El desarme de Bagdad se puede lograr mediante las inspecciones, reitera Chirac
Blair y Berlusconi justifican "moralmente" una intervención militar de EU en Irak
"No queremos la guerra; estamos por el desarme pacífico", aseguran ambos gobernantes
DPA AFP Y PL
Roma, 21 de febrero. El primer ministro de Gran Bretaña, Tony Blair, y su homólogo italiano, Silvio Berlusconi, justificaron "moralmente" una intervención militar en Irak en el caso de que Saddam Hussein se niegue a cooperar con el desarme.
"No queremos la guerra, nadie la quiere, pero este asunto tiene una dimensión moral. ƑSi fracasamos en el desarme de Irak, que pasará con la autoridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU)?", subrayó Blair al término de una reunión en Roma con Berlusconi.
"Si dejamos a Hussein mandar en Irak con sus armas de destrucción masiva, terminaremos por abandonar al pueblo iraquí", agregó, tras denunciar de nuevo la agresión impuesta por el régimen de Bagdad.
Blair, quien será recibido el sábado por el papa Juan Pablo II para exponerle sus argumentos en favor de la guerra, dijo que hay pruebas claras de vínculos entre Irak y la red Al Qaeda de Osama Bin Laden, y que continúa la voluntad de la comunidad internacional para despojar a Bagdad de sus presuntas armas de destrucción masiva.
"No queremos la guerra. Estamos determinados a lograr el desarme pacífico", co-mentó por su parte Berlusconi, quien agregó que ha contactado a varios países árabes amigos de Irak "para que convenzan a Hussein de exiliarse".
Destacó su seguridad de que el régimen de Bagdad cuenta con armas de destrucción masiva, las cuales pueden caer en manos de organizaciones terroristas que no dudarán en emplearlas. "Si queremos la paz, hay que preparar la guerra", puntualizó.
A su vez, el ministro británico del Exterior, Jack Straw, estimó en Londres que "la crisis entra en su fase final", en una alocución pronunciada en el Royal Institute of International Affairs, al tiempo que reiteró la dimensión "moral" de una intervención.
"En momentos en que la crisis entra en su fase final mi mensaje es que al asegurarnos de que Irak está desarmado retiraremos la amenaza que presenta Hussein para sus ve-cinos y para el mundo entero", declaró.
"Nosotros provocaremos un cambio en el destino de la población iraquí que padece desde hace tiempo, y reafirmaremos la autoridad de la ley internacional", dijo.
En tanto, el general Patrick Cordongley, quien comandó la séptima brigada blindada durante la Guerra del Golfo, en 1991, dijo que las tropas británicas estarían dispuestas a participar en una eventual guerra en Irak a partir de mediados de marzo.
En una entrevista con la radio de la BBC, declaró que "no estamos listos, pero el material está en alta mar y los soldados están entrenados en Alemania, por lo que solamente es cuestión de hacer coincidir los soldados con la llegada del material y luego estaríamos listos".
Por lo pronto, el Ministerio el Exterior británico aconsejó a sus ciudadanos no viajar a Jordania, Qatar, Arabia Saudita y Bahrein, mientras las autoridades en Dublín pi-dieron a los irlandeses residentes en Irak abandonar inmediatamente ese país.
En Madrid, la ministra española del Exterior, Ana Palacio, dijo que una nueva resolución del Consejo de Seguridad de la ONU estaría destinada a ejercer presión suplementaria sobre Bagdad para que se desarme pacíficamente, como última oportunidad antes de una acción militar.
Pero el presidente de Francia, Jacques Chirac, reiteró en París, tras la cumbre Francia-Africa, que "el desarme de Irak debe lograrse mediante la continuación de las inspecciones de la ONU y no por vías militares, y aseguró que dicha opinión es respaldada "unánimemente" por los participantes en este encuentro.