Elimina oportunidades para 14 millones de personas: organizaciones de productores
Peligran los bosques por el presupuesto bajo propuesto para el sector, advierten
Dudan que para el gobierno los recursos forestales sean asunto de seguridad nacional
MATILDE PEREZ U.
El gobierno federal declaró que los recursos forestales son asunto de seguridad nacional; no obstante, la reducción del presupuesto destinado al sector elimina oportunidades para 14 millones de personas, la mayoría indígenas, y pone en riesgo la existencia de las zonas boscosas y todos los servicios ambientales que proporcionan, expusieron cuatro organizaciones de productores del ramo.
La asignación de sólo 0.2 por ciento del presupuesto para el campo al sector forestal muestra el lugar que ocupa en las prioridades oficiales y en su concepto de "seguridad nacional", expresaron, y agregaron que no toma en cuenta que esa población ha mantenido un "auténtico combate contra la pobreza".
Si el gobierno destina 4 mil millones de pesos de presupuesto al sector ayudará a ese 13 por ciento de la población rural a aprovechar las condiciones de competitividad, a producir 10 veces más que en Estados Unidos o Canadá, a proteger la biodiversidad, a evitar la pérdida de más de 500 millones de toneladas anuales de suelo y a proteger el abasto de agua a las ciudades, sostuvieron.
Desatender la propuesta, advirtieron, sería poner en riesgo el uno por ciento que aportan al producto interno bruto los productores forestales y fomentar la inestabilidad social en el campo.
"Una pequeña inversión puede generar grandes frutos sociales, ambientales y económicos", destacaron integrantes de la Red Mexicana de Organizaciones Campesinas Forestales (Red Mocaf), la Unión Nacional de Organizaciones de Forestería Comunal (Unocof), la Red Mexicana de Esfuerzos contra la Desertificación y la Degradación de los Recursos Naturales (Riod Mex) y el Consejo Civil Mexicano.
Gonzalo Chapela, de Riod Mex, subrayó que se está desaprovechando la superficie forestal.
"No sólo hablamos de dinero, sino de los beneficios ambientales que las superficies boscosas generan, de la posibilidad de que se reduzcan desastres naturales como inundaciones y deslaves, así como de los beneficios sociales, ya que en las áreas boscosas es donde hay incidencia de narcotráfico, violencia -como el asesinato de campesinos de Santiago Xochiltepec, Oaxaca- e inestabilidad social."
Luis Roberto Peinado Valle, de Unocof, destacó los esfuerzos de algunas comunidades para conformar sus empresas para aprovechar de manera sustentable sus bosques: "tenemos experiencias en la integración de cadenas productivas en las comunidades y la creación de 100 a 500 empleos".
El problema es grave, reconoció, pero las autoridades tienen que ver la asignación de mayor presupuesto como una inversión y no un gasto o un subsidio, ya que actualmente se produce un millón de metros cúbicos de madera, lo cual podría triplicarse, sin que ello significara destruir los bosques, sino ayudar a "salir del desastre económico a las comunidades -80 por ciento de ellos son propiedad comunal o ejidal- y evitar la deforestación".
A su vez, Teresa Tanttensfield, del Consejo Civil Mexicano, apuntó que al gobierno le tocaría aceptar la participación de comunidades y organizaciones de productores forestales en la elaboración de programas y proyectos para que su actuación sea realmente transparente, eficaz, y logre coordinar los instrumentos existentes para beneficiar al sector.
Las organizaciones expusieron que su propuesta de destinar 4 mil millones de pesos al sector forestal es menor 8.5 veces al presupuesto programado para el sector agropecuario, tres veces el del Procampo y 12 veces el del Instituto de Protección al Ahorro Bancario.