Washington sigue buscando fórmulas para presentarse como interlocutor legítimo
Antichavistas promueven su causa en EU
Los opositores se reunirán hoy con representantes del sector financiero de Nueva York
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington y Nueva York, 14 de enero. La pugna venezolana se trasladó a Estados Unidos esta semana, mientras el gobierno de Washington sigue buscando la forma de presentarse como interlocutor legítimo en la crisis del país sudamericano.
Los dirigentes de la oposición venezolana realizan esta semana un gira por Washington y Nueva York para reunirse con funcionarios del gobierno estadunidense, líderes empresariales, académicos y analistas, y promover su causa contra el gobierno del presidente Hugo Chávez, quien también viajará a Nueva York para asistir a la Organización de Naciones Unidas (ONU) el próximo jueves.
Carlos Ortega, líder de la Confederación de Trabajadores Venezolanos (CTV); Carlos Fernández, presidente de la Federación de Cámaras de Comercio (Fedecámaras), y el legislador Timoteo Zambrano están realizando encuentros con funcionarios del Departamento de Estado, la Casa Blanca y la central obrera AFL-CIO en Washington.
Culminarán su viaje este miércoles en un foro ante representantes del sector financiero y empresarial de Nueva York, en el Consejo de las Américas y el Americas Society.
Zambrano, en entrevista con la televisora venezolana Globovisión, afirmó que la gira en Washington ha sido "absolutamente positiva", y dijo que se habían visto con funcionarios del más alto nivel del Departamento de Estado, a excepción de Colin Powell, así como también de la Casa Blanca y de la AFL-CIO.
"Tuvimos oportunidad de darles nuestra posición en materia del grupo de amigos... y dejamos claramente indicado cuáles se-rían las consecuencias si el gobierno se atreve a cerrar un medio de comunicación, un banco o una industria como ha venido amenazando", declaró Zambrano.
Reiteraron, dijo Zambrano, su rechazo a que países fronterizos con Venezuela integren el grupo de amigos (léase Brasil) y enviaron una invitación a Lula para reunirse con la oposición.
Sin embargo, La Jornada pudo confirmar que en la reunión con el Departamento de Estado el grupo se entrevistó sólo con un subsecretario asistente de Estado (o sea el nivel más bajo de la jerarquía de los secretarios), Tom Shannon. Una fuente oficial de esa secretaría de Estado insistió en que fue una formalidad, y que no hubo invitación.
El vocero del Departamento de Estado, Richard Boucher, confirmó la reunión, en la que se reiteró la posición estadunidense de respaldar y apoyar el esfuerzo de negociación de la Organización de Estados Americanos para lograr "una resolución pacífica, constitucional, democrática y electoral de los temas".
Agregó que el gobierno estadunidense ha instado a las partes del conflicto a cooperar en el proceso de negociación, en tanto que la Casa Blanca no logró confirmar una reunión entre sus funcionarios y los venezolanos.
Ortega y Zambrano se entrevistaron con la vicepresidenta del AFL-CIO, Linda Chávez, y con Tim Beaty y Stanley Gacek, del Departamento de Asuntos Internacionales de esa central obrera.
No son golpistas: AFL-CIO
En respuesta a por qué la central obrera estadunidense se reunió con grupos acusados de estar involucrados en la promoción de un golpe de Estado contra el gobierno constitucional venezolano, Gacek declaró a La Jornada que la CTV jamás había apoyado un golpe u otro método no democrático para destituir a Chávez.
"Respaldamos a la CTV como socio de la AFL-CIO", explicó Gacek a La Jornada, horas después de su reunión con los venezolanos. "Pero por supuesto les dejamos claro que nos oponemos a cualquier tipo de medidas que sean violentas o que usen el golpismo... El régimen de ley y el proceso constitucional tienen que ser respetados".
Gacek también insistió en que la AFL-CIO cree que los sindicatos tienen "un derecho democrático legítimo" de participar en una huelga en Venezuela.
Además, explicó que la confederación estadunidense de 13 millones de afiliados está preocupada por el fracaso del gobierno de Chávez en reconocer el liderazgo democráticamente electo de la CTV, y por las amenazas a la vida de algunos miembros de esa confederación, incluyendo el propio Ortega, por lo que considera emitir una declaración sobre estos asuntos.
Pero el papel de la central obrera estadunidense en Venezuela ha generado cierta controversia. El New York Times y el Boston Globe han informado que la AFL-CIO ha utilizado fondos provenientes del go-bierno estadunidense para apoyar a la oposición en Venezuela en los dos años previos al intento de golpe de abril.
Aunque no negó que los fondos provenientes del gobierno estadunidense hayan sido empleados para un proyecto del AFL-CIO en Venezuela, Gacek insistió en que esos fondos fueron utilizados exclusivamente como asistencia a la CTV para organizar comicios democráticos internos para elegir al liderazgo de la confederación.
Agregó que la central estadunidense considera varios proyectos que podrían resultar en más apoyo para la CTV en el futuro.
Ortega, Fernández y Zambrano acudieron hoy a un foro organizado por el Americas Society y el Consejo de las Américas en Nueva York, donde presentaron sus posiciones ante representantes del sector empresarial y financiero, analistas y medios.
Esta delegación comentó que también existía la posibilidad de una cita con el secretario general de la ONU, Kofi Annan, pero fuentes diplomáticas de esa organización confirmaron hoy que no se ha programado ninguna cita de este tipo.
El presidente Chávez sí tiene cita con Annan el próximo jueves, cuando acudirá a la sede de la ONU para celebrar el relevo de su presidencia del Grupo de los 77.
El vocero del Departamento de Estado informó hoy que no hay cita prevista para una reunión entre funcionarios de Estados Unidos y Chávez durante esta visita.