El auto judicial de Garzón intenta vincular a la coalición vasca con los etarras

Fallecido ex dirigente de Batasuna, acusado de ser "delegado" de ETA para apoyos internacionales

México, Dominicana, Nicaragua, El Salvador, Venezuela y Cuba, santuarios, según el juez

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 31 de agosto. El ex dirigente de Batasuna Gorka Martínez Bilbao, fallecido recientemente, figura en el auto judicial decretado el lunes por el juez Baltasar Garzón, en el que se ordenó la suspensión de todas las actividades de la coalición nacionalista, do-cumento que señala a Martínez como "de-legado" supuestamente designado por ETA para tejer apoyos y dar soporte a sus militantes ocultos en México y otros países, como República Dominicana, Nicaragua, El Salvador, Venezuela y Cuba.

Martínez realizó varios viajes a México entre 1996 y el año pasado, época en la que fungió como responsable de las relaciones internacionales de la coalición, que entonces se conocía como Herri Batasuna (HB).

Era, además, miembro de la Mesa Nacional y estaba en la asociación Xaki, a la que Garzón consideró posteriormente como "el aparato de relaciones exteriores" de ETA.

Gorka Martínez murió el pasado 16 de junio en Bilbao, a los 54 años, debido a un padecimiento cardiaco por el que fue intervenido en dos ocasiones. Desde joven militó en la izquierda separatista vasca y siempre lo hizo desde las organizaciones creadas en torno al Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV) y a Herri Batasuna-Euskal Herritarrok-Batasuna.

Sus tareas, al menos desde 1996 hasta el año pasado, consistían en fomentar las relaciones internacionales de la coalición en países como México, El Salvador, Nicaragua, Cuba, Venezuela y Francia, así como prestar asistencia legal y sanitaria a los "deportados", y difundir en el exterior las proclamas separatistas de su formación.

En 1996 se convirtió en miembro de la comisión de deportados y responsable del área de relaciones internacionales de HB; en esta época, como miembro de la Mesa Nacional, fue detenido y condenado a siete años de cárcel por el Tribunal Supremo, si bien sólo permaneció año y medio en prisión una vez que una sentencia posterior, en esta ocasión emitida por el Tribunal Constitucional español, ordenó la puesta en li-bertad de los 23 dirigentes de Batasuna al no encontrar razones suficientes que implicaran a estas personas con ETA.

Luego, Martínez continuó sus funciones desde una asociación creada por dirigentes y militantes abertzales, denominada Xavi, la misma que a un año de su creación fue proscrita por Garzón, quien además ordenó las detenciones de todos sus integrantes.

El juez atribuye a Martínez la autoría de un documento titulado Hacia una redefinición y reordenación de la política internacional, que supuestamente fue la base de la restructuración de las relaciones externas del MLNV y de la propia ETA.

La supuesta conexión

Esta operación ordenada por Garzón se inició precisamente a raíz de un viaje a México de otros dos miembros de Xavi, Iñigo Elkoro y Mikel Korta, quienes fueron detenidos a su llegada al aeropuerto de Madrid-Barajas, horas antes de que fueran arrestadas en el País Vasco otras seis personas, todas ellas militantes de Xavi.

Un año después de las detenciones un nuevo fallo, esta vez emitido por la sala de lo penal de la propia Audiencia Nacional, rechazó las hipótesis de Garzón sobre la supuesta implicación de los detenidos con ETA, por lo que ordenó la puesta en libertad, que en el caso de Martínez Bilbao fue bajo una fianza de unos 10 mil dólares, ya que estaba acusado de "colaboración con banda armada", una vez que no se pudo probar su "pertenencia" a ETA.

El auto de la sala desestimó lo considerado por Garzón, quien sin embargo mantiene la misma hipótesis en su reciente auto, donde afirma que "es claro, y así ha de re-conocerlo este tribunal, que ninguna apariencia de ilicitud presentan, en cuanto ta-les, los fines de la Asociación Europea Xavi, que actúa públicamente y se encuentra legalmente constituida".

Prestar asistencia legal o sanitaria "a los deportados en el extranjero, realizar actuaciones para evitar que prosperen las peticiones de extradición, criticar el sistema legal español, promover el reconocimiento internacional del derecho a la autodeterminación e, incluso, difundir dentro y fuera de España la denominada Alternativa Democrática de Euskal Herria, son conductas que, por sí, carecen de significación delictiva, independientemente de que se realicen por una persona individual o, conjuntamente, por varias personas asociadas a tal fin".

Gorka Martínez realizó además otros viajes como representante de relaciones internacionales de HB, entonces un partido le-gal, a Argelia, Santo Tomé y Príncipe, Re-pública Dominicana y Venezuela.

Según Garzón, Martínez utilizaba el alias de Zelai en los documentos del MLNV, y también viajó a El Salvador y Nicaragua.

El juez también fue corregido por los magistrados de la sala en cuanto a las tesis que tenía sobre la supuesta condición de Martínez como miembro de ETA, al sostener que "del contenido de los anteriores documentos cabe deducir que Gorka Martínez Bilbao participó en alguna reunión de la Asociación Europea Xavi, en la que se consideró su desaparición".

También, "que tal posibilidad era conocida por los miembros integrados en la organización terrorista. Pero lo que, en este mo-mento al menos, no resulta de las actuaciones sumariales, es que fuera este procesado quien promovió, a instancia de ETA, la desaparición de la entidad asociativa".