Los organizadores prevén reunir a decenas
de miles de personas este fin de semana
Realizarán multitudinaria marcha en Washington
para decir no a la guerra
Más movilizaciones en favor de la paz se llevarán
a cabo en diversas ciudades del mundo
JIM CASON Y DAVID BROOKS CORRESPONSALES
Washington y Nueva York, 23 de octubre. Decenas
de miles de personas de todas partes del país se congregarán
en Washington este fin de semana en lo que los organizadores llaman la
movilización más grande contra una guerra desde los tiempos
de Vietnam.
Construyendo esta movilización sobre cientos de
manifestaciones y acciones locales en toda la nación durante las
semanas recientes, los organizadores de la protesta informaron que esperan
demostrar la amplia oposición a una guerra contra Irak. El reverendo
Jesse Jackson, el ex procurador general Ramsey Clark y el obispo católico
Thomas Gumbleton se encuentran entre los oradores programados para el acto.
"Hay grupos que viajarán a Washington de los 50
estados", explicó Sara Sloan, la coordinadora de juventud y estudiantes
de Answer (Actúa Ahora para Detener la Guerra y Acabar con el Racismo),
coalición que ha convocado a la protesta nacional. "No iremos para
tocar los tambores de guerra", dijo Mahdi Bray, líder de la Sociedad
de Libertad Musulmano-Americana.
"El 26 de octubre estaremos de forma masiva tocando los
tambores de la paz", añadió Bray.
La manifestación en Washington coincidirá
con marchas el mismo día en San Francisco, Londres, Tokio y otras
partes del mundo, en lo que podría ser la movilización por
la paz en la que participarán cientos de miles de personas en total.
En conferencia de prensa esta semana, un líder
de los opositores a la guerra indicó que la fuerza real de este
movimiento se encuentra fuera de la capital estadunidense, y se expresa
en decenas de acciones por todas partes del país.
Aunque las encuestas continúan demostrando un amplio
apoyo a la acción militar contra Irak y el Congreso ofreció
un abrumador apoyo a los deseos del gobierno de George W. Bush de emplear
todos los medios para lograr un "cambio de régimen" en Bagdad, hay
indicios de un creciente movimiento opositor a nivel local que rechaza,
o por lo menos cuestiona, una guerra contra Irak.
Este mes la revista The Nation reportó que
por lo menos 300 actos por la paz se realizan cada semana en diferentes
lugares, y otro cálculo del Instituto para Estudios de Política
documentó 250 actos separados en universidades, iglesias y centros
comunitarios en todas partes de Estados Unidos. Los concejos municipales
de San Francisco, Seattle, Kalamazoo (Michigan) y Carroboro (Carolina del
Norte) han aprobado resoluciones que expresan su oposición a una
guerra contra Irak.
En Texas, estado natal del presidente George W. Bush,
el estudiantado de la Universidad de Texas -la más grande del país-
aprobó una resolución contra la guerra. La federación
sindical del estado de Washington también se ha declarado contra
la guerra, así como la mayoría de las principales organizaciones
religiosas del país.
En diversas partes del país Bush se ha encontrado
con pequeños grupos de manifestantes, y en casi cada escala de sus
giras es saludado por activistas que realizan varios tipos de protesta.
Esta semana, cuando saludaba a sus simpatizantes en Bangor,
Maine, varios activistas desenrollaron pequeña mantas en las que
se leía "no a la guerra", antes de ser expulsados por la policía.
Diversos grupos han organizado manifestaciones en lugares
como Portland, Oregon, y Cincinnati, Ohio, para coincidir con visitas de
Bush a estas ciudades. "No sangre por petróleo", corearon manifestantes
detenidos después de irrumpir una sesión del Consejo de Seguridad
de la ONU esta semana.
La manifestación nacional de este fin de semana
será encabezada por veteranos de guerra estadunidenses, acompañados
por líderes árabe-estadunidenses y algunos dirigentes sindicales
locales que se han pronunciado en contra de otra guerra más. "Nuestro
lema del próximo 26 de octubre será que sólo el pueblo
puede detener la guerra", señaló Brian Becker, uno de los
organizadores.