Rechazó que a los consagrados les falte
motivación, pero renovará el Tricolor
Blanco, el menos viable para volver a ser convocado,
anunció el técnico LaVolpe
En el debut ante Argentina, el equipo jugó al
60 por ciento de lo que se pretende, indicó
MIGUEL ANGEL RAMIREZ
En el debut contra Argentina la selección mexicana
jugó al 60 por ciento de lo que pretende Ricardo LaVolpe, según
confesó el propio técnico nacional al regresar ayer de Estados
Unidos. Su reto no sólo es mejorar el trabajo en la cancha, sino
"enseñar" a los jóvenes que el Tricolor es lo máximo.
"Me gustó la disposición, la entrega de
los jugadores y creo que se actuó de igual a igual contra un equipo
que también es fuerte", explicó LaVolpe.
Agregó:
"Si lo ven por el lado del resultado no estoy contento. Pero también
puedo decir que nos robaron, no te dan un penal increíble".
Su estreno al frente del Tri pudo haber sido un
empate a un gol si el árbitro Kevin Scott hubiera marcado la pena
máxima que le hicieron a Fernando Arce al final del encuentro.
Sin embargo, LaVolpe recordó que los resultados
no le interesan "tanto en este proceso; tenemos que mejorar en algunos
aspectos y ver a la selección más completa", pues desde ahora
tuvo ausencias por lesiones como las de Jared Borgetti y Jesús Arellano.
El equipo jugó al "60 por ciento", dijo, e insistió
en que la Copa de Oro deberá ser su primera gran prueba.
Puntualizó que les falta el oficio, el colmillo
y la mentalidad que tienen, por ejemplo, los argentinos. Volvió
a decir que para sus paisanos representar al equipo nacional es una gran
vitrina.
En cambio, para los mexicanos "la selección es
un sacrificio" y no les interesa saltar al futbol europeo. Por lo tanto
no tienen "la gran ambición para estar en procesos fastidiosos.
Ellos quisieran estar mañana en la eliminatoria o en la Copa de
Oro".
Resaltó que por eso no debe fastidiarlos ni provocar
que se enojen, dado que finalmente "son ellos los que juegan y ganan los
partidos.
"Ni tampoco convocar tanto a las figuras, pues ya las
conozco bien y han demostrado lo que valen tanto en eliminatorias como
en mundiales.
"Prefiero ver a los jóvenes; porque tengo que hacer
una renovación de la selección. Para mí tiene que
haber 24, 25 elementos; voy a jugármela con ellos, creo que a esos
jóvenes sí podemos ir enseñándoles que la selección
es lo máximo".
Rechazó que a los consagrados les falte motivación;
"no me gusta dar nombres pero lo voy a hacer porque hablé con él:
Cuauhtémoc Blanco", señaló, y explicó que al
americanista únicamente debe hacer un seguimiento para saber cómo
está física y mentalmente, porque ya demostró sus
cualidades en eliminatorias y Copas del Mundo.
Indicó que esta vez lo convocó "por el problema
de antes que tuvimos en América", pero una vez aclarado Blanco se
convertirá en el menos viable para ser llamado. No así elementos
como Omar Bravo y Adolfo Bautista.
Hizo hincapié en que le gusta que el jugador esté
contento y por eso habló en Los Angeles con el presidente de la
Federación Mexicana de Futbol, Alberto de la Torre, sobre el problema
de los viáticos.
Consideró que esto también es fastidioso
para los jugadores, pues en equipos como América y Chivas les dan
más que aquí en la selección y no puede ser.
El capitán Pável Pardo, por su parte, dijo
que se debe tener paciencia . "Es un proceso que necesita tiempo. Si mantenemos
esa línea de juego y seguimos mejorando vamos a terminar ganando
más partidos que perdiendo".