FOX: DOS AÑOS DE GOBIERNO
Maíz transgénico, residuos peligrosos
y basura, entre los pendientes: legisladores
Nulo avance en la solución de problemas ambientales
ANGELICA ENCISO
Con el anuncio de la creación de una "nueva política
ambiental" y la inclusión de temas antes ignorados, como la basura,
el gobierno federal impulsó la restructuración total de la
Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), creada
apenas en el sexenio anterior. A dos años de esos anuncios, sólo
se alcanzó el cambio administrativo, pero los avances en la solución
de los problemas ambientales han sido nulos, de acuerdo con legisladores
federales.
En
este periodo se han acumulado asuntos sobre los que las autoridades del
sector han guardado absoluto silencio, como el caso de la presencia de
maíz modificado genéticamente en los cultivos tradicionales
de Oaxaca y Puebla. A pesar de que el Instituto Nacional de Ecología
(INE) -organismo desconcentrado de la Semarnat- confirmó la "contaminación"
del maíz criollo, del cual México es centro de origen, Víctor
Lichtinger, titular de la secretaría de Estado, no sólo no
ha dado información al respecto, sino que tampoco se sabe que la
dependencia haya adoptado medidas para resolver la situación.
Lo que sí ocurrió durante el primer semestre
del año, cuando le correspondió estar al frente de la Comisión
Intersecretarial de Bioseguridad y Organismos Genéticamente Modificados
(Cibiogem) -cargo en el que se alterna con los titulares de Salud y Agricultura-,
fue la renuncia del comité de científicos. El funcionario
restó importancia a este hecho, y dijo que ya era momento de que
salieran. A lo que se dedicó en su periodo al frente del INE, según
informó, fue al ordenamiento administrativo.
Aún no se ha informado de los avances en la Cruzada
por un México Limpio, que se puso en marcha en julio de 2001, durante
un acto oficial al que asistió el presidente Vicente Fox. El eje
de este programa era "reúsa, reduce y recicla" para disminuir la
cantidad final de basura que va a los confinamientos, ya que actualmente
alrededor de 70 por ciento de los 830 gramos que al día genera cada
mexicano terminan en calles, barrancas y basureros a cielo abierto.
La Semarnat tiene pendiente todavía, entre otros
aspectos, el inventario nacional de residuos peligrosos y las normas ambientales
que ofreció sobre el maíz y las botellas de plástico.
En el "gabinete de desarrollo con calidad" no se ha perfilado
el papel de la dependencia. Un ejemplo de esto es que la Secretaría
de Agricultura sacó, sin consultar a la Semarnat, la norma sobre
la pesca de tiburón, misma que, por protestas de pescadores y ambientalistas,
finalmente no se puso en marcha, y además, las paraestatales Luz
y Fuerza y Pemex no retiraron los askareles -residuos peligrosos- abandonados
desde hace un año en Altamira y Veracruz.