Así debe entenderse el rechazo de México a la guerra, argumenta Enrique Jackson
El Senado, por respeto absoluto a la paz
Las medidas de seguridad de EU ya tienen consecuencias contra mexicanos, expuso
ANDREA BECERRIL
El presidente del Senado, Enrique Jackson Ramírez, advirtió frente a diplomáticos, académicos y ex funcionarios de Estados Unidos que México no cambiará su postura contra la guerra en Irak, hecho que no debe entenderse "como una omisión en el combate al terrorismo", que el país reprueba, sino como "una posición de absoluto respaldo a la paz".
Durante una reunión del Consejo Binacional, Jackson Ramírez expuso que la solución al conflicto de Irak debe sujetarse al derecho internacional. "No queremos bajo ninguna circunstancia que los mexicanos empiecen a vivir las consecuencias de un conflicto bélico", señaló.
En ese acto, en el que estuvieron presentes funcionarios de la embajada de Estados Unidos, Jackson Ramírez hizo notar que las medidas de seguridad en la frontera tienen ya consecuencias graves para los mexicanos que tratan de cruzarla, y se declaró por encontrar mejores términos de cooperación entre los dos países en la materia.
"Los mexicanos estamos contra el terrorismo y la guerra, en favor de la paz; ojalá podamos lograr que en los hechos esa sea la ruta por la que caminemos junto con los estadunidenses", manifestó.
Después, en entrevista y en respuesta a un señalamiento del embajador de Estados Unidos, Tony Garza, el presidente del Senado dijo que la solidaridad mexicana está acreditada "por múltiples acciones del gobierno federal, entre ellas la seguridad en materia fronteriza".
La relación con el vecino del norte es intensa, se comparte una frontera muy grande, lo que obliga a mantener un diálogo permanente en los mejores niveles de entendimiento, pero "no hay manera de suponer que México pueda cambiar de opinión en el caso de Irak".
Explicó que México tiene principios constitucionales, una larga tradición de política exterior de vocación pacifista y una posición muy clara en torno a los conflictos internacionales, de ahí que el país sólo avalará que cualquier decisión que se tome en el Consejo de Seguridad de la ONU, en torno a un eventual ataque a Irak, esté fundada en evidencias suficientes que permitan asegurar que ese país es una amenaza para la paz del mundo.
"Esta es la posición del Senado: no se pueden dar por hecho situaciones que no estén verificadas para sumarse a decisiones unilaterales. No es un asunto de 'estás conmigo o contra mí', sino una cuestión de respeto al derecho internacional".
El priísta dijo que no es una decisión solamente de un voto en el Consejo de Seguridad. "Debe estar fincada por las consecuencias que tiene para nuestro país y el mundo. En México no hay nadie que sea partidario de la guerra", aseguró.