La tecnología se podría traer a México, sólo falta voluntad, asegura científico de la isla

Desarrollan en Cuba cirugía que reduce el Parkinson hasta en 90%

El método es más barato y efectivo que los aplicados en Estados Unidos y Europa

ANGELES CRUZ

Una cirugía de mínima invasión realizada desde hace ocho años en Cuba ha logrado la recuperación física hasta en 90 por ciento de casi 400 personas afectadas por el mal del Parkinson. Julián Alvarez, coordinador del polo científico de la isla, asegura que la tecnología empleada se puede traer a México, sólo hace falta voluntad de quienes tienen las facultades para ello.

Resaltó que ya ha sido comprobada la efectividad de la técnica e, inclusive, la han avalado árbitros científicos internacionales. Hasta ahora es la más efectiva para contrarrestar esa enfermedad del sistema nervioso central, que afecta las facultades físicas de los individuos.

En entrevista, Alvarez, quien también preside el Centro Internacional de Restauración Neurológica de Cuba (Ciren), explicó que el procedimiento quirúrgico conocido como subtalamotomía, consiste en localizar la zona del cerebro donde se registra el desequilibrio de las células que permiten el movimiento fino de las personas (comer, tomar objetos, caminar, hablar), para corregirlo.

Comentó que comúnmente los organismos producen dopamina y glutamatos. Ambos son neurotransmisores que en equilibrio permiten la coordinación de movimientos. Cuando se reduce la dopamina se registra una sobrexcitación del sistema motor -a causa del exceso de glutamatos-, la cual deriva en rigidez de los músculos y de la expresión facial, temblores, así como dificultades para comer y caminar. Esos son los síntomas evidentes de la enfermedad de Parkinson.

La subtalamotomía dorso lateral que se realiza en el Ciren desde 1995 es una neurocirugía por medio de la cual se llega al núcleo subtalámico (de neuronas). Esta zona tiene un diámetro de seis a siete milímetros. Ahí, con ayuda de un equipo de alta precisión se eliminan las células que producen los glutamatos para devolver al cerebro el equilibrio con la dopamina. Se reduce la excitación y el paciente recupera de 80 a 90 por ciento de las capacidades físicas que tenía antes de estar enfermo, aseguró Alvarez.

Para lograr estos resultados, el Ciren desarrolló una tecnología a la que denominó sistema estereoflex, consistente en un equipo computarizado con software de planeamiento quirúrgico de tipo tridimensional, con el que los médicos obtienen información precisa del lugar, la distancia y el ángulo con que deben hacer la punción, es decir, ubican perfectamente el área de donde eliminarán los glutamatos.

También se cuenta con un programa de registro eléctrico de zonas profundas del cerebro multiunitario, el cual permite a los especialistas identificar los patrones de las estructuras cerebrales, que van atravesando hasta llegar al punto deseado sin dañar otras regiones del cerebro. El programa traduce las imágenes analógicas en digitales y elabora un mapa de cada una de las estructuras cerebrales.

Alvarez afirmó que este sistema no existe en ninguna parte del mundo y la técnica ya ha demostrado su efectividad.

Mencionó que el equivalente en países como Estados Unidos y algunos de Europa es el implante de electrodos de estimulación en el subtálamo. Se trata de dar al paciente estimulaciones eléctricas que inhiben las células productoras de glutamato.

Sin embargo, resaltó, este sistema es más costoso, alrededor de 75 mil dólares, y no tiene efecto permanente. Más bien, el paciente se vuelve dependiente del método.

En cambio, la neurocirugía es permanente y, hasta ahora, las personas sometidas a la terapia se encuentran en excelentes condiciones físicas. Alvarez reconoce que todavía habrá que esperar algunos años para observar la evolución de los pacientes. Inclusive se analiza la posibilidad de iniciar nuevas investigaciones para realizar la operación antes de que el Parkinson se desarrolle.

Por ahora, la subtalamotomía se lleva a cabo sólo cuando la enfermedad está en el cuarto o quinto estadio, es decir, cuando la afectación física es evidente e invalidante.

Las oficinas del Ciren en México se localizan en avenida Insurgentes sur número 682-102, colonia Del Valle. Teléfono 5523 8296.