"Desbordó esperanzas y cálculos" la asistencia al espectáculo del sábado en el Zócalo

Con las críticas a los actos masivos presionan para que no se realicen: Semo

GABRIEL LEON ZARAGOZA

Para el secretario de Cultura del gobierno capitalino, Enrique Semo, la decisión de que sí se realizara el concierto que se ofreció el pasado sábado en el Zócalo y reducir el tiempo de presentación de los artistas de Televisa, pese a lo que pudo o no haber sucedido, fue la correcta.

"A final de cuentas queda demostrada la capacidad del Gobierno del Distrito Federal (GDF) para organizar estos eventos y para asegurar el orden, porque no sucedió nada, este es el argumento fundamental.

"En realidad no hay que exagerar lo que sucedió, porque tanto la sociedad que estaba ahí, en su inmensa mayoría -incluyo a los adolescentes y a los órganos de seguridad-, a final de cuentas supo tomar las decisiones adecuadas para que el acto se llevara a cabo y que no hubiera desgracias que lamentar. Y esto no lo han dicho suficientemente los periódicos", explica en entrevista el funcionario.

Vía telefónica, Semo expuso que el saldo del pasado concierto fue blanco. Sin embargo, todos los organismos públicos de seguridad y logística que participan en cada espectáculo masivo en el Zócalo se reunirán para revisar y evitar que se repitan los defectos de operación en lo subsecuente.

"La Secretaría de Cultura asume la responsabilidad que le corresponde, y afortunadamente no sucedió nada y no podemos hablar de lo que pudo o no haber sido", matiza, luego de señalar que la asistencia registrada de 120 mil personas -según las cifras que él proporciona- "desbordaron todas las esperanzas y cálculos" de los organizadores del espectáculo juvenil Clase 406, Música, en el que hubo cientos de niños y adolescentes extraviados, desmayados o con lesiones leves.

"Con esta crítica también estamos provocando otra cosa. Muchos nos han estado presionando para que no realicemos actos para la juventud y para los adolescentes con este argumento."

-ƑCon cuál?

-Con el de las posibilidades de que pase algo, que haya desorden.

-ƑQuiénes son estos "muchos"?

-Estoy hablando de círculos de la empresa privada (e) intelectuales de diversos sectores.

-ƑQué interés tendrían en que no se realicen esos foros de expresión juvenil?

-El peligro de expresiones emotivas por violencia. Hay temor a la juventud en ciertos sectores de la sociedad.

-No serán, acaso, Ƒintereses económicos?

-Hay de todo, opiniones. Hay gente mayor que ve peligroso que se reúna la juventud de esta manera, que ve con desconfianza la forma de actuar de la juventud.

-Estos sectores son políticos, culturales, religiosos y privados, Ƒtambién los hay del gobierno?

-Son de todos los sectores. En todos hay esta posición, así como hay la contraria.

-ƑDe qué se le puede temer a un joven?

-A la emotividad, al espíritu de rebeldía que se expresa en la forma de vestir, de hablar. En sus actitudes con las generaciones mayores, esa ha sido la característica de la juventud.

En esos casos, hablamos de una situación político-social, se le comenta a Enrique Semo.

"No, lo del 68 no solamente fue un movimiento político, fue un gran movimiento de emancipación juvenil. Cambió la relación de los hijos con los padres, la de las mujeres en la familia, la del maestro con el estudiante, la de la autoridad de la universidad con los estudiantes. Ese es un aspecto que se olvida, que el 68 fue una gran rebelión juvenil en todos los ámbitos. Cambiaron las costumbres artísticas de la juventud: los temas de lectura, los autores preferidos. La juventud se abrió un espacio en la vida cultural y social de este país.

-ƑHay nuevamente una revolución juvenil o el GDF trata de rencauzar a los jóvenes?

-Lo que hay es la expresión de un rasgo común a los jóvenes, que es la crítica de la sociedad establecida, a la expresión libre a las emociones.

-En aquellos movimientos surgió una organización interna entre los jóvenes y ahora intervienen las autoridades para llevar estos espectáculos.

-No. Se llevó el espectáculo, pero fueron los jóvenes los que asistieron con sus características propias: una fuerte emotividad que no es reprimida, como sucede en los más adultos, un espíritu de libertad y de rebeldía en la expresión, en el lenguaje y en sus sentimientos. Esas son características de la juventud.

"Por parte de la Secretaría de Cultura seguiremos pugnando para que haya espacios públicos para la juventud y la adolescencia, y vamos a trabajar muy duro para remediar los problemas de seguridad que esto pueda entrañar. No vamos a renunciar a dar los espacios públicos a los jóvenes".