Critican especialistas en temas sobre seguridad
la contratación de Giuliani
Cero tolerancia en NY: menos delitos pero más
abusos
SUSANA GONZALEZ Y BERTHA TERESA RAMIREZ
Investigadores universitarios y especialistas en temas
de seguridad pública entrevistados por La Jornada criticaron
la contratación, por parte del gobierno capitalino, del despacho
del ex alcalde de Nueva York, Rudolph Giuliani, para combatir la delincuencia
en el Distrito Federal.
Fernando
Tenorio, investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana y
secretario del Foro Latinoamericano para la Seguridad -del cual el jefe
de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador,
es presidente-, recordó que el programa Cero tolerancia "tuvo
un agravante bastante fuerte, porque se incrementó en más
de 50 por ciento el número de delitos cometidos por policías
y esto obligó a que el gobierno de Nueva York pagara 50 millones
de dólares en demandas por violaciones a los derechos humanos".
Además, mencionó que si bien la criminalidad
se redujo 50 por ciento en Nueva York durante la gestión de Giuliani,
estudios realizados al respecto demostraron que lo mismo ocurrió
en otras ciudades de Estados Unidos donde no se puso en marcha tal programa:
"consecuentemente, si se redujo la delincuencia no fue por efecto del plan
Cero tolerancia".
El coordinador del Proyecto de Investigación Interinstitucional
sobre la Violencia en México del Instituto de Investigaciones Sociales
de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), René
Jiménez Ornelas, dijo que la contratación del ex alcalde
neoyorkino y su equipo es "bienvenida", siempre y cuando esté acompañada
de una decisión política por parte de las autoridades para
combatir de manera integral la inseguridad pública y los vacíos
jurídicos que propician la impunidad y la corrupción. De
lo contrario, advirtió, "ni trayendo a Supermán se
logrará abatir la delincuencia", mucho menos si no se mejoran las
condiciones de salud, educación y empleo de la población.
Tanto Jiménez Ornelas como Tenorio lamentaron que
el gobierno de López Obrador recurra ahora a un despacho extranjero
e ignore los proyectos que han realizados especialistas mexicanos, y advirtieron
que entregar información sobre la estructura y funcionamiento de
la policía capitalina puede resultar riesgoso. "Se está entregando
la seguridad ciudadana a una institución privada extranjera", alertó
Tenorio.
Al respecto, Miguel Arroyo, vicepresidente del Colegio
Nacional de Abogados y vocero de la organización México Unido
contra la Delincuencia, puntualizó que la seguridad pública
es una cuestión de Estado y debe permanecer así, por lo que
no resulta congruente que se contrate una empresa privada extranjera "que
nos diga cómo acabar con la delincuencia; eso choca un poco con
el sentido de la soberanía nacional". Al hacerlo, dijo, parece que
el Estado reconoce o confiesa que no puede con la seguridad pública,
que es la primera función que debe cumplir.
Arroyo recomendó tomar en cuenta las diferencias
jurídicas y culturales que existen entre Nueva York y el Distrito
Federal, al mencionar que los policías de allá pueden acusar
al delincuente, pero aquí no sucede así, porque la denuncia
debe ser presentada por un tercero: "son diferencias legales que modifican
la estrategia".
A su vez, el presidente de la Comisión de Honor
y Justicia del Consejo Nacional de Seguridad Privada, Alejandro Desfasiaux,
consideró que el programa fracasará porque no existe la infraestructura
policiaca para aplicarlo, ya que en Nueva York operó con un sistema
automatizado de cómputo que mantenía comunicadas todas las
unidades de la policía con una central y ésta, a su vez,
con la FBI, lo que no existe aquí.