El Ministerio Público debe investigar: CNDH
Indígena tlapaneca denunció que fue violada por soldados en 2002
VICTOR BALLINAS
La indígena tlapaneca Valentina Rosendo Cantú denunció ante los medios de comunicación la violación de que fue objeto por elementos del Ejército Mexicano el 16 de febrero de 2002.
Valentina Rosendo habló en tlapaneco, ya que es monolingüe, y cuando ocurrieron los hechos tenía 17 años. Acusó a elementos del 41 Batallón de Infantería de la violación tumultuaria.
En el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez la indígena demandó justicia. Acompañada de su esposo y de las actrices Julieta Egurrola y María del Carmen de Lara, así como de Edgar Cortés, dirigente del Centro Pro, entre otros defensores, exigió que se aclare el crimen y se castigue a los militares.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), el 7 de febrero pasado, hizo saber a Valentina Rosendo que "los visitadores de ese órgano nacional no pudieron acreditar la violación sexual, porque ella hizo una denuncia tardía y cuando fue examinada ya no había pruebas".
Entrevistada al respecto, el cuarto visitador de la CNDH, Rodolfo Laraponte, dijo a este diario que "en efecto no se pudo acreditar la violación sexual. Ello no quiere decir que no ocurrió o que no pudo haber violaciones a derechos humanos, lo que dice el informe es que no se acreditó la violación".
Laraponte detalló que "no se advirtieron secuelas postraumáticas, y no se pudo establecer una conexión entre la violación y la secuela sicológica. Lo que ocurrió es que ella se presentó primero ante los médicos de Guerrero y dijo que había sido golpeada con una rama, luego, en otra declaración, dijo que se cayó, en ningún momento presentó denuncia por violación sexual y no fue sino ante los visitadores de la CNDH que ella denunció ese hecho, pero para entonces había transcurrido ya tiempo para constatarla.
-ƑNo quedan secuelas postraumáticas y sicológicas después de una violación?
-El punto fundamental es que no encontramos elementos que nos permitieran acreditarla, pero de ninguna manera se exoneró a los militares, es el Ministerio Público el que debe investigar lo que ocurrió.
Julieta Egurrola hizo un llamado a los militares para que se haga justicia, "que no sean cómplices". A la sociedad civil le pidió su solidaridad con la indígena y a las autoridades les exigió que investiguen.