PEMEXGATE

Emplazar a huelga no es chantaje: Romero Deschamps

Habría ofrecido Pemex un aumento salarial de 6.5%

La propuesta sigue en 5.5%, afirma el sindicato petrolero

Acuerdan diferir audiencia de conciliación para el lunes

FABIOLA MARTINEZ Y PATRICIA MUÑOZ

En la mesa de negociación entre Petróleos Mexicanos (Pemex) y el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), la paraestatal habría ofrecido un incremento salarial de 6.5 por ciento y dos puntos en prestaciones, propuesta que evitaría la huelga emplazada para el 2 de octubre. Por su parte, la dirigencia sindical sostuvo anoche que la oferta continuaba en 5.5 por ciento, y afirmó que las recientes declaraciones del presidente Vicente Fox constituyen un "auténtico linchamiento público".

"No somos delincuentes, somos dirigentes sindicales (...) Emplazar a huelga no es un chantaje, es un instrumento constitucional (...) desde el gobierno se dictó ya sentencia: los dirigentes petroleros son delincuentes, chantajistas y enemigos de la patria. Nadie tiene derecho a calificar y juzgar", señaló el gremio encabezado por Carlos Romero Deschamps.

En un pronunciamiento público, el STPRM rompió el silencio de dos días para defender "nuestro honor y dignidad". Después de que el presidente Vicente Fox calificara el emplazamiento a huelga en Pemex como un "chantaje", el comité ejecutivo general petrolero respondió que desde hace más de un año el gobierno emprendió una campaña de desprestigio contra esta organización.

Así, una vez más, Romero Deschamps y el comité sindical se asumen como víctimas de un juicio sumario, y por esta razón critican el proceso de desafuero solicitado ante la Cámara de Diputados, así como los señalamientos contra el emplazamiento a huelga y las acusaciones acerca de los convenios firmados entre el STPRM y la paraestatal, que dieron origen al Pemexgate.

"Nadie se ha beneficiado ilícitamente en lo individual con los mismos (convenios), nunca pedimos impunidad, exigimos justicia", insistieron. En el pronunciamiento leído ante los reporteros por el secretario de Propaganda del STPRM, Fernando Navarrete, se establece que aún con ese juicio sumario seguirán en las negociaciones para concluir la revisión salarial en el menor plazo, con un pliego en el que mantienen la demanda de 15 por ciento de incremento al tabulador.

Negociaciones ultrasecretas

Por acuerdo de las partes, las negociaciones se llevan a cabo bajo total hermetismo, sólo con cuatro miembros de cada parte y han tenido lugar, según se supo, en el edificio central de Pemex. No obstante, fuentes consultadas en la Secretaría del Trabajo y en la empresa señalaron que ya hay un ofrecimiento superior a 5.5 por ciento, el cual analizan los dirigentes. El propósito, agregaron, es poner fin al conflicto y "despejar el camino hacia futuros procesos".

Para avanzar en la negociación, Pemex habría aceptado destinar recursos para apoyos a la vivienda y hacia la infraestructura médica, que incluye la remodelación de inmuebles (clínicas) y un programa para mejorar el abasto de medicamentos. Todos estos puntos fueron incluidos en el pliego petitorio del sindicato desde hace dos semanas.

Ayer, los representantes jurídicos de la paraestatal y del sindicato petrolero solicitaron a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje diferir la audiencia de conciliación para el próximo lunes 30 de septiembre, a las 11:00 horas.

Se prevé que ese día los representantes jurídicos de ambas partes sólo afinarán los detalles del convenio para firmar ese mismo día el acuerdo que, en realidad, rompería con el llamado tope salarial de este año, ubicado en 5.5 por ciento.

Jorge Montoya, subgerente Jurídico Contencioso de Pemex, indicó que la audiencia programada para el lunes fue de común acuerdo, y reiteró que el emplazamiento a huelga vence el último minuto del primero de octubre.

No obstante, el hermetismo bajo el cual se han desarrollado las negociaciones provocó ayer un desconcierto absoluto, debido a que ni los trabajadores saben qué, cómo, cuánto y dónde se está negociando. La constante es la falta de información, además de que se proporcionaron a los reporteros múltiples "pistas falsas" y se alimentaron las especulaciones.

Una de las especies más difundida establece que sí habrá acuerdo y, por tanto, no habrá huelga, además de que los términos del convenio se darán a conocer este fin de semana por medio de un escueto boletín.

No a la huelga

En tanto, la opositora Alianza Nacional Democrática de Trabajadores Petroleros continúa recabando firmas contra la eventual huelga en Petróleos Mexicanos. Julio César Rodríguez, coordinador de esa agrupación, reveló que los propios directivos de Pemex en los complejos petroquímicos han llamado a los disidentes para consultarles su postura acerca de una posible suspensión de labores.

"Los jefes nos preguntan si estaríamos de acuerdo en trabajar el 2 de octubre, en caso de que la dirigencia sindical rechazara la propuesta de Pemex, y nosotros les decimos que sí, šclaro que sí trabajamos!, y no seríamos esquiroles sino opositores que refrendan la voluntad del pueblo", agregó Rodríguez.

La consulta de la alianza democrática es aplicada principalmente en los complejos petroquímicos de los estados de Tabasco y Veracruz, así como en secciones sindicales ubicadas en Chiapas y Salamanca, Guanajuato, en donde la oposición tiene mayor presencia.

"El rechazo (a la huelga) es general, de cada 10 trabajadores consultados, sólo uno se niega a firmar. Los obreros no están dispuestos a poner en riesgo la fuente de sus ingresos y a dañar la economía del país...si los líderes tienen la culpa de algo, que paguen", manifestó Julio César Rodríguez en entrevista con este diario.