Tienen el derecho a integrarse en la selección
como cualquier nacido aquí, afirma
Pide Lapuente no discriminar a los futbolistas naturalizados
La reducción de extranjeros en equipos nacionales
es benéfica, señala el ex timonel del Tri
El 2002, un éxito para el América; cumplieron
con la cara muy en alto, asegura
MARLENE SANTOS A.
Manuel Lapuente, ex técnico de la selección
nacional, pidió no discriminar a los futbolistas que han adquirido
la ciudadanía mexicana, pues recalcó que tienen los mismos
derechos que cualquier nacido aquí, incluso para integrarse a la
selección."Lo único que no pueden es llegar a la presidencia
del país." Al mismo tiempo, sugirió reducir a uno, dos o
tres el número de extranjeros por equipo.
El
timonel del América, tras el trabajo físico realizado por
su plantel en el bosque del Ajusco, señaló: "Nadie está
fuera de la ley y si somos congruentes con nuestra Constitución,
pues obviamente los naturalizados son mexicanos... Los directivos deben
analizar la situación y tomar las resoluciones convenientes, adecuadas
y definitivas.
"Yo siempre lo he dicho: la reducción de extranjeros
es benéfica. Si ya tenemos varios naturalizados, ¿por qué
no reducir el número de foráneos? Yo digo que dos o tres,
¡o uno!, y así se le podrá dar más oportunidad
a los mexicanos por nacimiento o naturalizados", indicó.
Aseguró que quienes se convierten en mexicanos
"merecen todo mi respeto, cariño y afecto, eso es indudable. De
paso tenemos que reconocer que hay mejores niveles de futbol, están
los brasileños y argentinos, por ejemplo. No hay que decir que en
México no tenemos buen futbol, pero se puede apuntalar con los extranjeros",
sostuvo.
Destacó que el balompié local es complicado
y al jugador foráneo hay que llevarlo poco a poco, tenerle paciencia,
como en el caso de José Saturnino Cardozo. También admitió
que algunos equipos, como Colibríes de Morelos y Veracruz, viven
situaciones desesperadas y están amenazados por el descenso a la
Primera A.
"Ellos quieren permanecer en el máximo circuito
y además hay otras cosas que se han hecho más mal y merecen
más críticas que el hecho de contratar a naturalizados. Finalmente
es un albur: si contratan muchos veteranos a la mejor se van a segunda
(Primera A) o a la mejor quedan campeones, como nosotros con Puebla en
1982".
En cuanto a su club dijo que el 2002 fue un año
de éxito, "los muchachos cumplieron con la cara muy en alto, y la
última copa de este año la voy a brindar en su honor. Hay
plantel para mejorar nuestros logros", concluyó. De paso ratificó
a Marcelo Lipatín, pues no se quiere desprender de ningún
elemento, aunque aceptó que todo se rige por la ley de la oferta
y la demanda y nadie es intransferible.