Las acepciones, compiladas en Nierika. Una ventana al mundo de los antepasados

Documentan significado de los círculos concéntricos en la cultura huichol

El libro, de Mariana Fresán, se presenta mañana en el Museo de Culturas Populares

CARLOS PAUL

La aparición recurrente de círculos concéntricos en la cultura huichol llevó a la etnóloga Mariana Fresán Jiménez a interesarse por el nierika y a descubrir paulatinamente que este símbolo no sólo representa una acepción geométrica, sino una gran diversidad de objetos, ideas, acciones y conceptos de la vida espiritual y cotidiana de esa cultura.

Tal investigación, luego de tres años y medio, se concretó en el libro Nierika. Una ventana al mundo de los antepasados, en el que Fresán Jiménez expone y analiza las diversas acepciones que los huicholes dan a dicho símbolo y cómo incide en su mitología, sus rituales y su vida cotidiana.

"El nierika -define la investigadora- es un concepto que además tiene una representación material. Su característica formal básica es la de ser un objeto o figura circular con un orificio en el centro o con alguna figura que simule ese vacío.

"El orificio central del nierika es un visor de doble sentido, que por un lado permite a los ancestros deificados ver el mundo de los seres humanos y, por otro, a los mara'akate o chamanes tener comunicación con esos ancestros."

La diversidad de objetos y conceptos que los huicholes denominan nierika es muy amplia, aunque, aclara la investigadora, "no existe una separación tajante entre éstos y los conceptuales, ya que unos se trasforman en otros".

Sin embargo, abunda, el papel más importante del nierika lo juegan las visiones obtenidas mediante los sueños y la ingestión del cactus sagrado.

"El peyote es el maestro místico y cultural de las costumbres del pueblo wixarika o huichol; en esas visiones se encuentra contenido todo el conocimiento sagrado de este mundo y del mundo de los ancestros. De esa manera el hi'ikuri o peyote, como nierika, ayuda a conservar y regir tanto la tradición como los aspectos sociales y económicos, lo cual se ve reflejado en objetos, danzas, arquitectura, organización y mitos."

Una de las aportaciones importantes del volumen, considera la investigadora, "es el análisis del número cinco dentro de la cosmogonía huichol, pues, entre otras cosas, son cinco los puntos cardinales, que se relacionan entre sí, cinco los colores del maíz, cinco los años que deben hacerle fiesta a los niños. Para ellos todo es cinco.

"En ese capítulo intento explicar la construcción de su geografía ritual, lo cual no se había hecho."

Relaciones con Mesoamérica

Además, agrega, "me propuse encontrar las relaciones que puede haber entre la tradición mesoamericana y el pueblo huichol, en términos de símbolos y conceptos que aparecen tanto en una como en otra cultura, ya que existen muchas semejanzas entre ambas, por ejemplo, en cuanto a los atributos que tienen las deidades, a la organización espacial en cinco puntos, a la concepción de los sitios considerados centros del mundo y la concepción acerca de todo aquello que implica la otredad".

La idea fue "intentar establecer cómo se construye la cosmovisión huichola, por qué el nierika se relaciona con el círculo y cómo éste se desdobla en una esfera que representa el orbe".

El lector que se acerque a este libro, dice Fresán Jiménez, "va a encontrar una visión diferente del mundo, una manera distinta de ser, vivir, pensar y hablar, una cultura que debe ser respetada".

El volumen, es "una especie de rompecabezas armado con datos y simbolismos huicholes y mesoamericanos".

El pueblo wixarika o huichol habita la región montañosa del occidente de México (norte de Jalisco, este de Nayarit, sur de Durango y parte de Zacatecas).

Además de su colorida expresión artesanal, los huicholes tienen un profundo sentido ritual de la existencia, en el que las ofrendas, las peregrinaciones -a lugares sagrados como Real de Catorce, en San Luis Potosí- y el uso sagrado del peyote, son algunas formas por medio de las cuales acceden y conservan el saber de sus ancestros, expone.

Editado por el Fondo Nacional para la Cultura y las Artes, el libro Nierika. Una ventana al mundo de los antepasados, de Mariana Fresán Jiménez, será comentado por Ingrid Gest Rosenhagen, Raúl Aranda Monroy y Françoise Neff Nuixa el jueves 16, a las 18 horas, en el Museo Nacional de Culturas Populares e Indígenas (Avenida Hidalgo 289, colonia Del Carmen, Coyoacán.)