La confianza en el gobierno, hecha pedazos, advierte
Riesgo de estallidos de violencia en pueblos nativos: ex director del INI
CAROLINA GOMEZ MENA
Prevalece la "política excluyente" hacia las comunidades originarias, afirmó Marcos Matías Alonso, experto del Foro Permanente para Pueblos Indígenas de la ONU, al referir que puesto que la "economía y la ley los han castigado", la confianza de éstos en el gobierno "ya está hecha pedazos".
Entrevistado durante la entrega del premio mundial al proyecto de desarrollo sustentable, otorgado al Café de la Selva, el ex director del Instituto Nacional Indigenista (INI), aunque dijo estar cierto de las "buenas intenciones del presidente Vicente Fox para que se impulse la reforma de la reforma", aseguró que para no minar aún más la deteriorada confianza, esos buenos propósitos deben traducirse en "acciones hacia el Congreso, su partido y hacia el Estado.
"Yo creo que al presidente Fox le preocupa el tema de los pueblos indígenas, pero tiene que concretarse en una política en la cual se vuelva a recuperar, conquistar esa credibilidad, con la cual nosotros trabajamos durante un año intenso mientras estuvimos al frente de una institución del gobierno federal (el INI), porque la construcción de la confianza, de una base de comunicación, es de suma importancia para cualquier política institucional que se pueda emprender; y ahorita la confianza está hecha pedazos".
Advirtió que de no haber pronto cambios tangibles podría haber estallidos de "violencia", porque, aunque la paciencia es prácticamente infinita, se está llegando a un límite.
A casi dos años del actual gobierno y de las amplias expectativas que levantó en diversos ámbitos, uno de ellos el indígena, Marcos Matías afirmó que las "inconformidades y las preocupaciones" de los pueblos nativos han seguido "acumulándose", por lo cual "no puede hablarse de que exista una situación de paz" entre éstos.
En su opinión, aunque "hay esfuerzos institucionales, no se ha encontrado la política adecuada, porque quizás no se ha oído bien a las comunidades, no se han oído las voces de rebeldía que clamaron justicia, dignidad y derecho; lo que demandaron los zapatistas en 1994 sigue siendo una aspiración no satisfecha, pese a que es obligación del gobierno recoger esas voces y convertirlas en una política de Estado; ahí está desafío al cual no se logra llegar".
No obstante, dijo que la política oficial hacia las comunidades indígenas "está en construcción", pero advirtió que se debe apurar el paso, porque "los tiempos se agotan. La benevolencia, la generosidad de los pueblos no ha tenido respuesta, y aunque aún no reaccionan con protestas agudas que generen conflicto y violencia", nada garantiza que esta situación se mantenga.
Sobre la ley indígena y los recientes acontecimientos en torno a ella -la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación sobre las controversias constitucionales-, consideró que ésta debe estar estrechamente ligada con una reforma económica que proporcione "recursos financieros para el desarrollo de los pueblos", porque de poco o nada vale que se intente generar cambios legislativos que consagren los derechos constitucionales de este sector, si no hay dinero para sacarlos de la pobreza y la pobreza extrema.
"Muchos pueblos han planteado que si México tiene 10 por ciento de población indígena, tiene que haber un porcentaje en términos presupuestales que sea justo, digno y equitativo para permitir un verdadero desarrollo" de estas comunidades, remarcó.
Asimismo, sostuvo que el gobierno foxista ha tenido magros beneficios hacia los pueblos originarios. Y es que "el régimen actual ni siquiera en el campo de la ley ha logrado satisfacer las aspiraciones de las comunidades nativas", lamentó.
Marcos Matías comentó que ante este panorama, en la ONU existe "preocupación porque el tema de los pueblos indígenas es una amenaza latente", ello debido a la falta de respuestas gubernamentales efectivas, pero no sólo en México, también en otras partes del mundo.