VIENTOS DE GUERRA
Realista, el documento chileno: Ricardo Lagos
El presidente Ricardo Lagos anunció ayer en Santiago
que la intención del documento que su país propuso ante el
Consejo de Seguridad de la ONU es fijar cinco condiciones que garanticen
el desarme de Irak en un plazo breve y "realista" de tres semanas, para
que el régimen de Bagdad cumpla las exigencias.
La
propuesta, que busca una salida pacífica al conflicto generado por
la posesión de armas de destrucción masiva por parte de Irak,
incluye entre sus requerimientos que Bagdad ponga a disposición
de la ONU 30 científicos identificados por los inspectores de armas
para ser entrevistados fuera del país, los que podrán viajar
en compañía de sus familias si así lo solicitan.
En segundo término solicita a Irak poner a descubierto
todo proyectil con gas mostaza o bombas aéreas provistas de este
elemento, que no se han encontrado desde 1998, o bien poner a disposición
de la ONU toda la documentación necesaria que pruebe su destrucción.
Asimismo, plantea que debe poner a descubierto los 10 mil litros de ántrax
no encontrados hasta la fecha o entregar información fehaciente
que compruebe su destrucción.
Como cuarta condición, dispone la destrucción
de todos los misiles Al Samoud 2, además de sus componentes,
y, finalmente, solicita al gobierno de Saddam Hussein hacer pública
la in-formación que establezca que los vehículos a control
remoto que posee no son sistemas portadores de armas químicas.
La propuesta dada a conocer por el presidente chileno
plantea también que de no hacerse efectivo el cumplimiento de estas
condiciones, en el plazo acordado de tres semanas Irak debiera asumir las
consecuencias que establece la resolución 1441, incluyendo también
el uso de la fuerza .
Lagos destacó que la proposición establece
metas verificables y plazos realistas, lo que calificó como elementos
fundamentales para el éxito de cualquier fórmula que busque
evitar un conflicto bélico. "En otras palabras, la posición
chilena plantea metas verificables y plazos realistas. Ambos componentes
son fundamentales: metas sin plazos razonables y precisos no garantizan
el desarme. Y, por otra parte, plazos perentorios pero que no sean realistas
conducen inexorablemente a la guerra".
"Las propuestas de resoluciones sostenidas hasta hoy por
las grandes potencias, desgraciadamente, no incluyen este delicado equilibrio
entre estos dos componentes de metas razonables y plazos realistas. Esta
es la razón por la cual, a juicio del gobierno de Chile, la clave
para la salida pacífica todavía es posible", afirmó.
ENRIQUE GUTIERREZ AICARDI, CORRESPONSAL