El líder del cártel del
Golfo entró ayer al penal de La Palma
Se negó a declarar el narco Osiel Cárdenas
Guillén
GUSTAVO CASTILLO GARCIA
Tras negarse a declarar ministerialmente en torno a más
de tres averiguaciones previas abiertas en su contra, Osiel Cárdenas
Guillén fue trasladado del Campo Militar Número Uno al penal
de máxima seguridad de La Palma, en el municipio de Almoloya de
Juárez, estado de México.
El líder del cártel del Golfo ingresó
oficialmente a La Palma a las 10 de la mañana con 20 minutos, casi
24 horas después de que fuera detenido en Matamoros, Tamaulipas,
y quedó a disposición de los juzgados tercero de distrito,
con sede en Toluca; decimoctavo, del Distrito Federal, y sexto de Tamaulipas.
Pese a que el pasado viernes se mencionó que los
militares que detuvieron a Osiel Cárdenas habían capturado
a varias personas, fuentes oficiales desmintieron esa versión y
señalaron que tampoco hubo más heridos que los tres soldados
que participaron en el operativo.
Funcionarios de la Secretaría de Seguridad Pública
(SSP) federal revelaron que, supuestamente, el capo fue llevado
hasta las instalaciones penitenciarias en un helicóptero de la Secretaría
de la Defensa Nacional (Sedena), del que descendió custodiado por
personal de la Procuraduría General de la República (PGR)
y del Ejército, el cual lo llevó a un auto militar para trasladarlo
al Cefereso número uno. El convoy fue escoltado por cuatro camiones
de la Sedena, con unos 30 efectivos del Ejército, así como
por seis patrullas de la Policía Federal Preventiva.
De acuerdo con versiones obtenidas en la PGR, Cárdenas
Guillén fue interrogado acerca de la desaparición, el pasado
14 de diciembre, de cuatro elementos de la Agencia Federal de Investigación
(AFI) en la zona de Matamoros, así como de otros ilícitos
que se le atribuyen.
Sin embargo, se negó a declarar ante el Ministerio
Público Federal, acogiéndose al artículo 20 constitucional,
por lo que las diligencias terminaron casi 12 horas después de que
había sido puesto a disposición de la PGR, cerca de la una
de la tarde del viernes.
Una
vez que se vio la imposibilidad de obtener declaraciones del capo,
los fiscales encargados del caso decidieron notificarle y dar cumplimiento
a las tres órdenes de aprehensión que tiene en su contra,
dos de ellas giradas en ciudad de México y la otra en Tamaulipas.
Aun cuando Cárdenas Guillén ya fue puesto a disposición
de jueces con sede en Toluca, la Unidad Especializada contra la Delincuencia
Organizada (UEDO) no ha definido la situación jurídica de
los dos detenidos junto con el narcotraficante.
Según versiones oficiales, los dos detenidos son
los ex militares Víctor Manuel Hernández Barrón y
Agustín Hernández Martínez, quienes también
quedaron a disposición de la UEDO, sujetos a retención por
su probable responsabilidad en la comisión de los delitos de portación
de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército, la Armada y la Fuerza
Aérea Nacional.
Osiel Cárdenas es el único capo detenido
en esta administración bajo circunstancias violentas, ya que ni
Benjamín Arellano, jefe del cártel de Tijuana; Alcides
Ramón Magaña, El Metro, dirigente de la célula
del sureste para el cártel de Juárez, ni Albino Quintero
Meraz, representante del Golfo en Veracruz, atacaron a sus captores en
el momento de los operativos para su detención.
Además de las acusaciones de delitos contra la
salud en sus distintas modalidades, lavado de dinero, delincuencia
organizada, posesión de armas de fuego y usurpación de funciones,
Osiel Cárdenas enfrentará otros cargos tras el enfrentamiento
con miembros del Ejército, el pasado viernes.
De acuerdo con la ficha criminal que elaboró la
PGR, los antecedentes penales del líder del cártel
del Golfo son: el 16 de febrero de 1989 cometió el delito de homicidio,
abuso de confianza y daño en propiedad ajena. Fue consignado ante
el juez primero penal, con sede en Tamaulipas. Salió bajo caución
en ese mismo año.
El 7 de marzo de 1990 se le abrió la causa penal
82/88 por lesiones y amenazas; salió libre bajo caución el
mismo día.
El 27 de agosto de 1992 se le fincó el proceso
13-9200214-01 instruido por el juez de distrito meridional estadunidense,
por delitos contra la salud en su modalidad de posesión de dos kilogramos
de cocaína, por lo que existe una solicitud de detención
con fines de extradición a Estados Unidos.
También se le acusa de que en junio de 1999 atacó
a un investigador estadunidense y su familia, y es acusado de participar
en un encuentro armado entre 12 gatilleros y un agente de la FBI y otro
de la DEA.
Entre los sobrenombres con que era conocido están:
El Patrón, El Cabezón, El Loco, El Señor, Madrina,
Memo, El Ingeniero, El Papa, Jorge Salinas Aguilar, El Mata Amigos, El
Mecánico, Jump y Osito.
El jefe del cártel del Golfo, organización
que según las autoridades de Estados Unidos ingresa 20 por ciento
de la cocaína que ilegalmente se consume en ese país cada
año, sólo estudió secundaria y cursos de computación.
Fue mecánico, mesero, obrero y entrenador de perros. Nació
el 18 de mayo de 1967.
Por otra parte, 19 custodios del penal Número 2
de Tamaulipas fueron consignados al Reclusorio Norte de la ciudad de México,
acusados de evasión de reo, luego de que la PGR encontró
elementos para vincularlos con la fuga de cuatro internos de ese centro
de reclusión, quienes están involucrados con el cártel
del Golfo, hechos que sucedieron en diciembre pasado.
Asesinatos en Monterrey
En Monterrey, Nuevo León, la procuradora de Justicia
estatal, Alida Bonifaz Sánchez, afirmó que muchas de las
28 ejecuciones que se hicieron en la entidad el año pasado
apuntaban a una relación con el cártel del Golfo,
que encabezaba Osiel Cárdenas Guillén, por lo cual ahora
que fue detenido "seguramente dará información en cadena
que pueda servir para saber si efectivamente hay responsables" de esos
hechos en esa agrupación.