VIENTOS DE GUERRA
Hoy el Consejo de Seguridad mantendrá consultas
sobre la propuesta franco-ruso-alemana
Los inspectores podrían abandonar Bagdad en
un plazo muy breve: Blix
Periodistas y demás personas deben evaluar su
permanencia en la capital iraquí, advierte Powell
AFP
Nueva York, 16 de marzo. Hans Blix, jefe de los
inspectores de desarme de la Organización de Naciones Unidas (ONU),
declaró este domingo que las inspecciones continuarán este
lunes en Irak, pero que los inspectores pueden ser evacuados en un plazo
muy breve.
"Sí, los inspectores estarán en el terreno
el lunes, a menos que se les llame de regreso", indicó. "Estamos
evaluando la situación hora a hora, la seguridad de nuestro personal
es prioritaria", agregó.
Blix
consideró "muy amenazantes" las declaraciones formuladas por el
presidente George W. Bush al término de la cumbre en las islas Azores
junto al primer ministro británico, Tony Blair, y el jefe del gobierno
español, José María Aznar. "Si su entrada en guerra
es inminente, podríamos esperar que la ONU lo sepa por los canales
normales y no a través de la prensa", declaró.
El jefe de inspectores admitió que sigue la situación
"hora a hora, en contacto con el secretario general" de la ONU, Kofi Annan,
y precisó que en Irak se encuentran entre 140 y 150 inspectores.
Blix indicó que la posibilidad de aceptar la invitación
que le formuló Bagdad para que acuda a Irak "no fue descartada"
y consideró que ello debe ser motivo de un análisis cuidadoso.
Por su parte, el Consejo de Seguridad mantendrá
consultas este lunes sobre la propuesta franco-ruso-alemana de desarme
de Irak, a pesar de la insistencia estadunidense en que el tiempo para
la diplomacia llega a su fin, expresó un vocero de la ONU en una
declaración.
El anuncio tuvo lugar a pesar de que altas autoridades
estadunidenses indicaron que Washington perdió la paciencia respecto
del proceso diplomático.
El secretario de Estado estadunidense, Colin Powell, indicó
que no ve ninguna razón para que se realice una nueva reunión
del Consejo de Seguridad sobre el tema, cuando existen diferencias "tan
fundamentales" entre los miembros de ese mecanismo de la ONU.
Powell pidió a los inspectores de armas y a periodistas
abandonar Bagdad por el peligro de que comience una guerra y porque pueden
ser tomados en rehenes, en declaraciones a la CNN. Opinó que toda
persona en Bagdad, "sea periodista, inspector o que realice cualquier labor,
debe evaluar si es el momento de irse".
Agregó que la administración Bush estaba
a punto de ordenar a sus diplomáticos que abandonen Medio Oriente
y el golfo Pérsico. Afirmó que la medida para el cuerpo diplomático,
que también fue tomada en los días anteriores a la guerra
del Golfo en 1991, es "prudente", al recalcar que otros países ya
están sacando a sus funcionarios de Irak y de países vecinos.
Horas después, al cierre de esta edición,
el Departamento de Estado anunció que ordenó a su cuerpo
diplomático no esencial y a las familias de todo el personal no
acreditado dejar Israel, Siria y Kuwait.
Daños a la relación con Francia
El jefe de la diplomacia estadunidense subrayó
que las divergencias sobre Irak provocaron "daños a corto plazo"
en las relaciones franco-estadunidenses.
Powell afirmó además que este tema también
causó "tensiones" con Alemania, que apoya la posición francesa
de extender las inspecciones, pero aseguró que no tendrá
consecuencias en las relaciones ruso-estadunidenses, a pesar de la oposición
del Kremlin al uso de la fuerza en Irak, como propone la Casa Blanca.
No obstante, Powell destacó que "Francia es un
aliado a largo plazo", y agregó que Washington y París "estuvieron
juntos durante 225 años y estarán unidos por largo tiempo
en el futuro".
Sin
embargo, Powell acusó a Francia de no haber "desempeñado
un papel útil" para presionar al régimen de Saddam Hussein
con el fin de que se desarme, y dejó entender que París actúa
para proteger sus intereses comerciales y políticos en Bagdad. Al
indicar que las divergencias sobre Irak provocaron "tensiones" en las relaciones
con Alemania, señaló que su oposición a la política
de Washington respecto de Bagdad fue "un tema de campaña" para la
relección del canciller Gerhard Schroeder.
El secretario de Estado fue mucho más benevolente
con Moscú. "Con Rusia tenemos ciertas tensiones debido a este asunto,
pero pensamos que con este país podemos negociar y que no habrá
ningún daño en nuestras relaciones, inclusive a corto plazo",
añadió.
Las declaraciones de Powell a distintas cadenas de televisión
estadunidense se produjeron al miemo tiempo en que el vicepresidente Dick
Cheney y la asesora de Seguridad Nacional, Condoleezza Rice, aseguraron
por separado que salvo que el presidente Saddam Hussein deje el poder,
la decisión de una guerra podría ser adoptada rápidamente.
"No hay duda que estamos cerca del fin de los esfuerzos
diplomáticos", sostuvo Cheney. "Claramente, el presidente tiene
que tomar en los próximos días una decisión muy difícil
e importante", agregó.
En declaraciones a la NBC, Cheney rechazó la propuesta
del presidente francés, Jacques Chirac, de acordar un plazo de 30
o 60 días para que los inspectores de desarme de la ONU culminen
su trabajo en Irak, e indicó que Estados Unidos aún no ha
decidido si someterá a votación en el Consejo de Seguridad
una nueva resolución sobre Irak.
En tanto, el gobierno estadunidense identificó
a nueve altos funcionarios iraquíes, incluyendo al presidente Saddam
Hussein y a dos de sus hijos, que serían juzgados por crímenes
de guerra y lesa humanidad después de un ataque a Irak, informó
este domingo el diario The New York Times.