Gobiernos de Zacatecas y Durango agravan el problema: SG
Llegan a Canoas 500 agentes de la PFP y 200 soldados
Desalojados de Bernalejo rechazan oferta de indemnización
Tepehuanos denuncian incursión de policías zacatecanos
ROSA ROJAS ENVIADA
Pajaritos, Dgo., 12 de marzo. La situación volvió a tensarse hoy aquí con la llegada de cerca de 500 elementos de la Policía Federal Preventiva (PFP), 200 soldados y 100 elementos de la policía estatal, lo que motivó que los tepehuanos volvieran a bloquear el camino de entrada a esta población, a la altura de Canoas. Al mismo tiempo, los ejidatarios de Bernalejo rechazaron la propuesta de indemnización global por 30 millones de pesos que les hicieron los gobiernos federal y de Zacatecas.
A su vez, el representante de la Secretaría de Gobernación, Florencio Salazar, criticó la actitud de los gobiernos de Zacatecas y Durango, que han hecho una "cuestión de honor" este problema, el cual podía haberse resuelto con la intervención de la Procuraduría Agraria.
A las 9 de la mañana llegaron a Canoas las 16 unidades de la Policía Federal Preventiva, con unos 35 elementos cada una, nueve camiones del Ejército y tres helicópteros, en una operación dirigida por el general Francisco Arellano Noblecía. Aproximadamente a las 11 se retiraron los militares del lugar.
Tres unidades de la PFP alcanzaron a pasar antes de que los tepehuanos volvieran a colocar sus troncos y a quitar las tablas que permitían salvar una zanja que construyeron al inicio de su bloqueo. Después de eso vino una tensa negociación con el procurador agrario, Isaías Rivera, y el propio Florencio Salazar, a quien los tepehuanos reclamaron haber incumplido un convenio en el que el gobierno federal se comprometía a que no habría presencia ni de la PFP ni del Ejército.
En la asamblea de los indígenas, Carmelo Mendoza, presidente del comisariado de bienes comunales, apuntó que ellos sí cumplen el convenio y permitieron que los ejidatarios de Bernalejo y su anexo, Pajaritos, vayan retirando sus enseres domésticos y animales.
Salazar les planteó, en nombre del gobierno de Zacatecas, que no ocupen las casas abandonadas y que se extienda un mes el plazo para desocuparlas -porque hay casi 600 cabezas de ganado de los ejidatarios-, ya que el plazo original se vence este domingo. Otro planteamiento del gobierno de Zacatecas es que la negociación con los ejidatarios de Bernalejo se realice en Pajaritos y que los comuneros dejen libre el camino.
Se niegan a ampliar el plazo de retiro
Después de un receso, los comuneros respondieron que ellos habían puesto de plazo hasta el jueves, como pidieron los ejidatarios, y que se prolongó hasta el domingo, así que deberá respetarse, además de que ya se salió la mayoría y no quedan más de tres o cuatro familias en Pajaritos. A la solicitud del gobierno zacatecano de que fuera la PFP al poblado para resguardar las posesiones de los desalojados, los indígenas contestaron que nadie se ha metido a las casas, "porque el interés de los comuneros son las tierras". Mendoza agregó: "vemos que el gobierno de Zacatecas está más interesado en mantener el conflicto que en arreglarlo", y subrayó que de aquí al domingo es tiempo suficiente para que los ejidatarios saquen sus bienes".
Salazar señaló que había tres preguntas del gobierno estatal: si se pueden realizar las negociaciones con los ejidatarios en Pajaritos, si se puede tener un mes más para sacar el ganado y si puede permanecer la PFP en el lugar. Al recibir respuesta negativa en los tres casos, Salazar señaló que llevaría esa respuesta al gobierno de Zacatecas y se retiró.
En entrevista, el representante de la Secretaría de Gobernación subrayó que el compromiso con los comuneros fue que no entraría el Ejército, "nunca hablamos de la PFP, y yo no cuestiono lo que el gobierno local crea pertinente".
Insistió en que los ejidatarios de Bernalejo ya no desean volver a esas tierras, "no quieren seguir viviendo en condiciones de zozobra", y reconoció que la acción de los tepehuanos violentó los derechos humanos de los ejidatarios. Planteó que puesto que los indígenas tienen el control del territorio y han recibido el apoyo de los huicholes, y los ejidatarios son sólo 32 familias que tienen que cruzar el territorio de los nativos para llegar a sus tierras, actuando dentro de la ley la vía más conveniente es la conciliación, resarciendo los derechos de los ejidatarios para devolver la tranquilidad a la región y evitar luchas sociales.
Respecto a la marcha a que está convocando el Congreso local "en defensa de la soberanía de Zacatecas", Salazar comentó que este problema "no es de soberanía, por lo que dicha convocatoria ha enrarecido el proceso de acuerdo entre ejidatarios y comuneros y se ha convertido en un "problema de honor" entre las entidades, lo que es una consideración absolutamente equivocada que no permite crear un clima de certidumbre para resolver esto en los mejores términos.
Temen indígenas desalojo en la madrugada
Cerca de la medianoche, el presidente del consejo de vigilancia del Comisariado de Santa María Ocotán, Faustino Reyes, denunció que 60 policías ministeriales de Zacatecas entraron "en forma indebida" al poblado de Pajaritos. Por lo pronto, los elementos de la PFP permanecen a la orilla de carretera en Canoas. Los tepehuanos temen que esta madrugada entren a desalojarlos.