El INEGI se basa en modelos que no arrojan la realidad del desempleo, informa
La STPS generará sus propias estadísticas
FABIOLA MARTINEZ
En discrepancia con las estadísticas que ofrece el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) reconoció que la tasa de desempleo abierto (TDA) que ofrece ese instituto (2.4 por ciento de la población en edad de trabajar) "no es un indicador que explique por sí mismo ni la problemática ni la calidad del empleo en México".
Ante ello, la STPS integrará a partir del segundo semestre del año un comité técnico sectorial de estadísticas laborales que genere informes trimestrales, de manera similar a los reportes que emiten el Banco de México y la Secretaría de Hacienda.
La dependencia reconoció el trabajo del INEGI. Sin embargo, señaló, se requiere de una nueva metodología que responda a la realidad de México, donde predominan el subempleo y ocupaciones por cuenta propia.
En un documento de la STPS que fue utilizado para explicar a los reporteros de la fuente laboral la forma en que se mide el empleo, Jaime Domingo López Buitrón, director de Estadística de esa dependencia, precisó que la forma de calcular la TDA responde a lineamientos de organismos internacionales más que a las necesidades específicas de cada país.
El titular de la STPS, Carlos Abascal Carranza, dijo al respecto que las actuales estadísticas que ofrecen las encuestas del INEGI (por hogares, establecimientos y puntos de muestreo) son sólo "signos, símbolos de hacia dónde va el país".
Sobre el número de plazas que podrían generarse este año, el funcionario comentó: "debemos esperar los resultados de la Encuesta Nacional de Empleo 2002 -próxima a difundirse-, pero en registros del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estimamos que puede haber un crecimiento de alrededor de 300 mil".
"Vamos a trabajar y dejemos de especular"
Abascal instó a empresarios y sindicatos a no generar una "sicosis de guerra" o una paralización ante temores por el posible conflicto en Irak. Lo importante ahora, resaltó, es trabajar. "Es obvio que el gobierno de la República está siguiendo los acontecimientos y tendrá que estructurar, junto con la sociedad, las respuestas necesarias ante una situación que se salga de la normalidad, pero por lo pronto vamos a trabajar y dejemos de especular", señaló.
Luego, hizo un llamado para que no se mezclen los conflictos laborales con los intereses políticos o partidistas en los próximos meses de efervescencia electoral. "Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para que lo laboral simplemente sea laboral, porque no se vale jugar con el empleo (...) confiamos en que ustedes, los medios, nos ayuden con una comunicación objetiva y a mantener incontaminado el ámbito del trabajo, respecto de los procesos electorales, federales y estatales", expresó.
Además reiteró sus previsiones optimistas para el país: "creemos que si hacemos lo correcto tendremos un mejor año, de esto no tenemos duda. Pese a cualquier advertencia, este año está lleno de oportunidades".
Algunas cifras de la secretaría
En el cúmulo de información presentada por López Buitrón (la mayoría de 2001), se ofrecieron datos básicos en materia laboral, como la población económicamente activa (PEA), de 40 millones de personas, de las cuales sólo 31.9 por ciento están inscritas en el IMSS, es decir, uno de cada tres trabajadores mexicanos tienen este tipo de protección social.
En ese año, sólo 687 mil 351 personas en edad de trabajar estaban en nivel de desocupación abierta, por lo que este indicador sería similar al que presentan países como Suiza y menor al que se reporta en Estados Unidos, los países de la OCDE o de la Unión Europea, así como otros de América Latina con similar nivel de desarrollo, como Venezuela. Sin embargo, en México la TDA no se corresponde con la realidad ni a las múltiples caras del subempleo.
El responsable de Estadística de la STPS explicó que el indicador de 2.4 por ciento de desempleo abierto se refiere únicamente al nivel de empleo urbano. Precisó que del total de la población ocupada en el país, 24.7 por ciento se declaran asalariados, 9.4 millones laboran por cuenta propia, 1.7 millones son empleadores y 3.4 millones no reciben pago por su actividad.