Presentarán este sábado su nuevo álbum, Espiral, en el Tianguis Cultural del Chopo

Ser independientes es un privilegio que nunca vamos a abandonar: Santa Sabina

No nos interesa estar con una disquera, así somos dueños de nuestro trabajo, dice Rita Guerrero Recurren a instrumentos poco acostumbrados en el rock, como el cello o el sax

CHAVA ROCK ESPECIAL

"Nunca hemos grabado dos discos con la misma alineación", afirma Rita Guerrero, la menuda y guapa vocalista del grupo Santa Sabina, que este sábado al mediodía realizará la preventa de Espiral, su nuevo álbum, en el Tianguis Cultural del Chopo.

Esta nueva placa, la séptima en su carrera y la segunda que editan en forma independiente, es un honroso trabajo de diez composiciones en el que la banda explora otros sonidos, ahora ayudados por instrumentos musicales poco acostumbrados en el rock, como el cello y el clarinete.

Santa Sabina se integra actualmente por Rita Guerrero (voz), Alfonso Figueroa (bajo y armónica), Alejandro Otaola (guitarra y teclado), Julio Díaz (batería), Rodrigo Garibay (saxofón y clarinete) y Leonel Pérez (cello y piano). De ellos, sólo los dos primeros son fundadores del grupo. Sin embargo, de un álbum a otro y conforme el resto de los elementos se ha integrado a la banda, el sonido del grupo ha mostrado una loable evolución. Alejandro ocupa un papel primordial, tan es así que comparte créditos con Gerry Rosado (de Consumatum Est) en la producción. Julio es un baterista discreto, dueño de una depurada técnica. Las recientes incursiones de Rodrigo y Leonel, quienes antes aparecían como músicos invitados, son fundamentales en el nuevo sonido de los santos niñitos.

Espiral se integra de diez cortes y, a decir de Rita, está permeado de varias sensaciones; una de ellas es que habitan un país y una ciudad "difícil para sobrevivir como músico, como artista; hacer este disco (Espiral) es como un gesto de que se pueden hacer estas cosas de forma independiente, pese a todo".

Sobre el carácter independiente del disco, Rita agrega: ''este es el segundo disco que grabamos por nuestra cuenta, porque no tenemos ningún interés de estar en una disquera, ya que de esta forma somos dueños de nuestro trabajo, y eso es un privilegio que nunca vamos a abandonar''.

Por otro lado, continúa Rita, "todavía existe la comunicación a niveles artístico y musical entre nosotros. Como propuesta estética hay un nuevo sonido del grupo, por la nueva alineación, porque incorporamos a dos músicos con instrumentos no muy usados en el rock: el clarinete, el cello y el sax. Sonoramente hablando es algo distinto".

La diversidad de la música popular

Alex Otaola es un personaje que gradualmente va ganando mayor presencia en la música; su trabajo en La Barranca, también como guitarrista, es sumamente importante. En un ejercicio de recapitulación, trata de sintetizar el trabajo de Espiral: "la primera rola, Incierto destino, es un funk que busca desarrollarse con los elementos que necesita esa canción. La que sigue, Noche, es mucho más electrónica y, por así decirlo, se puede manejar con otras sonoridades diferentes. Hay otras canciones que son ya como metal. Ecos de la piel es un tema en el que la base no cambia en toda la canción, es como continua. En llamas, en cambio, tiene tres tiempos diferentes. Siento que cada canción responde a sus propias necesidades".

Leonel, pianista y cellista, refiere que Espiral contiene una diversidad "de timbres, de instrumentos y también es una diversidad de personalidades con ganas de expresar cosas diferentes". Por eso juega con varios estilos, con ritmos diferentes, "el disco refleja la diversidad que puede tener la música popular, podemos empezar el álbum con un funk y terminar con una banda oaxaqueña, es un viaje que pasa por distintos estilos, distintos ambientes que reflejan el mundo contemporáneo que vivimos."

Si es otro sonido el del disco, se debe a que también fue distinto el proceso de grabación, pues la base musical se grabó en vivo, es decir, tanto guitarras como bajo y batería se grabaron juntos; posteriormente entraron los arreglos del cello, sax, clarinete y piano, y finalmente la voz de Rita concluyó la obra. Curiosamente se apoyaron en la tecnología para no usar en la grabación ningún amplificador. Otaola asegura que emplearon simuladores de ampli, "también simuladores de cinta análoga, porque cuando grabas un disco en análogo como que tiene otra textura; aunque todo lo grabamos en digital, después el proceso fue pasarlo por simuladores de análogo, que nos dio otro tipo de sonido".

El 24 de marzo al Zócalo

Humo canción es la última rola del álbum, está dedicada a María Sabina y a María Apolonia, su hija; la compuso Poncho Figueroa y es como una forma de agradecimiento a que en noviembre de 2001 fueron bautizados por María Apolonia. Cuenta Poncho que quisieron compartir esta experiencia, decirle a la gente lo que ahí pasó: "eso es un poco la intención de la letra. Es la primera vez que hacemos algo alusivo a quien le debemos nuestro nombre".

A diferencia de otros grupos que realizan preventas exclusivas y firmas de autógrafos en tiendas de discos, Santa Sabina optó por presentar primero su disco en el Tianguis Cultural del Chopo, por lo que este sábado al mediodía los integrantes venderán su más reciente material discográfico a un precio especial y darán autógrafos a sus seguidores. El ahora sexteto presentará oficialmente su nuevo álbum en un par de recitales los días 29 y 30 de mayo en el Teatro de la Ciudad. Antes ofrecerá un concierto en el Zócalo capitalino, el 24 de marzo, dentro de las actividades de la edición 19 del Festival de México en el Centro Histórico, al lado de grupos que forman parte del elenco del novel sello Discos Antídoto.