La relación con el gobernador ha sido "negativa", dice la rectora Cabrera Muñoz
La universidad queretana reclamaría ante la Corte recursos que le escatima Loyola
JOSE GALAN Y MARIANA CHAVEZ ENVIADO Y CORRESPONSAL
Queretaro, Qro., 23 de septiembre. Al cabo de cinco años de una relación tirante y conflictiva con el gobierno panista de esta entidad, que ha retenido recursos federales destinados a construcción y mantenimiento de instalaciones, la universidad pública de los queretanos analiza una alternativa final: interponer una demanda de amparo ante la justicia federal contra actos de la autoridad encabezada por Ignacio Loyola Vera.
El caso de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ) constituye un ejemplo de los riesgos y obstáculos que puede enfrentar el sistema de educación superior pública ante un gobierno surgido de Acción Nacional que, como se reproduce a nivel nacional, tiene como prioridad la atención a la educación privada y el impulso de las "universidades tecnológicas" como fuente de mano de obra calificada, por encima de las demandas sociales de instrucción profesional.
En el estado la cobertura de la demanda de educación superior es similar a las cifras nacionales: casi 20 por ciento de los jóvenes de entre 19 y 24 años. De esta cifra, 30 por ciento corresponde a la UAQ, que ha visto en cinco años disminuir su capacidad de atención a los jóvenes queretanos de escasos recursos que buscan una oportunidad de ascender en la escala social.
"Ha sido una relación tensa, negativa", reconoce la rectora de la UAQ, María Dolores Cabrera Muñoz, quien fuera electa en diciembre de 1997 por la mayoría del Consejo Universitario, sin intervención del gobierno del estado, y que al igual que su antecesor ha debido enfrentar el menosprecio, la burla y la grosería de las autoridades estatales, empezando por el propio Loyola Vera -ahijado político de Diego Fernández de Cevallos-, quien se negó a otorgar una entrevista a La Jornada "por razones de agenda".
Según la Secretaría de Educación Pública estatal, el subsidio actual de la UAQ es de 516 millones 988 mil pesos. De esa suma, 343 millones corresponden al subsidio federal y 173 millones 985 mil al estatal. Pero según cifras de la Secretaría de Educación Pública, el subsidio federal es de 343 millones de pesos, pero el estatal es de sólo 67 millones 964 mil pesos. Una diferencia no explicada por las autoridades locales.
Mientras, la situación de deterioro de la UAQ se mantiene: alumnos que deben tomar clases en las gradas del estadio o en las canchas de basquetbol porque carecen de aulas; maestros que dan clases gratis a alumnos de excelencia pero rechazados porque la casa de estudios no tiene espacio para darles cabida; recursos federales etiquetados por la Cámara de Diputados que son retenidos por la autoridad estatal, y una comunidad universitaria que ha protestado en las calles por lo que califica de "cerrazón" del gobierno estatal.
"Estamos analizando la posibilidad de intervenir por la vía legal, lejos de actitudes políticas y mediante un juicio de amparo para obtener los recursos que por ley federal nos corresponden -unos 45 millones de pesos- y realizar la construcción de infraestructura que necesitamos urgentemente", reveló en entrevista la rectora de la UAQ.
"Esos recursos no se los vamos a dar si no aceptan que sea la Secretaría de Obras Públicas del gobierno del estado la que haga la licitación de los trabajos que a su juicio considere pertinentes", dijo el secretario de Educación Pública de un gobierno al que le "sobraron" 600 mil pesos para regalárselos al Tecnológico de Monterrey campus Querétaro, de donde egresó del gobernador Loyola Vera.
"No le vamos a entregar esos recursos a la UAQ si no nos informan para qué los quieren, qué van a construir y cómo le van a hacer", insistió el secretario estatal de Educación Pública, para quien la autonomía de la universidad no tiene nada que ver con los recursos que la Cámara de Diputados envía a la UAQ vía el ramo 33. "Tenemos facultades legales para utilizar esos recursos como mejor nos convenga", aseguró.
-Pero esos recursos ya van etiquetados por el Congreso de la Unión para la UAQ, y no pueden tener otro destino posible -se le comentó.
-Los recursos que vienen por el ramo 33 el gobierno del estado los puede utilizar como mejor le convenga-respondió.
Este es un momento crítico para la universidad estatal de Querétaro. No sólo los partidos políticos andan en preparándose para competir por la gubernatura del estado, sino que en la propia universidad el próximo jueves el Consejo Universitario dará inicio al proceso interno para la renovación de la rectoría. Dolores Cabrera anunció su intención de buscar la relección por otros cuatro años.
Pero los universitarios no descartan que como culminación de la campaña de Loyola Vera contra la universidad pública las autoridades pretendan meter las manos para colocar como rector a una persona cercana al PAN y a Fernández de Cevallos.
"Esa sería la culminación de esta campaña de desgaste emprendida por el gobernador incluso antes de tomar posesión del cargo", dijo el consejero universitario Salvador Acuña Guzmán, quien añadió que cualquier acción del gobierno para imponer un nuevo rector "se va a enfrentar con la unidad de la comunidad universitaria. Lo que primero debe hacer Loyola Vera es pagar a la universidad el dinero que le debe y dejar de atentar contra la autonomía", advirtió.
Por su parte, el profesor José Luis Mendoza Cedillo -uno de los 14 maestros que dan clases gratis a grupos especiales de alumnos que no pudieron ingresar a la universidad por falta de instalaciones- sostuvo que el gobierno de Loyola Vera debe darse cuenta de que la casa de estudios es "un activo social indispensable" del estado.
Los pretextos
En escrito enviado al gobernador Loyola Vera el pasado 5 de septiembre, la rectora de la universidad subraya que, de acuerdo con la ley orgánica de la UAQ, publicada en el Diario Oficial del estado el 2 de enero de 1986, son patrimonio de la universidad los subsidios federales, estatales y municipales, y que será la propia universidad la que realizará la administración de su patrimonio.
"Por ello, desde este momento dejo establecido que cualquier artificio, convenio o sugestión administrativa de tipo jurídico que pretenda limitar tales atributos a esta casa de estudios carecerá de valor jurídico atento a lo establecido a los lineamientos del Código Civil para el estado de Querétaro."
En el escrito, Dolores Cabrera pide al gobernador que explique en qué fecha recibió 13 millones 351 mil 400 pesos otorgados por el subsecretario Julio Rubio Oca, derivados del Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM) del año 2001. De igual forma, en qué fecha recibió 25 millones 219 mil pesos otorgados a la UAQ por el mismo subsecretario dentro del Fondo de Aportaciones Múltiples para 2002. La rectora pide que se precise de qué manera han sido administrados dichos capitales y por qué hasta ahora no han sido entregados por el Ejecutivo a la UAQ. Si se destinaron a otros rubros, que precise a cuáles.
En su respuesta, fechada el pasado 13 de septiembre, el gobernador Loyola Vera se declara "sorprendido sobremanera" por las precisiones solicitadas, y que se le demande la entrega de los fondos retenidos porque, argumentó, "el control y supervisión de dichos recursos queda a cargo de las autoridades", y por disposición expresa de la ley en la materia "son ingresos propios del estado de Querétaro que deben ser administrados y ejercidos por el gobierno del estado".
Consideró que la rectora tiene "una apreciación equivocada de la ley" y que el ejercicio de los recursos de 2001 y 2002 relativos a las obras en la UAQ deberá hacerse "conforme a licitaciones y demás mecanismos previstos en la Ley de Obras Públicas". Más adelante explicó, con base en un oficio de la Secretaría de Planeación y Finanzas del estado, que los recursos del FAM, destinados a la construcción, equipamiento y rehabilitación de la infraestructura física de la educación superior "fueron aplicados a las universidades tecnológicas".
Añadió que si la rectora o cualquier integrante de la comunidad universitaria quiere conocer el destino de los recursos, pues que consulte "la página web del gobierno del estado". Es más, el gobernador de plano subrayó que su gobierno "no está obligado a hacer entrega a la UAQ de los recursos" pero, eso sí, insistió en que su gobierno no se rige por "artificios".
"La situación es a todas luces irregular", consideró Dolores Cabrera en su despacho de rectoría. "Seguiremos exigiendo los recursos que nos destinó el Congreso de la Unión y que caprichosamente no se nos quieren proporcionar. Estoy dispuesta a llegar hasta donde tenga que llegar, incluso ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación mediante una controversia constitucional."