VIENTOS DE GUERRA
El líder iraquí dice que su país
tuvo armas de destrucción masiva para defenderse
Bush, quien debe dejar el poder, no Hussein, responde
Irak a ultimátum
Según Bagdad, el presidente de EU, Blair y Aznar
"están solos ante el resto del mundo"
AFP Y DPA
Bagdad, 17 de marzo. Irak rechazó este lunes
el ultimátum que Estados Unidos dio al presidente Saddam Hussein
para que abandone el poder, y advirtió que la única manera
de evitar la guerra es que dimita el gobernante estadunidense, George W.
Bush, a quien definió como un "loco".
"Que se vaya el fabricante de guerra número uno
en el mundo", dijo el ministro de Relaciones Exteriores iraquí,
Naji Sabri, en alusión a Bush, al responder a una pregunta sobre
el ultimátum para que Hussein abandone el país en 48 horas.
Sabri
criticó a Bush, quien, señaló, ha hecho de Estados
Unidos "el hazmerreír del mundo y ha aislado a su administración
(...) Ha hecho de Estados Unidos el enemigo público número
uno. Debe abandonar su presidencia y permitir a los estadunidenses que
lleven una vida normal (...) Este loco debe partir, así como su
acólito (Tony) Blair", primer ministro británico.
Según Sabri, "cualquier niño iraquí
dirá que una propuesta como ésa merece ser pisoteada". El
funcionario iraquí acusó a Bush, a Blair y al jefe del gobierno
español, José María Aznar, de haber mostrado "arrogancia
hacia la comunidad internacional" en la cumbre de Azores, celebrada el
domingo, en la que pusieron un ultimátum a la Organización
de Naciones Unidas (ONU) para que definiera una acción armada contra
Bagdad.
Que Bush, Blair y Aznar se hayan reunido en una base militar
estadunidense en una "isla tan remota" demuestra que "están solos
ante el resto del mundo", aseguró Sabri.
En respuesta a la amenaza expresada por Blair de ocupar
los pozos petroleros de Irak, Sabri sostuvo: "ellos pretenden apoderarse
de los recursos de Irak, pero sus sueños no se cumplirán,
puesto que los iraquíes los van a enterrar con sus sueños
en el desierto".
Dispuestos al "sacrificio"
Antes que se conociera el ultimátum de Bush a Hussein,
el líder iraquí manifestó su confianza de que no se
llegue a una guerra encabezada por Estados Unidos contra su país,
a la vez que reafirmó que el pueblo iraquí luchará
"en defensa de su soberanía e independencia".
Advirtió: "estamos dispuestos a sacrificar nuestras
almas, nuestros hijos y nuestras familias para no abandonar Irak".
Hussein reconoció por primera vez que Irak poseyó
en el pasado un arsenal de destrucción masiva, el cual, aseguró,
ya no tiene. "Tenemos una voluntad real de eliminar las armas de destrucción
masiva en nuestra región y en todo el mundo", declaró Hussein,
citado por la televisión iraquí, durante una recepción
al canciller de Túnez, Habib Ben Yahia.
"Teníamos dichas armas para defendernos cuando
estábamos en guerra durante ocho años (1980-1988) con Irán
y la entidad sionista (Israel) nos amenazaba, algo que sigue haciendo",
indicó Hussein.
En tanto, el ministro de Comercio iraquí, Mohamed
Mehdi Saleh, señaló que Irak no ha decidido aún suspender
su producción de petróleo, pese a la inminencia del ataque
estadunidense.