Ejerce el titular de PDVSA poderes extraordinarios
y despide a cuatro gerentes
Constitucional, la única salida a la crisis:
gobierno venezolano
Advierte el vicepresidente José Rangel que un
referéndum se realizaría en agosto de 2003
En caso extremo podríamos recurrir a la importación
de combustible, dice Alí Rodríguez
Admite que en las exportaciones hay graves retrasos
que "causan terribles daños al país"
AFP, DPA Y REUTERS
Caracas, 12 de diciembre. El gobierno del presidente
venezolano Hugo Chávez reafirmó hoy su rechazo ante la exigencia
opositora de celebrar elecciones anticipadas al insistir en que se atiene
a la Constitución, al tiempo que fueron despedidos cuatro gerentes
de Petróleos de Venezuela (PDVSA) que encabezan la huelga del ente
petrolero estatal.
Aunque el gobierno también insistió en que
"el país está muy normal" y que el "sabotaje petrolero ha
sido parado", el presidente de PDVSA, Alí Rodríguez, señaló
que Venezuela podría "importar combustible en un caso extremo".
Subrayó que las reservas podrían durar "por mucho tiempo".
Rodríguez, quien comenzó a ejercer poderes
extraordinarios en la empresa petrolera con el despido de los cuatro gerentes,
reconoció que la empresa afronta fuertes retrasos provocados en
las exportaciones, lo cual "causa un daño terrible al país".
En cuanto a los gerentes despedidos, entre los que figura
el líder Juan Fernández, Rodríguez indicó que
serán sometidos a procedimientos de acuerdo con la conducta que
han tenido. Subrayó que deben entender el daño que están
causando a la industria petrolera nacional e incluso a otros países.
El gobierno aprobó una serie de modificaciones
a los estatutos de PDVSA, de modo que Rodríguez adquirió
atribuciones adicionales con vistas a enfrentar la paralización
de la industria petrolera venezolana, la quinta del mundo.
Insisten en la salida electoral
Fernández advirtió que su destitución
no va detener su lucha en busca de "una salida electoral" a la crisis,
y señaló que las medidas tomadas por el gobierno reflejan
una "dictadura empresarial". El líder patronal de Fedecámaras,
Carlos Fernández, otro de los impulsores de la huelga, se solidarizó
con los gerentes y exigió la renuncia de Rodríguez.
A su vez, el vicepresidente José Vicente Rangel
aseveró que la única solución es un referéndum
de medio mandato, ya que "la fecha que nosotros aceptamos es la que manda
la Constitución, a partir del 19 de agosto de 2003". En ese sentido,
dijo que el cronograma electoral que el gobierno propone comienza con la
renovación del Consejo Nacional Electoral y termina con el referéndum
revocatorio en esa fecha.
El secretario general de la Organización de Estados
Americanos (OEA), César Gaviria, admitió esta noche que aún
está lejos una solución electoral a la crisis política,
e instó a las partes a celebrar una negociación ante la creciente
tensión en las calles. "No hay solución a la vista, eso es
verdad", expresó.
Explicó que la representación del gobierno
ha centrado su atención en la metodología electoral, en que
es necesario tener una justa electoral confiable y en la creación
de un clima apropiado. Mientras, dijo, la oposición insiste en un
adelanto de las elecciones y en que podría debatir sobre una enmienda
constitucional que abra el camino a una solución, siempre dentro
de un paquete que anticipe los comicios.
El problema de la propuesta opositora es que aceptar un
acuerdo de enmienda constitucional en una mesa negociadora conlleva y aprobarlo
en la Asamblea Legislativa, donde el oficialismo tiene mayoría.
Jimmy Carter podría mediar
El vicepresidente Rangel informó que el gobierno
abría otra puerta de mediación al anunciar que el ex presidente
estadunidense y premio Nobel de la Paz 2002, Jimmy Carter, podría
viajar a Venezuela próximamente, ya que así se lo ha manifestado
a Chávez.
Este día se mantuvo el clima de tensión
y de medir fuerzas entre partidarios del gobierno y los opositores huelguistas,
con marchas, contramarchas y acusaciones mutuas. En ese contexto, decenas
de seguidores del gobierno y opositores fueron dispersados con gas lacrimógeno
cuando los primeros intentaron rechazar una protesta de sus adversarios
en una céntrica plaza caraqueña.
El incidente ocurrió cuando opositores llegaron
a una plaza a realizar un cacerolazo en territorio de predominio
oficialista, por lo que fueron rechazados por los bolivarianos y con la
intervención policial, aunque sin lesionados. No obstante, a lo
largo de la jornada ambos bandos continuaron realizando manifestaciones
como lo vienen haciendo en los pasados 11 días desde que comenzó
la huelga.
Uno de los voceros del oficialista Movimiento V República
(MVR), presidente del Instituto Nacional de Tierras y hermano del presidente,
Adán Chávez, denunció que la oposición "golpista"
planea una "toma violenta" del palacio presidencial de Miraflores y una
"ola de terrorismo" en el país.
De esta manera se refirió a la convocatoria hecha
por la opositora Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV)
de emprender la "toma de Caracas" con una gran marcha cívica, cuya
fecha será anunciada en breve y que podría dirigirse a Miraflores.
Dijo que la decisión final corresponde a la Coordinadora Democrática,
que congrega a todo el espectro opositor que busca la caída de Chávez.
El vocero de MVR señaló que el posible asalto
de la sede de gobierno podría ocurrir en las próximas horas,
pues con ello traman "desencadenar en el país una ola de atentados
terroristas" cuyos blancos serán los dirigentes oficialistas. Pretenden
"una especie de autoatentados para atribuírselos al gobierno nacional",
aseguró.
Hizo un llamado a los partidarios del gobierno a una concentración
para este viernes durante todo el día en torno al palacio de Miraflores,
a fin de evitar que se repita "el guión" del 11 de abril, cuando
una marcha opositora derivó en violencia y luego en un efímero
golpe contra Chávez.
Denuncian "plan macabro"
Los opositores no sólo reiteraron que continuará
la parálisis de la industria petrolera, sino que además los
dueños de los medios de comunicación que apoyan la huelga
denunciaron un plan "macabro" para supuestos atentados contra sus vidas
que, afirmaron, serían perpetrados en las próximas horas
por grupos armados afines al gobierno.
El ministro del Interior, Diosdado Cabello, desestimó
esas denuncias al señalar que la gente que protesta sólo
pide a los medios que sean objetivos. Afirmó que está bien
que sean de oposición, pero el pueblo exige a los dueños
que no mezclen a sus medios. "Parece que tuvieran el libreto en la mano
y saben lo que va a ocurrir".
Este día los opositores también marcharon
hacia la sede de la OEA en Caracas para respaldar a los dueños de
los medios e insistir en elecciones anticipadas. Además la flota
del transporte marítimo, declarada en rebeldía, denunció
que el gobierno está contratando a capitanes extranjeros certificados
para movilizar los buques petroleros paralizados.
El ministro de Energía, Rafael Ramírez,
reconoció que Venezuela está virtualmente bloqueada por su
propia marina mercante, que se ha sumado a la huelga de los opositores.