Plantea la acción armada sólo "como último recurso"

Se suma Nueva York a las ciudades de EU que rechazan el ataque a Bagdad

DAVID BROOKS Y JIM CASON CORRESPONSALES

Nueva York y Washington, 12 de marzo. El concejo de la ciudad de Nueva York aprobó hoy una resolución expresando su oposición a una guerra unilateral contra Irak, y se convirtió así en una de las 141 municipalidades estadunidenses que proclaman su repudio a la política belicista de la Casa Blanca.

Despúes de más de una hora de intenso debate, el concejo aprobó la resolución por 32 votos contra 18.

La medida adoptada es más ambigua que otras parecidas en su repudio de la guerra -algo que muchos aquí dicen es resultado de que en esta ciudad se cometió el principal atentado del 11 de septiembre de 2001-, ya que declara que la acción armada debería ser empleada sólo como "último recurso", y no es un rechazo total a la acción bélica expresada por otras resoluciones similares.

Durante el debate, algunos miembros del concejo señalaron que el 11 de septiembre obliga a esta ciudad a apoyar una guerra preventiva, pero los promotores insistieron en que la Casa Blanca no ha logrado demostrar un vínculo entre Irak y los responsables de los atentados del 11 de septiembre.

La resolución expresa que esta ciudad "se opone a un ataque militar preventivo" contra Irak, a menos que se compruebe que ese país representa una amenaza directa y que todas las vías diplomáticas sean agotadas.

Los promotores de la resolución consideraban que el debate sería muy difícil, ya que el concejo abordó el tema a unas cuantas cuadras de la zona cero, donde estaban las Torres Gemelas, y por ello celebraron el resultado. Destacaron que esta ciudad se une así a otras metrópolis del país, incluyendo Chicago, Los Angeles, Denver, San Francisco, Atlanta, Detroit, Pittsburgh, Filadelfia, Seattle y Washington DC, entre otras, que han aprobado resoluciones contra la guerra, más decenas de ciudades pequeñas a lo largo y ancho del país, incluyendo Austin, la capital de Texas.

La iniciativa conocida como Ciudades por la Paz (www.citiesforpeace.org) ha promovido estos esfuerzos argumentando que la política belicista daña a las ciudades y estados al desviar recursos para programas sociales y económicos a la guerra, y además es una expresión ciudadana de inquietud por la dirección de la política nacional.