El Estado central español viola la cultura vasca, acusan
Decenas de miles protestan por el cierre de Euskaldunon Egunkaria
ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL
Madrid, 22 de febrero. Decenas de miles de personas se manifestaron hoy en San Sebastián en protesta por el cierre del diario Euskaldunon Egunkaria, único escrito íntegramente en euskera y que fue precintado el pasado jueves por orden de un magistrado de la Audiencia Nacional de España.
Partidos políticos, sindicatos, organizaciones no gubernamentales y asociaciones de periodistas secundaron la movilización, en rechazo a lo que calificaron de violación a libertad de expresión y un ataque del Estado central español a la cultura vasca.
El cierre del periódico fue ordenado por el juez Juan del Olmo en coordinación con los servicios de inteligencia de la Guardia Civil, al acusar a los directivos del diario de pertenencia a la organización separatista vasca ETA.
A la marcha acudieron tres consejeros del gobierno vasco, Anjelez Iztueta, Joseba Azcarraga y Miren Azcarate, así como parlamentarios y concejales del Partido Nacionalista Vasco (PNV), de Eusko Alkartasuna (EA), de la suspendida formación Batasuna, de Izquierda Unida-Esker Batua e incluso algunos representantes del Partido Socialista de Euskadi, que lo hicieron a título individual.
Asimismo, secundaron la manifestación el partido vascofrancés AB, así como ANV, Batzarre, Zutik, la plataforma AuB, los secretarios generales de los sindicatos ELA y LAB, Joxe Elorrieta y Rafa Díez Usabiaga, y representantes de los sindicatos ESK, EHNE y EILAS.
La marcha, convocada por el consejo de organismos sociales defensores del euskera, Kontseilua, estuvo encabezada por una pancarta bajo el lema "Egunkaria aurrera. Bai euskarari" (Egunkaria adelante. Sí al euskera), mientras los manifestantes exhibían también ejemplares del último ejemplar del rotativo, así como de Egunero, el periódico que sustituyó al clausurado.
La protesta también contó con el respaldo de personalidades de la cultura vasca, como el escritor Bernardo Atxaga, además de diversas asociaciones de periodistas e informadores de medios de comunicación en el País Vasco, como Euskal Telebista, Gara -diario abertzale- y las revistas Argia e Irutxulo.
Durante la marcha se gritaron consignas en favor del euskera, al tiempo que se exigió la libertad de los detenidos, entre ellos el director del rotativo, Martxelo Otamendi, mientras se lanzaban críticas contra el gobierno del presidente José María Aznar, el Partido Popular (PP) y el PSOE, a los que acusaron de "fascistas".
La manifestación finalizó con la lectura de un comunicado por parte de Xabier Mendiguren, vocero de Kontseilua, quien señaló que no tiene "la menor duda de que Euskaldunon Egunkaria saldrá adelante gracias al apoyo y trabajo de toda la sociedad vasca", al tiempo que lanzó un mensaje al ministro del Interior de España, Angel Acebes. "No necesitamos su ayuda para nada y el mejor favor que podéis hacer a la lengua vasca es reconocer los derechos lingüísticos y no poner ninguna traba a la cultura y la lengua vascas", abundó.
Los manifestantes exigieron "la normalización y defensa del euskera por encima de las diferentes opiniones políticas, por lo que es necesario impulsar un acuerdo político y social amplio". Mendiguren también advirtió que el pueblo vasco no se "quedará impasible sin saber cuándo y de dónde vendrá el próximo ataque".
Un representante del diario expresó: "estamos dolidos, enfadados e indignados, pero debemos transformar esa rabia en una dinámica para llevar a Euskal Herria a la soberanía". Por ello pidió un compromiso firme de los agentes sociales, políticos y sindicales.
"Mientras no estructuremos Euskal Herria como pueblo de los vascos, nos volverán a agredir", concluyó.
El consejero de Justicia del gobierno vasco, Joseba Azkarraga, señaló al final de la concentración: "no venimos a defender ninguna posición propia del nacionalismo, venimos a defender la libertad y la democracia, ante un gobierno donde esos planteamientos no entran en sus esquemas de funcionamiento".
Azkarraga adelantó que el lunes remitirá al Consejo General del Poder Judicial un escrito "para que abra una investigación inmediata a fin de esclarecer si hubo connivencia entre Interior y la Audiencia Nacional" en el cierre del diario. "Es la primera vez en la historia que yo conozca que el Ministerio del Interior pacte una nota con el órgano judicial que está llevando un caso de estas características", sostuvo.
A su vez, Juan Mari Juaristi, parlamentario del PNV, afirmó que esta medida demuestra la "existencia de una democracia de baja calidad" y la puesta en marcha por parte del PP y el PSOE de una serie de medidas "contra todo lo que sea abertzale", por lo que auguró "tiempos peores que el pueblo vasco sabrá parar".
Arnaldo Otegi, parlamentario y ex vocero de Batasuna, pidió una "estrategia democrática popular progresista que aúne fuerzas frente al Estado español, que sabe que la batalla política la tiene absolutamente perdida", y agregó: "frente al fascismo español sólo hay una reivindicación y un grito, que es: Gora Euskal Herria Askatuta (Viva Euskal Herria libre)".
En Francia, en tanto, la policía judicial detuvo a dos presuntos miembros de ETA, Miguel Otegui y Aloña Moñoa Ordogoistia, que se encontraban en la lista de los más buscados, cuando viajaban en un automóvil robado en la localidad vascofrancesa de Irouleguy.
La detención fue calificada por el ministro Acebes de "muy importante" para seguir golpeando a ETA en todos su ámbitos y, en este caso, en la estructura operativa de Francia.