Los jóvenes ya no ven progreso en el campo, dice un agricultor de 62 años
Productores de sorgo de Morelos temen el ingreso de la nueva fase del TLCAN
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Yecapixtla, Morelos. Cirilo Yáñez ha sido productor de sorgo durante toda su vida, pero en enero próximo podría quedar fuera del negocio al iniciarse la nueva fase del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
El campesino de 62 años ve muy difícil competir con productores estadunidenses de sorgo en 2003, cuando casi todo el comercio agropecuario entre México y Estados Unidos quede libre de aranceles, bajo el acuerdo comercial vigente también con Canadá desde 1994.
La cosecha de este año no fue buena: sus tres hectáreas de tierra produjeron sólo nueve toneladas de sorgo por las escasas lluvias, y su producción se vendió en mil 480 pesos por tonelada, para un total de 13 mil 320 pesos por seis meses de trabajo.
Los pequeños productores de unas 10 mil hectáreas en la zona, que en su mayoría utilizan el arado para sembrar, no cuentan con presas o pozos de agua, ni tampoco con almacenes donde guardar posibles reservas de sorgo.
En contraste, sus contrapartes estadunidenses gozan de moderna infraestructura y maquinaria que les permite ofrecer su producto a un precio más competitivo.
También este año Estados Unidos anunció nuevos subsidios por 190 mil millones de dólares para el agro en los próximos 10 años, que coinciden con la apertura del sector.
El TLCAN estableció cuatro periodos de eliminación gradual de aranceles para el campo, con diferentes porcentajes para cada país: a la entrada del tratado, a cinco años, a 10 años (que comienza en enero) y a 15 años para los productos más sensibles.
Actualmente los aranceles en México oscilan entre 1 y 2 por ciento y entre 9.5 y 53.5 por ciento para nueve productos sensibles. Sólo quedarán para su desgravación total en 2008 maíz, frijol, azúcar y leche en polvo.
De los cuatro hijos de Cirilo Yáñez, dos ya no trabajan en el campo, rompiendo la tradición de sus padres y sus abuelos.
"Los jóvenes ya no ven progreso en el campo; la gente está vendiendo sus tierras y la mayoría se va a Estados Unidos, pero, Ƒqué podemos hacer?", dijo Yáñez.