado la semana pasada a construir bases de apoyo logístico y de abastecimiento, pero hoy, autobuses que transportaban a los soldados y remolques cargados con contenedores se dirigieron por carretera hacia Iskenderun, puerto del sur del país; se ignora cuál será su destino final.
Por lo pronto, el presidente Bush advirtió al primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, de provocar una confrontación con los kurdos enviando a un gran número de soldados a Irak. "Tenemos tropas en el norte y estamos dejando bien en claro a los turcos que no ingresen al norte de Irak", resaltó en Washington el mandatario estadunidense.
Sin embargo, Erdogan afirmó que las tropas turcas deben entrar en Irak por cuatro razones principales: a) para detener una ola prevista de refugiados y brindar asistencia humanitaria; b) para frenar las provocaciones de los kurdos turcos rebeldes que huyeron al norte de Irak; c) para llevar paz y estabilidad al área, y d) para evitar que los kurdos iraquíes declaren la independencia.
El enviado de Estados Unidos, Zalmay Zhalilzad, llegará a Ankara el lunes para mantener conversaciones con las autoridades turcas que, de acuerdo con un diplomático estadunidense en Turquía, están destinadas a buscar la coordinación en el norte de Irak.
El ministro de Relaciones Exteriores de Turquía, Abdullah Gul, señaló hoy que Ankara y Washington están trabajando para resolver cualquier problema.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores de Irak, Naji Sabri, advirtió nuevamente a Turquía contra una incursión en Irak, y afirmó que "pagará muy caro" un acto de ese tipo, al concluir una reunión de la Liga Arabe, en El Cairo.
Sabri aseguró que "Irak es la clave de la estabilidad en la región", pero si los turcos apoyan la agresión, entonces "se posicionarán contra su pueblo musulmán".