Las Aguilas, pese a un evidente conformismo, superaron 2-1 a Necaxa

América logró su cuarto triunfo al hilo

El América fue luz y sombra. En el primer tiempo ofreció variantes ofensivas y consiguió una cómoda ventaja de 2-0. Pero en la segunda parte mostró conformismo y permitió la reacción del Necaxa, que se acercó en el marcador, pero no tuvo más recursos ofensivos y cayó 2-1, por lo que no hubo revancha de la final del torneo anterior.

Las Aguilas consiguieron su cuarto triunfo consecutivo, en igual número de partidos, con lo que treparon al segundo lugar del grupo uno y de la clasificación general, con 12 puntos, por 13 del Toluca.

Rayos, en tanto, rompió racha de dos victorias al hilo, en el partido que inició con un homenaje a Luis Roberto Alves, por su trayectoria y sus 200 goles. "Soy un afortunado. Dios ha sido muy generoso conmigo", expresó Zague a los aficionados, que tuvieron una escasa asistencia al estadio Azteca.

América dominó el inicio y tuvo múltiples llegadas que se reflejaron en el marcador al 24, con gol de José Antonio Castro, quien ingresó por el centro a pase filtrado de Christian Patiño, aprovechó la mala salida de Nicolás Navarro y anotó el 1-0 con la portería solitaria.

El 2-0 cayó al 35, en un tiro libre que Pável Pardo cobró por la izquierda y Duilio Davino alcanzó a meter la pierna para anotar, mientras Navarro quedó estático.

Todo se prestaba para una goleada del equipo de Coapa, pero Mario Carrillo replegó a su escuadra para el complemento y el hasta entonces inofensivo Necaxa reaccionó con el 2-1 al 72. Miguel Acosta aprovechó una mala salida de la defensa amarilla y con un punterazo venció a Adolfo Ríos.

El brasileño Flavio Barros tuvo dos oportunidades, pero se mostró errático en el remate final.

Cuauhtémoc Blanco, quien estaba resentido del tobillo derecho, pasó la mayor parte del partido en el césped, ante las constantes faltas de la ruda defensa rojiblanca.

Por cierto, el ser relevado al minuto 54, el chileno Iván Zamorano lanzó malas palabras a su entrenador.

Aceptable arbitraje de Gilberto Alcalá.