Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 14 de septiembre de 2002
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Espectáculos
Se exhibirán durante una semana en salas de la Cineteca, UNAM, Cinemex y Lumiere

Crean Ibercine, festival para promover cintas en castellano

JUAN JOSE OLIVARES

Con los objetivos de traer a México cintas iberoamericanas con posibilidad de ser comercializadas, de fomentar y crear espacios para el cine en castellano, ampliar el ámbito para la exhibición de este cine tanto en salas del país como del extranjero, así como recuperar el público mexicano para el cine que no es común y para aquél producido en México, surge Ibercine, festival que del 20 de septiembre al 31 de octubre, "abrirá el abanico de posibilidades para mostrar películas de calidad hechas en América Latina y España.

Organizado por la Filmoteca de la UNAM, Cineteca Nacional, Canal Cine Latino y Canela Films -con la complicidad de Macondo Cinematográfica, Cinemas Nueva Era y Videocine-, Ibercine ofrecerá películas de calidad reconocida tanto en sus países como en el extranjero, las cuales no tuvieron la oportunidad de ser vistas por un público más amplio, por lo que se pretende que se realize cada año y se extienda al interior de la República, además de hacerlo itinerante a todos los países de Iberoamérica.

"Queremos traer cine latinoamericano que esté bien hecho y que pueda ser comercializable, para así abrir las posibilidades a la audiencia. El problema no es que se subestime al público, el problema es que no se le da la variedad que necesita. En los multicines te proyectan El hombre araña en cuatro salas, qué posibilidad dan para que puedan entrar otras cintas. Lo que necesitamos son espacios. En este caso Cinemex ha dado la oportunidad al cine cultural", comenta Laura Ruiz, directora de Canela Films.

Otro de los propósitos de este festival (que tiene como esquema seis películas, seis semanas en seis salas diferentes) es compartir tradiciones, modos de vida y que, a través de la lengua, se pueda expandir el horizonte de las cintas hechas en un mismo idioma. También el recuperar a 400 millones de espectadores potenciales en Iberoamérica. Como lo comenta a su vez Claudia Rivera, socia de Canela Films, "el cine subtitulado al español es la norma de exhibición comercial, pero un porcentaje de la población mexicana, si acaso acude al cine como entretenimiento, en realidad asiste a leer por 90 minutos y no a disfrutar de la obra".

"Lo que se necesita es mostrar las cintas para que la gente decida si le interesa o no, a partir de allí los exhibidores sabrán, para ver la posibilidad de que adquieran las cintas", argumenta por su parte Ruiz.

Agrega: ''Evidentemente creo que no hay interés por parte de las grandes distribuidoras y exhibidoras, que son los que tienen copadas las salas, por mostrar este tipo de cine, porque se les quita gran cantidad de público".

-¿Se subestima a la gente?

-Los estadunidenses invierten mucho en promoción porque ya recuperaron el costo de su película dentro de su propio territorio. No creo que subestimen a la audiciencia nacional, más bien ellos subestiman a su propio público, porque es lo que producen para su audiencia y el resto es ganancia, pero evidentemente no les conviene que haya otro tipo de materiales y la gente ya está acostumbrada. Pero de pronto se enteran que existen películas latinomericanas o españolas que son muy buenas pero que ya se les fue el avión (tiempo de proyección), porque primero le dan prioridad a los estrenos estadunidenses, pero no es privativo de México, eso pasa en todo el mundo. En México, 99.99 por ciento es cine estadunidense.

Los seis largometrajes que se exhibirán son: Tierra extranjera (Walter Salles, 1995), Yepeto (de Eduardo Calcagno, Argentina 1999); 25 watts (Juan Pablo Rebella y Pablo Stoll, Uruguay 2001); Taxi para tres (Orlando Lübbert, Chile 2001); El acordeón del diablo (Stefan Schwiertert, Colombia-Alemania, 2001), y Una de dos (Marcel Sisniega, México 2000).

"Queremos que el cine iberoamericano no sea una cuestión cultural, sino abrir las posibilidades que hay en el mundo para todas las cinematografías, que esto sea redituable y que el público tenga más acceso a este tipo de materiales que desconce por completo", remata Laura Ruiz.

Todas las cintas se exhibirán una semana en cada una de las siguientes salas: Cineteca Nacional, Julio Bracho (UNAM), Cinemex Mazaryk, Cinemex Altavista, Cinemex WTC y Lumiere Reforma.

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