"Debe haber mucha gente afectada por lo que
ocurrió en los años 70", expresó
Con el tema de la guerra sucia, Quirós
intentó desvirtuar el proceso por narco
El juez le recordó que se ciñera exclusivamente
a los delitos por los que se le juzgó
JESUS ARANDA
El general Francisco Quirós Hermosillo intentó
ayer romper su silencio sobre la participación que tuvo en la guerra
sucia, en la audiencia final del consejo de guerra en su contra, pero
el juez cuarto militar le advirtió tajante: "Le recuerdo que este
asunto es exclusivo sobre los tres delitos (de la causa penal en su contra)".
El militar aceptaba en su discurso: "desde luego debe
haber mucha gente afectada por lo que ocurrió en los años
70", pero -al hablar sobre la averiguación previa en su contra-
el procurador militar, general Jaime Antonio López Portillo, "nos
pone en indefensión, tanto de nuestros familiares como de nosotros
mismos, en una forma por demás carente de ética".
Al tomar la palabra la mañana de ayer, antes de
que el consejo de guerra se encerrara durante más de ocho horas
para dictaminar la causa penal contra él y el general Arturo Acosta
Chaparro, Quirós Hermosillo sorprendió a los integrantes
de ese cuerpo colegiado y a los presentes en la audiencia, cuando en su
última intervención ante el jurado para intentar probar su
inocencia por los delitos que se le imputan, aprovechó para tocar
el tema de la guerra sucia.
De entrada acusó a la fiscalía militar de
"filtrar" a los medios de información que se le inculpaba a él
(y a Acosta) por la desaparición forzada de cientos de personas
en la década de los 70.
Cada vez que desvirtuábamos alguna prueba del
Ministerio Público en el proceso por vínculos con el narcotráfico,
cohecho y asociación delictuosa -en el que ayer se le sentenció
a 16 años de prisión por los dos primeros delitos-, la fiscalía
"filtraba" a los medios información que nos incriminaba, dijo.
Señaló que fue el procurador López
Portillo quien declaró en agosto que "al menos en dos casos" se
acusaba directamente a Acosta y a él por los delitos de tortura,
lesiones, pero no por desapariciones forzadas.
Criticó que en aquella declaración el funcionario
militar adelantara que la dependencia a su cargo pudiera ejercer acción
penal por esos delitos. Aunque cabe señalar que, finalmente, ambos
generales fueron consignados y se les dictó auto de formal prisión
por el homicidio calificado de 143 campesinos de Guerrero.
Después de que el juez cuarto militar, Domingo
Sosa Muñoz, le impidió seguir hablando sobre el tema, con
el argumento de que era diferente a los delitos motivo del proceso, el
defensor de oficio del general, Fernando Carlos Fernández Pérez
comentó que Quirós Hermosillo estaba muy interesado en aclarar
su posición sobre las acusaciones que se le hacen con motivo de
la guerra sucia, y que en vista de que se le había negado
la oportunidad en el consejo de guerra, hablaría una vez que se
dictara la sentencia.
Sin embargo, después de que le fue dictada la sentencia,
el general Quirós ignoró los gritos de los reporteros allí
presentes, quienes lo instaron infructuosamente a que concluyera sus comentarios
sobre su participación en los años 70 "contra grupos subversivos".
La guardia de siete soldados que se interpuso entre las filas del auditorio
y el general impidió cualquier acercamiento al militar, quien tan
pronto firmó su recurso de reclamación contra la sentencia,
salió apresurado del recinto.